El tiempo es el libro donde se escriben los hechos con tinta indeleble, cada día es una página en blanco, al amanecer, tenemos la oportunidad de escribir de propia intención, el título, y en el transcurrir de las horas se va plasmando con letra fina, cada una de las frases, acciones y vivencias experimentadas, hasta llegar a la noche, donde es posible escribir en una frase, un resumen matizado con un dejo de reflexión, antes de que los sueños vuelvan a alimentar el alma, el espíritu y el corazón, con las emociones, los sentimientos y las acciones, que llenarán la página del día que volverá a asomarse infaliblemente, al transcurrir del movimiento enloquecido de las manecillas.
En esta dinámica constante, un buen día la inspiración se presentó, era el momento para dejar que los sueños, abandonaran la comodidad de la oruga y emprendieran el vuelo, en la majestuosidad de la mariposa, era el momento de escribir un capítulo pequeño, pero importante, en aquella página en blanco de aquel día, del naciente mes de la patria del año 2016. El tema que ocupaba la atención de los medios de comunicación y de la sociedad en su conjunto, era la muerte repentina de una gran figura del ámbito musical de México y algún sector del mundo, su nombre artístico “Juan Gabriel”. El tema se imponía de forma natural, escribir unas frases en su honor, era dejar testimonio del acontecimiento en el baúl particular de los recuerdos.
Pero siempre existen personas que se encuentran en el sendero de las coincidencias, emisarios que hacen que el destino se cumpla, aun cuando no es posible entenderlo en el momento. El escrito en honor al divo, es compartido en medio de una tarde de lectura, que más que eso, era el encuentro de almas que comulgan en el que hacer de una misma forma de pensar, de ser y de hacer. Y entonces de la vista, nace el gusto y luego el buen deseo, que más bien adquiere tintes de una orden, ¡ese escrito debe ser publicado!, para que más personas lo disfruten.
Es ahí donde el novel articulista, se ve casi obligado a llevar su escrito a una Casa Periodística, con el temor y la incertidumbre de ser aceptado, incluso atendido, sin embargo, la atención y el buen trato recibido del personal del Periódico El Sol de Parral, generan que no solo se publique ese escrito en esa semana, sino un escrito cada semana a lo largo ya de 5 años.
La distinción de ser merecedor de la atención, que le dispensan los lectores a los escritos semanales, hace que este plebeyo se sienta como en un palacio.
Gracias a esta Casa Periodística El Sol de Parral, por la oportunidad brindada. Gracias a las y los lectores, son ellos quienes, a través de sus críticas constructivas y sus palabras de aliento, los que despiertan la motivación y el interés de continuar de manera constante con este hobby.
Mientras el libro continúe abierto, mientras exista una página en blanco y pueda ser merecedor de la atención de los lectores, permitiéndome entrar en el palacio de su gusto, éste plebeyo tratará de seguir intentando escribir algunos versos.
Gracias por el favor de su atención, a lo largo de estos 5 años. ¡iremos por un poco más!
