/ jueves 22 de julio de 2021

Punto gélido | El Villismo de Doroteo

En aquel miércoles 5 de junio de 1878, en el rancho “La Coyotada”, ubicado en el Municipio de San Juan del Río, Durango, nació el primogénito de 5 hermanos, Doroteo Arango Arámbula, hijo del matrimonio formado por Agustín Arango y Micaela Arámbula, los hermanos de Doroteo fueron Hipólito y Antonio, además de sus hermanas Marina y Martina. En esa época existía una ley o una costumbre llamada “Derecho de Pernada”, la cual consistía en el privilegio que tenía el patrón, para pasar la primer noche con la mujer del recién casado; con base en ello hay quienes aseguran que el padre biológico de Doroteo no era Agustín, sino el hacendado que era descendiente de un Judío Alemán.

Los rasgos físicos de Doroteo eran de una tez Blanca, cabello rubio ensortijado, ojos verdes, bigote grande y espeso, además de una mente ágil y receptiva, y de una estatura aproximada de 1 metro con 80 centímetros.

El joven Doroteo a sus 16 años, se ve obligado a convertirse en un forajido, tras defender a su hermana Martina de 12 años, quien había sido violentada sexualmente por el patrón, por ello se ve obligado a huir, pues era buscado por asesino y su cabeza tenía precio. Dos años después en 1896, se incorpora circunstancialmente a un grupo gavillero, quienes lo habían hecho prisionero por sospechar que él era un espía. El jefe de ese grupo es Francisco Villa, una hacendado que había sido traicionado por envidias por los de su misma clase, es él, quien instruye a Doroteo en las primeras letras, además le enseña la estrategia o el arte de la guerra y también el arte de la guitarra.

Durante 7 años, Doroteo es parte de esa gavilla que se dedica a quitarle a los ricos hacendados sus bienes, para después repartírselos a los pobres. Hasta que, en el año de 1903, algunos integrantes de la gavilla son asesinados por la Cordada, Francisco Villa queda herido de muerte y antes de dar el último suspiro, le pide a Doroteo que no permita que el nombre de Francisco Villa termine, es en ese momento que Doroteo Arango se convierte en Francisco Villa.

Con tan solo 25 años de existencia, él intenta darle un nuevo rumbo a su vida y dejar atrás su actividad de forajido y gavillero, para ello se traslada a Parral, donde encuentra trabajo de albañil y también de minero, sin embargo, la cordada continuaba tras sus pasos y en 1906 se ve obligado a huir nuevamente, esta vez a la ciudad de Chihuahua.

La grave problemática de la desigualdad social y algunos otros factores, hacen que Francisco Villa se convierta en un Caudillo, al cual sigue cada vez más gente y finalmente termina por involucrarse y adoptar los ideales de la Revolución Mexicana. Para entonces se había convertido en el General Francisco Villa, quien además de su agilidad mental, también era un asombroso e incansable jinete, un hombre abstemio y deportista, tenía su propio lema que era: “Tierra y educación”, además el ideal de convertir a los estados de Coahuila, Durango y Chihuahua en emporios ganaderos y agrícolas.

En los años siguientes, la revolución le permitió ganar y perder diversas batallas, fue esa misma revolución la que lo consagró dándole muy diversos nombres y títulos de acuerdo al momento y las circunstancias. Pancho Villa encontró la muerte un viernes 20 de julio de 1923, a la edad de 45 años, en las calles de Hidalgo del Parral, Chih., desde ese momento la leyenda del General, ha tomado proporciones insospechadas al ser reconocido como uno de los jefes revolucionarios más importantes y aún más, como el mexicano más conocido en el mundo.

Criticado y repudiado por algunos, reconocido por muchos más, Francisco Villa sigue presente, cabalga sin restricción por las páginas de la historia y en los ideales de un villismo.

Ingeniero Industrial

En aquel miércoles 5 de junio de 1878, en el rancho “La Coyotada”, ubicado en el Municipio de San Juan del Río, Durango, nació el primogénito de 5 hermanos, Doroteo Arango Arámbula, hijo del matrimonio formado por Agustín Arango y Micaela Arámbula, los hermanos de Doroteo fueron Hipólito y Antonio, además de sus hermanas Marina y Martina. En esa época existía una ley o una costumbre llamada “Derecho de Pernada”, la cual consistía en el privilegio que tenía el patrón, para pasar la primer noche con la mujer del recién casado; con base en ello hay quienes aseguran que el padre biológico de Doroteo no era Agustín, sino el hacendado que era descendiente de un Judío Alemán.

Los rasgos físicos de Doroteo eran de una tez Blanca, cabello rubio ensortijado, ojos verdes, bigote grande y espeso, además de una mente ágil y receptiva, y de una estatura aproximada de 1 metro con 80 centímetros.

El joven Doroteo a sus 16 años, se ve obligado a convertirse en un forajido, tras defender a su hermana Martina de 12 años, quien había sido violentada sexualmente por el patrón, por ello se ve obligado a huir, pues era buscado por asesino y su cabeza tenía precio. Dos años después en 1896, se incorpora circunstancialmente a un grupo gavillero, quienes lo habían hecho prisionero por sospechar que él era un espía. El jefe de ese grupo es Francisco Villa, una hacendado que había sido traicionado por envidias por los de su misma clase, es él, quien instruye a Doroteo en las primeras letras, además le enseña la estrategia o el arte de la guerra y también el arte de la guitarra.

Durante 7 años, Doroteo es parte de esa gavilla que se dedica a quitarle a los ricos hacendados sus bienes, para después repartírselos a los pobres. Hasta que, en el año de 1903, algunos integrantes de la gavilla son asesinados por la Cordada, Francisco Villa queda herido de muerte y antes de dar el último suspiro, le pide a Doroteo que no permita que el nombre de Francisco Villa termine, es en ese momento que Doroteo Arango se convierte en Francisco Villa.

Con tan solo 25 años de existencia, él intenta darle un nuevo rumbo a su vida y dejar atrás su actividad de forajido y gavillero, para ello se traslada a Parral, donde encuentra trabajo de albañil y también de minero, sin embargo, la cordada continuaba tras sus pasos y en 1906 se ve obligado a huir nuevamente, esta vez a la ciudad de Chihuahua.

La grave problemática de la desigualdad social y algunos otros factores, hacen que Francisco Villa se convierta en un Caudillo, al cual sigue cada vez más gente y finalmente termina por involucrarse y adoptar los ideales de la Revolución Mexicana. Para entonces se había convertido en el General Francisco Villa, quien además de su agilidad mental, también era un asombroso e incansable jinete, un hombre abstemio y deportista, tenía su propio lema que era: “Tierra y educación”, además el ideal de convertir a los estados de Coahuila, Durango y Chihuahua en emporios ganaderos y agrícolas.

En los años siguientes, la revolución le permitió ganar y perder diversas batallas, fue esa misma revolución la que lo consagró dándole muy diversos nombres y títulos de acuerdo al momento y las circunstancias. Pancho Villa encontró la muerte un viernes 20 de julio de 1923, a la edad de 45 años, en las calles de Hidalgo del Parral, Chih., desde ese momento la leyenda del General, ha tomado proporciones insospechadas al ser reconocido como uno de los jefes revolucionarios más importantes y aún más, como el mexicano más conocido en el mundo.

Criticado y repudiado por algunos, reconocido por muchos más, Francisco Villa sigue presente, cabalga sin restricción por las páginas de la historia y en los ideales de un villismo.

Ingeniero Industrial