/ viernes 26 de abril de 2024

Degustando la vida / Aprendamos a ser como los niños: alegres e inocentes

Se acerca el Día del Niño, es una fecha especial que nos invita a reflexionar sobre la importancia de la infancia, así como a celebrar la alegría y la inocencia de los más pequeños. Es un recordatorio de que todos los niños merecen amor, cuidado, protección y la oportunidad de crecer y desarrollarse en un entorno seguro y saludable. En este día, reflexionamos sobre la responsabilidad que como sociedad tenemos hacia los niños, de garantizarles sus derechos fundamentales, como el derecho a la educación, la salud, la protección y el juego.

También nos recuerda la importancia de escuchar y respetar las opiniones y necesidades de los niños, involucrándolos activamente en las decisiones que afectan sus vidas. El Día del Niño es un momento para celebrar la inocencia, la curiosidad y la creatividad que caracterizan a la infancia.

Es una oportunidad para fomentar el vínculo entre padres, familiares y niños, creando recuerdos felices y compartiendo momentos de diversión y afecto. Además, este día nos lleva a reflexionar sobre los desafíos que enfrentan muchos niños en todo el mundo, como la pobreza, el acceso limitado a la educación y la violencia.

Nos insta a trabajar juntos como sociedad para proteger y promover el bienestar de todos los niños, brindándoles las oportunidades y el apoyo que necesitan para alcanzar su máximo potencial, el Día del Niño es una ocasión para celebrar la niñez, reflexionar sobre nuestras responsabilidades hacia los niños y comprometernos a construir un mundo donde todos los niños puedan crecer felices, saludables y seguros.

También la niñez, como cualquier otro ciclo humano, puede ser una etapa dura; en la niñez nos abocamos a la gran tarea del descubrimiento y la exploración de la realidad y de la vida que nos rodean; nos auto conocemos permanentemente y comenzamos la socialización con otras personas, insertándonos en una familia y en el circuito de otras relaciones, nosotros ya no somos niños, sin embargo, alguna vez lo hemos sido; cuando recordamos la niñez y evocamos al niño que fuimos podemos sentir diversas emociones: Alegría, nostalgia, agradecimiento o quizás, también, por qué no, otras sensaciones no tan positivas.

Cuando te conectas con el niño que fuiste, el que lleva tu nombre y tu historia, ¿qué imagen es la que viene?; ¿cuál es el retrato en el que te ves y te reconoces a ti mismo?; ¿qué lugares recuerdas?; ¿qué olores te son familiares?; ¿qué paisajes se dibujan?; ¿qué voces escuchas?; ¿qué anécdotas recuerdas?...

Es un momento para apreciar la importancia del juego, la creatividad y la exploración en el desarrollo de los niños, y para comprometernos a proporcionarles un ambiente que fomente su crecimiento físico, mental y emocional.

Además, el Día del Niño nos brinda la oportunidad de celebrar la diversidad y la singularidad de cada niño, reconociendo que todos merecen ser tratados con dignidad y respeto, independientemente de su origen, género, orientación sexual, religión o cualquier otra característica, el Día del Niño es un recordatorio de que los niños son un tesoro invaluable que debemos proteger, cuidar y nutrir.


Nos invita a reflexionar sobre nuestro compromiso con su bienestar y a trabajar juntos para construir un mundo en el que todos los niños puedan crecer felices, saludables y seguros. Los niños son como el amanecer de cada nuevo día, lleno de esperanzas y alegrías, por eso el 30 de abril que se conmemora el día del niño, les deseo a todos los niños un feliz y grandioso día,

Felicidades: Estivaliz, Fernanda, Dieguito, Roberto Jr. (Poroso), Mi Sofy, Meño, Mateo y Fila.

Steve Sánchez Ribota

Se acerca el Día del Niño, es una fecha especial que nos invita a reflexionar sobre la importancia de la infancia, así como a celebrar la alegría y la inocencia de los más pequeños. Es un recordatorio de que todos los niños merecen amor, cuidado, protección y la oportunidad de crecer y desarrollarse en un entorno seguro y saludable. En este día, reflexionamos sobre la responsabilidad que como sociedad tenemos hacia los niños, de garantizarles sus derechos fundamentales, como el derecho a la educación, la salud, la protección y el juego.

También nos recuerda la importancia de escuchar y respetar las opiniones y necesidades de los niños, involucrándolos activamente en las decisiones que afectan sus vidas. El Día del Niño es un momento para celebrar la inocencia, la curiosidad y la creatividad que caracterizan a la infancia.

Es una oportunidad para fomentar el vínculo entre padres, familiares y niños, creando recuerdos felices y compartiendo momentos de diversión y afecto. Además, este día nos lleva a reflexionar sobre los desafíos que enfrentan muchos niños en todo el mundo, como la pobreza, el acceso limitado a la educación y la violencia.

Nos insta a trabajar juntos como sociedad para proteger y promover el bienestar de todos los niños, brindándoles las oportunidades y el apoyo que necesitan para alcanzar su máximo potencial, el Día del Niño es una ocasión para celebrar la niñez, reflexionar sobre nuestras responsabilidades hacia los niños y comprometernos a construir un mundo donde todos los niños puedan crecer felices, saludables y seguros.

También la niñez, como cualquier otro ciclo humano, puede ser una etapa dura; en la niñez nos abocamos a la gran tarea del descubrimiento y la exploración de la realidad y de la vida que nos rodean; nos auto conocemos permanentemente y comenzamos la socialización con otras personas, insertándonos en una familia y en el circuito de otras relaciones, nosotros ya no somos niños, sin embargo, alguna vez lo hemos sido; cuando recordamos la niñez y evocamos al niño que fuimos podemos sentir diversas emociones: Alegría, nostalgia, agradecimiento o quizás, también, por qué no, otras sensaciones no tan positivas.

Cuando te conectas con el niño que fuiste, el que lleva tu nombre y tu historia, ¿qué imagen es la que viene?; ¿cuál es el retrato en el que te ves y te reconoces a ti mismo?; ¿qué lugares recuerdas?; ¿qué olores te son familiares?; ¿qué paisajes se dibujan?; ¿qué voces escuchas?; ¿qué anécdotas recuerdas?...

Es un momento para apreciar la importancia del juego, la creatividad y la exploración en el desarrollo de los niños, y para comprometernos a proporcionarles un ambiente que fomente su crecimiento físico, mental y emocional.

Además, el Día del Niño nos brinda la oportunidad de celebrar la diversidad y la singularidad de cada niño, reconociendo que todos merecen ser tratados con dignidad y respeto, independientemente de su origen, género, orientación sexual, religión o cualquier otra característica, el Día del Niño es un recordatorio de que los niños son un tesoro invaluable que debemos proteger, cuidar y nutrir.


Nos invita a reflexionar sobre nuestro compromiso con su bienestar y a trabajar juntos para construir un mundo en el que todos los niños puedan crecer felices, saludables y seguros. Los niños son como el amanecer de cada nuevo día, lleno de esperanzas y alegrías, por eso el 30 de abril que se conmemora el día del niño, les deseo a todos los niños un feliz y grandioso día,

Felicidades: Estivaliz, Fernanda, Dieguito, Roberto Jr. (Poroso), Mi Sofy, Meño, Mateo y Fila.

Steve Sánchez Ribota