/ miércoles 31 de enero de 2024

Todo Mundo es tu Maestro | Las buenas relaciones con las personas

Existen diferentes estrategias para construir y apoyar la comunicación y la relación con las personas de nuestro entorno, ya sean compañeros de trabajo, familia o amigos. Tener una buena relación nos lleva a crear redes profesionales que facilitan el éxito no solo en nuestro desempeño laboral, sino también ayuda a desarrollar nuestra inteligencia emocional, la cual es indispensable en un mundo donde tenemos que compartir y vivir en sociedad. A continuación comparto un resumen exprés de algunas sugerencias para mejorar nuestras relaciones con las personas.

Sea un oyente atento. Escucha y no cambies el tema a menos que el orador haya terminado. Ten paciencia y no interrumpas. Escuche los sentimientos, matices y significados.

Presta atención al lenguaje corporal. Algunos expertos dicen que al menos el setenta por ciento de lo que se comunica se hace a través de la comunicación no verbal o lenguaje corporal. Mire al hablante y muéstrese atento, interesado y alerta. Por el contrario, cruzar los brazos, fruncir el ceño, recostarse en la silla, evitar el contacto visual, suspirar y sacudir la cabeza dice: "No me gustas y no quiero escuchar".

Se respetuoso. Muchas organizaciones están capacitando a los empleados sobre la importancia de la etiqueta comercial: el respeto y la consideración de los sentimientos y necesidades de los demás. Los buenos modales y el respeto son la base de toda relación sana. Las personas necesitan sentir que reciben la consideración y el aprecio que merecen, ya sea en el salón de clases, en el trabajo o en casa. Es especialmente importante tener la mente abierta y ser respetuoso y aceptar las diferentes culturas, géneros y experiencias de vida.

Use calidez y humor. Evita el sarcasmo y las bromas a expensas de los sentimientos de otra persona, pero no te tomes demasiado en serio ni tomes las cosas como algo personal. El humor tranquiliza a las personas y puede disipar la tensión. El ingenio y una sonrisa sincera crean calidez y comprensión y pueden abrir la puerta a una comunicación más efectiva.

Relacionarse con el estilo de la persona con quien se comunica.. Las personas aprenden, piensan y se relacionan de manera diferente. Saber esto puede ayudarlo a interactuar y trabajar de manera más efectiva con diversos grupos de personas, ya sean de diferentes partidos o religión.

Aprenda a ser parte de un equipo y respetar la diversidad y aprender a trabajar con una variedad de personas. También debe esforzarse cuando se tiene que hacer equipo. Se debe ser claros en las expectativas, los plazos, el compromiso y el seguimiento y respetando la diversidad.

Desarrolla empatía. La empatía es la capacidad de compartir las emociones, pensamientos o sentimientos de otras personas para comprenderlas mejor. Al asumir el papel del otro, puedes desarrollar la capacidad de ver y sentir la situación a través de sus ojos. Una actitud empática dice: “Estoy aquí contigo”. La empatía permite la distancia necesaria para mantener la objetividad para que el problema pueda ser resuelto.

Mantén la calma. Controla tus emociones y no pierdas los estribos. El que se enoja pierde. Busca que la otra persona se calme: “Veo que estás molesto y realmente quiero saber cuáles son tus preocupaciones. Por favor, hable más despacio”. Escuche el mensaje sin exagerar ni ponerse a la defensiva.

Escuche atentamente las preocupaciones y críticas de la otra persona. No interrumpa ni inicie su defensa. Concéntrate realmente en la otra persona.

En conclusión busquemos ser “huevo zen” no es fácil pero es posible. El esfuerzo por relacionarnos mejor con las personas es un bien para todos. Es parte de construir un mundo más civilizado, donde nos respetemos, escuchemos y desarrollemos nuestros potenciales humanos.

Adalberto Gutiérrez | Ingeniero Agrónomo

Existen diferentes estrategias para construir y apoyar la comunicación y la relación con las personas de nuestro entorno, ya sean compañeros de trabajo, familia o amigos. Tener una buena relación nos lleva a crear redes profesionales que facilitan el éxito no solo en nuestro desempeño laboral, sino también ayuda a desarrollar nuestra inteligencia emocional, la cual es indispensable en un mundo donde tenemos que compartir y vivir en sociedad. A continuación comparto un resumen exprés de algunas sugerencias para mejorar nuestras relaciones con las personas.

Sea un oyente atento. Escucha y no cambies el tema a menos que el orador haya terminado. Ten paciencia y no interrumpas. Escuche los sentimientos, matices y significados.

Presta atención al lenguaje corporal. Algunos expertos dicen que al menos el setenta por ciento de lo que se comunica se hace a través de la comunicación no verbal o lenguaje corporal. Mire al hablante y muéstrese atento, interesado y alerta. Por el contrario, cruzar los brazos, fruncir el ceño, recostarse en la silla, evitar el contacto visual, suspirar y sacudir la cabeza dice: "No me gustas y no quiero escuchar".

Se respetuoso. Muchas organizaciones están capacitando a los empleados sobre la importancia de la etiqueta comercial: el respeto y la consideración de los sentimientos y necesidades de los demás. Los buenos modales y el respeto son la base de toda relación sana. Las personas necesitan sentir que reciben la consideración y el aprecio que merecen, ya sea en el salón de clases, en el trabajo o en casa. Es especialmente importante tener la mente abierta y ser respetuoso y aceptar las diferentes culturas, géneros y experiencias de vida.

Use calidez y humor. Evita el sarcasmo y las bromas a expensas de los sentimientos de otra persona, pero no te tomes demasiado en serio ni tomes las cosas como algo personal. El humor tranquiliza a las personas y puede disipar la tensión. El ingenio y una sonrisa sincera crean calidez y comprensión y pueden abrir la puerta a una comunicación más efectiva.

Relacionarse con el estilo de la persona con quien se comunica.. Las personas aprenden, piensan y se relacionan de manera diferente. Saber esto puede ayudarlo a interactuar y trabajar de manera más efectiva con diversos grupos de personas, ya sean de diferentes partidos o religión.

Aprenda a ser parte de un equipo y respetar la diversidad y aprender a trabajar con una variedad de personas. También debe esforzarse cuando se tiene que hacer equipo. Se debe ser claros en las expectativas, los plazos, el compromiso y el seguimiento y respetando la diversidad.

Desarrolla empatía. La empatía es la capacidad de compartir las emociones, pensamientos o sentimientos de otras personas para comprenderlas mejor. Al asumir el papel del otro, puedes desarrollar la capacidad de ver y sentir la situación a través de sus ojos. Una actitud empática dice: “Estoy aquí contigo”. La empatía permite la distancia necesaria para mantener la objetividad para que el problema pueda ser resuelto.

Mantén la calma. Controla tus emociones y no pierdas los estribos. El que se enoja pierde. Busca que la otra persona se calme: “Veo que estás molesto y realmente quiero saber cuáles son tus preocupaciones. Por favor, hable más despacio”. Escuche el mensaje sin exagerar ni ponerse a la defensiva.

Escuche atentamente las preocupaciones y críticas de la otra persona. No interrumpa ni inicie su defensa. Concéntrate realmente en la otra persona.

En conclusión busquemos ser “huevo zen” no es fácil pero es posible. El esfuerzo por relacionarnos mejor con las personas es un bien para todos. Es parte de construir un mundo más civilizado, donde nos respetemos, escuchemos y desarrollemos nuestros potenciales humanos.

Adalberto Gutiérrez | Ingeniero Agrónomo

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