¿A lo largo de tu vida has sentido que te desconectas de ti mismo, de lo que te rodea y muchas veces sin tener una razón?, te sientes perdida o perdido sin ganas de absolutamente nada, ves que aquello que te hacia feliz o que daba sentido a tu existir se desvanece , que las risas carcajadas de felicidad ya solo son sonrisas sin esa chispa que hacia brillar y vibrar tu alma, si alguna vez te has sentido de esta manera o te estas sintiendo así, este escrito es para ti y no es ninguna casualidad que llegara en este preciso momento, porque hay alguien que quiere que sanes desde adentro, que sanes tu alma, tu corazón, tu pasado y tu presente.
Tú al igual que yo, sentimos, nos lamentamos y sufrimos porque somos seres emocionales, nos vemos afectados por nuestros pensamientos, por lo que nos rodea, por las situaciones, las responsabilidades que en ocasiones pesan demasiado sobre nuestros hombros que nos impiden descansar y respirar libertad, manteniéndonos prisioneros en nuestras propias cárceles mentales pensando en lo que pudiera ser y no en lo puedo y debo hacer. El día de hoy te invito a que empieces a liberarte de esas cadenas que te mantienen atado a tu zona de confort o en ese lugar del que no quieres salir por miedo e inseguridades, hoy te digo, ¡basta!, no frenes más tu crecimiento, ve a por esos sueños, cumple con esas metas que has postergado que con el tiempo se han empolvado, levántate, sacúdete los miedos, escucha esas voces de amigos y familiares que te apoyan e invitan a salir adelante, tira a la basura aquellas opiniones que no te ayudan a avanzar.
En silencio empieza a unir las piezas de ese corazón roto, a confiar en ti, en que eres capaz de ponerte en marcha para hacer de tu presente la mejor, el mayor de las promesas “el vivir con amor hacia ti mismo, haciendo de cada día algo digno de ser recordado”, claro, no te digo que la vida será fácil, porque qué sería de ella sin esos retos, sin esas dificultades que nos hacen aprender, amar sin límite, reconociendo de qué tanto somos capaces. Tú fuerza reside en tu interior, en tus creencias y son mayor de lo que crees porque te son dadas a través de aquel que no se cansa, respira y entiende, el pájaro no tiene puesta la confianza en la ramita en donde se para sino en sus alas, y es momento de que abras las tuyas y eches a volar.
Empieza a reconocer las causas de tus tristezas, de tu sufrimiento, es momento de que vayas hacia a ti mismo, porque este el primer paso para sanar, así poco a poco recuperarte de esto que estas viviendo, no huyas del dolor, mira la herida y acéptala, será doloroso pero se debe aprender de ella a no huir, deja que te enseñe, no te reproches nada, recuerda: La vida te va enseñar tanto en las buenas como en las malas, eres tu quien debe reconocer las enseñanzas para no repetir los mismos errores, eres único al igual que tus posibilidades, no dejes que unos cuantos fallos definan quién eres, porque fuiste creado para algo más grande y necesitas empezar ahora.
Hoy estas roto, este herido, necesitas dedicación, atención, pero sobre todo mucho amor, ¡Vive!
Maxi Nevárez en Colaboración con Lic. Hugo Herrera
Li. Administración Gubernamental
