/ viernes 7 de mayo de 2021

Mujer | Maternidades libres y voluntarias

Cuando las personas construimos nuestros proyectos de vida, solemos considerar una serie de pautas sociales que ejercen una influencia directa o indirecta sobre las decisiones que tomamos. Las mujeres, por décadas y décadas, hemos sido categorizadas como seres maternales, como si se tratara de algo implícito o de algo innato el ser madres. Así pues, ha ido transmitiéndose la creencia de que procrear es el destino de toda mujer, asociándose esto, por lo general, con las actividades domésticas y de crianza. No obstante, hoy día, la maternidad puede verse como una opción que toman algunas mujeres, pero sobre todo, la importancia de hacer referencia a ello, es considerar que el tener hijas e hijos es una decisión, formando parte de las decisiones que son tomadas con respecto al proyecto de vida personal. En ese sentido, se abandona la postura impositiva y van suprimiéndose los estereotipos que generan creencias del tipo de que aquellas mujeres que deciden no tener hijxs, no pueden verse realizadas como mujeres.

Partiendo de que la maternidad no es ni debe ser considerada como un destino ineludible, entonces ha de estimársele como un acto de responsabilidad y de plena libertad. Constantemente se hace invitación a que llevemos procesos de deconstrucción para derribar estereotipos y creencias basadas en el sexo y el género de las personas. Es innegable que nos encontramos en un momento histórico donde es urgente una reconstrucción sociocultural, con miras a la igualdad y a la equidad; en esa reconstrucción está la necesidad emergente de romper los mitos y develar las mentiras que han sido heredadas generación tras generación en relación con la maternidad, que nos han alejado de comprenderla y vivirla como un acto voluntario, informado y libre. Estado y sociedad están obligados al reconocimiento del derecho de las mujeres a decidir sobre su sexualidad y sobre su propio cuerpo.

Con mensajes como <<Mi opción. No su imposición>> <<Esperando el día en que las madres de todo México festejen por elección y no por obligación>> <<Por una maternidad libre y voluntaria>> <<Bienaventuradas las maternidades deseadas, porque ellas criarán infancias felices>> <<Ni llamado biológico, ni mandato social, la maternidad es decisión: No condición de mujer>> <<Día de las madres: una invención capitalista>>, en diversos países se ha exhortado a que la maternidad sea repensada como opción y no como mandato social y a que el día 10 de mayo sea la fecha del Día de las Maternidades Libres y Voluntarias. Así pues, se exige con acciones como esta, que sean puestos los cimientos para la construcción de sociedades justas e inclusivas, donde la igualdad y la equidad sean los principales ejes. A través de este medio se hace un llamado a concretar acciones dirigidas a la eliminación de los estereotipos de género que han obligado a las mujeres a asumir abnegadamente el rol reproductivo. Hagamos del 10 de mayo un día para la reflexión sobre la perspectiva de la maternidad desde el ejercicio de los derechos y la autodeterminación del cuerpo.

Por Yukary I. Morales

Cuando las personas construimos nuestros proyectos de vida, solemos considerar una serie de pautas sociales que ejercen una influencia directa o indirecta sobre las decisiones que tomamos. Las mujeres, por décadas y décadas, hemos sido categorizadas como seres maternales, como si se tratara de algo implícito o de algo innato el ser madres. Así pues, ha ido transmitiéndose la creencia de que procrear es el destino de toda mujer, asociándose esto, por lo general, con las actividades domésticas y de crianza. No obstante, hoy día, la maternidad puede verse como una opción que toman algunas mujeres, pero sobre todo, la importancia de hacer referencia a ello, es considerar que el tener hijas e hijos es una decisión, formando parte de las decisiones que son tomadas con respecto al proyecto de vida personal. En ese sentido, se abandona la postura impositiva y van suprimiéndose los estereotipos que generan creencias del tipo de que aquellas mujeres que deciden no tener hijxs, no pueden verse realizadas como mujeres.

Partiendo de que la maternidad no es ni debe ser considerada como un destino ineludible, entonces ha de estimársele como un acto de responsabilidad y de plena libertad. Constantemente se hace invitación a que llevemos procesos de deconstrucción para derribar estereotipos y creencias basadas en el sexo y el género de las personas. Es innegable que nos encontramos en un momento histórico donde es urgente una reconstrucción sociocultural, con miras a la igualdad y a la equidad; en esa reconstrucción está la necesidad emergente de romper los mitos y develar las mentiras que han sido heredadas generación tras generación en relación con la maternidad, que nos han alejado de comprenderla y vivirla como un acto voluntario, informado y libre. Estado y sociedad están obligados al reconocimiento del derecho de las mujeres a decidir sobre su sexualidad y sobre su propio cuerpo.

Con mensajes como <<Mi opción. No su imposición>> <<Esperando el día en que las madres de todo México festejen por elección y no por obligación>> <<Por una maternidad libre y voluntaria>> <<Bienaventuradas las maternidades deseadas, porque ellas criarán infancias felices>> <<Ni llamado biológico, ni mandato social, la maternidad es decisión: No condición de mujer>> <<Día de las madres: una invención capitalista>>, en diversos países se ha exhortado a que la maternidad sea repensada como opción y no como mandato social y a que el día 10 de mayo sea la fecha del Día de las Maternidades Libres y Voluntarias. Así pues, se exige con acciones como esta, que sean puestos los cimientos para la construcción de sociedades justas e inclusivas, donde la igualdad y la equidad sean los principales ejes. A través de este medio se hace un llamado a concretar acciones dirigidas a la eliminación de los estereotipos de género que han obligado a las mujeres a asumir abnegadamente el rol reproductivo. Hagamos del 10 de mayo un día para la reflexión sobre la perspectiva de la maternidad desde el ejercicio de los derechos y la autodeterminación del cuerpo.

Por Yukary I. Morales