/ miércoles 11 de enero de 2023

En sobremesa con Maxi | Jóvenes anclados en el presente

Hace algunos días al ir de compras en el supermercado me encontré con un amigo el cual ya tenía algunos años sin ver o saber que estaba haciendo con su vida, al platicar pude percatarme que en su mirada existía un gran brillo mientras me platicaba de cómo sus sueños se estaban haciendo realidad en una ciudad no tan distante.

En la conversación me hace mención de nuestra etapa universitaria y de los sueños que anhelábamos tener mientras estábamos sentados en el pupitre de nuestro salón, teníamos una visión muy parecida porque nuestra meta era estar en lugares en los que pudiéramos beneficiar e impactar a nuestro entorno social, espacios que permitieran sembrar semillas en la mentalidad de las personas y al paso del tiempo dichas semillas dieran un fruto extraordinario.

Nos había tocado estar juntos en diversas actividades que nos permitieron ser influencia a nuestra generación aun y cuando solo éramos unos chicos universitarios intentando conquistar al mundo desde un espacio muy reducido de personas.

Al terminar la carrera universitaria no volvimos a tener contacto y la vida tan apresurada de ambos no permitieron que tuviéramos contacto o coincidiéramos en proyectos de nueva cuenta hasta este momento. Resulta fascinante descubrir que una visión trabajada conquista hasta las fronteras más inciertas y difíciles, darte cuenta que mientras estas en una línea viendo hacia la meta existe otra persona con la misma visión, pero rompiendo los paradigmas de una ciudad más grande.

Recuerdo que cuando fue depositada en mi mente y corazón la necesidad sobre ser una herramienta que pueda usar otro ser humano para salir de donde se encuentra hizo una explosión dentro de mí, estamos muy afanados en las cosas que queremos para nosotros mismos que perdemos de vista el propósito para el cual fuiste creado.

Siendo honesto los últimos años incluyendo la pandemia han sido desafiantes porque cuando busco ser un salvavidas me doy cuenta que inclusive el salvavidas necesita ser rescatado por alguien más cuando las aguas se vuelven tormentosas.

En la conversación con mi amigo me hace ver que si no hubiera sido por nuestras conversaciones tal vez estaría en otro lugar muy distinto, quisiera tener la expresión adecuada de lo que sientes al tener un sueño, me imagino que lo has tenido, es como si dentro de nuestro cuerpo estuviera sucediendo un choque electrizante que te pone los bellos de la piel de punta por lo que en tu mente está visualizando.

Quisieras que todo el mundo pudiera conectarse a tu cabeza y ver el sueño como si fueran tú mismo así no batallarías para dar la interpretación adecuada de los hechos, eso mismo me pasa cuando pienso en cada adolescente y joven que va a nuestras secundarias, preparatorias y universidades, si tan solo pudieran ver y entender lo magníficos que son, aunque tal vez piensen lo contrario de sí mismos.

La razón por la cual me levanto todas las mañanas, asisto a mi trabajo y participo de una forma u otra en contacto con jóvenes es porque me mueve una generación hambrienta que desea llegar más allá de la luna, pero también están los que no encuentran una razón de existencia, corazones en los que pienso antes de dormir, corazones que vienen con golpes, abusos, lesiones y cicatrices.

Anclarte significa aferrarse tenazmente a una idea o actitud y quiero que estas generaciones de jóvenes se aferren y rompan el molde y demuestren que están hechos para hacer un cambio real en nuestro presente.

Lic. Maxi Joel Nevárez | Administración Gubernamental

Hace algunos días al ir de compras en el supermercado me encontré con un amigo el cual ya tenía algunos años sin ver o saber que estaba haciendo con su vida, al platicar pude percatarme que en su mirada existía un gran brillo mientras me platicaba de cómo sus sueños se estaban haciendo realidad en una ciudad no tan distante.

En la conversación me hace mención de nuestra etapa universitaria y de los sueños que anhelábamos tener mientras estábamos sentados en el pupitre de nuestro salón, teníamos una visión muy parecida porque nuestra meta era estar en lugares en los que pudiéramos beneficiar e impactar a nuestro entorno social, espacios que permitieran sembrar semillas en la mentalidad de las personas y al paso del tiempo dichas semillas dieran un fruto extraordinario.

Nos había tocado estar juntos en diversas actividades que nos permitieron ser influencia a nuestra generación aun y cuando solo éramos unos chicos universitarios intentando conquistar al mundo desde un espacio muy reducido de personas.

Al terminar la carrera universitaria no volvimos a tener contacto y la vida tan apresurada de ambos no permitieron que tuviéramos contacto o coincidiéramos en proyectos de nueva cuenta hasta este momento. Resulta fascinante descubrir que una visión trabajada conquista hasta las fronteras más inciertas y difíciles, darte cuenta que mientras estas en una línea viendo hacia la meta existe otra persona con la misma visión, pero rompiendo los paradigmas de una ciudad más grande.

Recuerdo que cuando fue depositada en mi mente y corazón la necesidad sobre ser una herramienta que pueda usar otro ser humano para salir de donde se encuentra hizo una explosión dentro de mí, estamos muy afanados en las cosas que queremos para nosotros mismos que perdemos de vista el propósito para el cual fuiste creado.

Siendo honesto los últimos años incluyendo la pandemia han sido desafiantes porque cuando busco ser un salvavidas me doy cuenta que inclusive el salvavidas necesita ser rescatado por alguien más cuando las aguas se vuelven tormentosas.

En la conversación con mi amigo me hace ver que si no hubiera sido por nuestras conversaciones tal vez estaría en otro lugar muy distinto, quisiera tener la expresión adecuada de lo que sientes al tener un sueño, me imagino que lo has tenido, es como si dentro de nuestro cuerpo estuviera sucediendo un choque electrizante que te pone los bellos de la piel de punta por lo que en tu mente está visualizando.

Quisieras que todo el mundo pudiera conectarse a tu cabeza y ver el sueño como si fueran tú mismo así no batallarías para dar la interpretación adecuada de los hechos, eso mismo me pasa cuando pienso en cada adolescente y joven que va a nuestras secundarias, preparatorias y universidades, si tan solo pudieran ver y entender lo magníficos que son, aunque tal vez piensen lo contrario de sí mismos.

La razón por la cual me levanto todas las mañanas, asisto a mi trabajo y participo de una forma u otra en contacto con jóvenes es porque me mueve una generación hambrienta que desea llegar más allá de la luna, pero también están los que no encuentran una razón de existencia, corazones en los que pienso antes de dormir, corazones que vienen con golpes, abusos, lesiones y cicatrices.

Anclarte significa aferrarse tenazmente a una idea o actitud y quiero que estas generaciones de jóvenes se aferren y rompan el molde y demuestren que están hechos para hacer un cambio real en nuestro presente.

Lic. Maxi Joel Nevárez | Administración Gubernamental