Es un mito que el urólogo sea el médico que solo ve problemas del hombre, pensando que solo trata el aparato genital masculino y próstata, considerándose como contraparte de un ginecólogo, siendo esto FALSO, el Urólogo es capaz de consultar a hombres pero también a mujeres; esto es por que dentro de la especialidad estudia todas las enfermedades respecto a las estructuras de los riñones y del aparato urinario, extra a las enfermedades del aparato genital masculino.
¿También puede ver niñas? ¡Claro! , incluso llega a realizar procedimientos para corregir malformaciones en el aparato urinario en los bebés, es una de las especialidades quirúrgicas (que pueden operar) más completas, llegando a valorar problemas de la vejiga, riñones, glándulas suprarrenales, próstata, pene, escroto, testículos, epidídimo, uretes, vía seminal, uretra, piso pélvico.
Todas las estructuras que anatómicas que incluye la especialidad hacen que incluya ambos sexos, por ejemplo nefrolitiasis, o piedras en los riñones, es un problema de salud que en ocasiones puede llegar a requerir una operación; este procedimiento quirúrgico lo realiza el urólogo pudiendo ocupar varias técnicas o abordajes quirúrgicos, dependiendo de su preparación o los recursos tecnológicos con los que cuente.
También en las mujeres que se les "cae la vejiga o la matriz”, es uno de los médicos que pueden operar para hacer un levantamiento del piso pélvico y ofrecer el seguimiento después de la cirugía ofrecer la rehabilitación, así como ordenar y valorar los estudios de seguimiento.
Puede valorar desde enfermedades comunes como una infección de vías urinarias o ser el especialista de elección cuando esas infecciones son recurrentes o recidivantes, llegando a profundizar más sobre las posibles causas para tratar de fondo la enfermedad para que no regrese.
Este médico especialista es quien realiza también la vasectomía para esterilizar a los hombres para no tener hijos, pero si un hombre se arrepiente podría hacer una reconexión en algunos casos (no siempre es posible), en algunos casos que se tenga dificultad para concebir en un apareja sería el urólogo el encargado de valorar al hombre mientras en las mujeres en este caso sería el ginecólogo.
Los hombres deberíamos acudir con un urólogo a partir de los 40 años para una valoración, teniéndose la falsa idea de que cada vez que se acuda con el urólogo el médico haría una exploración rectal para revisar la próstata, esto es falso, la exploración por el recto se utiliza cuando hay alguna sospecha de que este inflamada la próstata y puede apreciarse esto con ultrasonido e indirectamente con un estudio en sangre llamado Antígeno Prostático Específico, el cual en rangos generales debería estar entre 0 a 4, subiendo un poco el rango normal con la edad.
Dentro de la consulta de especialidad es importante llevar los medicamentos que tenga indicados de por vida y aquellos que me hayan indicado para el problema por el que acudo con el especialista, así como llevar los estudios que me haya realizado, esto le da una idea al urólogo sobre tratamientos infructuosos o si con alguno sintió mejoría.
Confié en el médico especialista, recordando que una de las complicaciones más frecuentes que valora esta especialidad es el cáncer de próstata el cual detectándose oportunamente es curable sin secuelas, por ello es mejor prevenir a estar con la incertidumbre y dejar que avance una enfermedad que puede resultar mortal ante el miedo de ir a revisarme.
