Parral está de fiesta, hoy dadas las circunstancias sanitarias el festejo es virtual, dos acontecimientos importantes a lo largo de la historia tienen lugar precisamente en el mes de julio; en primer lugar el día 14, fecha en la que se conmemora la fundación de la ciudad, acontecimiento que se dio en el año de 1631, hecho que se le reconoce al alférez real Don Juan Rangel de Biezma.
En segundo lugar el día 20, fecha en la que se conmemora el asesinato del mexicano más conocido en el mundo, el multifacético General Francisco Villa, hecho que tuvo lugar en el año de 1923, cuando en la esquina de la calle Juárez Y Barreda un hombre gritó “Viva Villa”, señal que anunciaba su muerte.
Los festejos se enmarcan en las fiestas denominadas “Jornadas Villistas”, lo cual genera en los pobladores y en los turistas alguna confusión, dándole poca relevancia al aniversario, en esta ocasión número 389 de la fundación de Parral y mucha a la conmemoración del aniversario luctuoso del afamado General.
De cualquier forma, Parral está y estará de fiesta en esta ocasión de una forma diferente, los festejos multitudinarios tendrán que esperar para los siguientes años, hoy la tecnología será la principal herramienta para no dejar apagar la llama, el ambiente de las llamadas “Jornadas Villistas”.
Como un sencillo y muy modesto homenaje a esta bella ciudad, tierra de gente buena, sencilla, trabajadora y de mucha Fe, dedico este poema en agradecimiento a su inestimable hospitalidad.
Parral y sus años
Entre valles y montañas preñadas de rico mineral, está mi vetusto pueblo llamado, Hidalgo del Parral. El expedicionario encontró en el cerro de la prieta, una razón para quedarse y la llamó “Mina la Negrita”. El cura Hidalgo, las parras y el mineral oriundo, te dan el nombre y el título de “La capital del mundo”. Por sus angostas calles deambula su rica historia, Biezma, Stallforth, Alvarado, vienen a la memoria. Con el fruto de sus entrañas los templos están construidos, con la Fe en San José tus hijos permanecen unidos. Son cultura y son revolución sus monumentos y sus edificios, Villa, Aurora Reyes, Montemayor, iconos de esos oficios. El pito de la mina es toda una tradición, nostalgia para el minero, servicio para la población. En el ambiente de Parral se percibe el olor a jales, en su gastronomía se degustan tacos, rayadas, dulces y tamales. Su viejo río “San Gregorio” adornado con sus puentes varios, motivo de dos inundaciones ejemplo de parralenses solidarios. En el deporte, para su gente, el béisbol es una religión, reconocidos en todo el estado Parral, casta de campeón. Su economía es muy peculiar comercio, minería y forestal, su nueva veta, el turismo, su visión, de la cultura capital. Cabalgata, motociclistas, cultura, fiesta, son las Jornadas Villistas, es la muerte del general la que atrae a todos los turistas. Sus hijos se sienten orgullosos de haber nacido en Parral, no por nada esta tierra hasta para morir, le gustó al General. Parral un pueblo que ingre, que da identidad, satisfacción, sus hijos siempre regresan y si se van, lo llevan en el corazón. 14 de julio de 1631 fecha de su fundación, casi 4 siglos después, Parral, es orgullo de la nación.
