/ domingo 23 de julio de 2023

Desde la Capital | Sin revivir la ejecución

13 horas; jueves 20. El presidente llegó a la ex-Hacienda “La Coyotada” en San Juan del Río Durango, en el centenario luctuoso del Centauro del Norte en su cuna. Destaca la monumental figura del “Centauro del Norte” en su obelisco. Acompañaron al gobernador de Durango, el presidente; Luis Crescencio Sandoval González, secretario de SEDENA, J. Rafael Ojeda Durán Almirante de SEMAR, Rosa Isela Rodríguez Velázquez secretaria de seguridad pública y protección ciudadana; Luisa María Alcalde, secretaría de gobernación, el historiador Pedro Salmerón Sanjinés y demás autoridades de Durango.

El gobernador del estado, en uso de la palabra pidió a todas y todos: quiero que me ayuden a brindar un fuerte aplauso a quien hizo posible que estemos aquí. Es un sueño para nosotros que Usted esté en San Juan del Río. Le platiqué en el camino: cuando varios de los presentes éramos niños; en estos cables de luz -señalando los tendidos- con tres bolas amarillas; preguntamos ¿por qué? dijeron: “se ponían cada que venían los presidentes de la república al lugar donde nació Francisco Villa”. A mí, nunca me tocó ver a alguno. Creo, hoy es un sueño para muchos que, después de más de cuarenta años pueda estar otra vez un presidente de la República; alguien que entiende de historia, de lucha y siempre ve por las personas más necesitadas. ¡Gracias presidente! Agradeció la presencia de los demás en el pódium, incluidos Familiares de Villa, al historiador. Celebró compartirlo con otro gran presidente de este país.

“Rindió honores a la valentía de las y los duranguenses a lo largo de la historia. Francisco Villa -dijo- enfrentó grandes desigualdades; nació de una familia humilde; su experiencia personal marcó ideales y visión de que México debía ser un estado de bienestar y justicia a plenitud. A lo largo de su vida luchó por realizar este sueño. Entendió que para cambiar a México debía antes cambiar el mismo. A cien años, somos testigos de su valentía. Su legado perdura en defensores de derechos humanos y ambientales. Somos la primera reserva forestal de México, con inmensa cantidad de recursos naturales, abundante agua en todas las zonas; de rebosante minería, rica ganadería y agricultura.

“A casi un año, estamos listos para atraer grandes inversiones; hacer competitivo a Durango, con mejores condiciones laborales para nuestra gente, honrando siempre nuestro pasado; viendo hacia el futuro. Listos, con un Durango de infraestructura. Orgulloso heredero de la lucha de Francisco Villa, su espíritu indomable. Es hora de mostrar todo el potencial de México”.

En su turno, el historiador Pedro Salmerón Sanjinés saludó a funcionarios, nietos, bisnietos del General Francisco Villa presentes. “Le hubiera encantado estar con nosotros, donde hace 145 años nació “José Doroteo Arango Arámbula”; recordamos a quien parecía condenado a ser niño yuntero, canto del poeta Miguel Hernández. Doroteo no quiso ser esclavo; abandonó la vida de peón de campo, similar a esclavo, y tomó la sierra. Según su propia leyenda, “el patrón intentó abusar de su hermana”. Pero John Ryder dijo entonces: “probablemente fue la insoportable altanería de Villa. Se convirtió en rebelde natural. Así comenzaron las leyendas del Robin Hood de la sierra de Durango y Chihuahua. La historia mejora la leyenda. El no quiso ser esclavo, se convirtió en revolucionario en 1910. Tenía 32 años. Infatigable jinete, diestrísimo tirador de pistola y carabina; conoció las sierras de Durango y Chihuahua; dirigió pequeños grupos armados; de bandidos o arrieros. Tenía buena presencia y excelente trato.

Julio Morales Quiñones |Jubilado, disidente local

13 horas; jueves 20. El presidente llegó a la ex-Hacienda “La Coyotada” en San Juan del Río Durango, en el centenario luctuoso del Centauro del Norte en su cuna. Destaca la monumental figura del “Centauro del Norte” en su obelisco. Acompañaron al gobernador de Durango, el presidente; Luis Crescencio Sandoval González, secretario de SEDENA, J. Rafael Ojeda Durán Almirante de SEMAR, Rosa Isela Rodríguez Velázquez secretaria de seguridad pública y protección ciudadana; Luisa María Alcalde, secretaría de gobernación, el historiador Pedro Salmerón Sanjinés y demás autoridades de Durango.

El gobernador del estado, en uso de la palabra pidió a todas y todos: quiero que me ayuden a brindar un fuerte aplauso a quien hizo posible que estemos aquí. Es un sueño para nosotros que Usted esté en San Juan del Río. Le platiqué en el camino: cuando varios de los presentes éramos niños; en estos cables de luz -señalando los tendidos- con tres bolas amarillas; preguntamos ¿por qué? dijeron: “se ponían cada que venían los presidentes de la república al lugar donde nació Francisco Villa”. A mí, nunca me tocó ver a alguno. Creo, hoy es un sueño para muchos que, después de más de cuarenta años pueda estar otra vez un presidente de la República; alguien que entiende de historia, de lucha y siempre ve por las personas más necesitadas. ¡Gracias presidente! Agradeció la presencia de los demás en el pódium, incluidos Familiares de Villa, al historiador. Celebró compartirlo con otro gran presidente de este país.

“Rindió honores a la valentía de las y los duranguenses a lo largo de la historia. Francisco Villa -dijo- enfrentó grandes desigualdades; nació de una familia humilde; su experiencia personal marcó ideales y visión de que México debía ser un estado de bienestar y justicia a plenitud. A lo largo de su vida luchó por realizar este sueño. Entendió que para cambiar a México debía antes cambiar el mismo. A cien años, somos testigos de su valentía. Su legado perdura en defensores de derechos humanos y ambientales. Somos la primera reserva forestal de México, con inmensa cantidad de recursos naturales, abundante agua en todas las zonas; de rebosante minería, rica ganadería y agricultura.

“A casi un año, estamos listos para atraer grandes inversiones; hacer competitivo a Durango, con mejores condiciones laborales para nuestra gente, honrando siempre nuestro pasado; viendo hacia el futuro. Listos, con un Durango de infraestructura. Orgulloso heredero de la lucha de Francisco Villa, su espíritu indomable. Es hora de mostrar todo el potencial de México”.

En su turno, el historiador Pedro Salmerón Sanjinés saludó a funcionarios, nietos, bisnietos del General Francisco Villa presentes. “Le hubiera encantado estar con nosotros, donde hace 145 años nació “José Doroteo Arango Arámbula”; recordamos a quien parecía condenado a ser niño yuntero, canto del poeta Miguel Hernández. Doroteo no quiso ser esclavo; abandonó la vida de peón de campo, similar a esclavo, y tomó la sierra. Según su propia leyenda, “el patrón intentó abusar de su hermana”. Pero John Ryder dijo entonces: “probablemente fue la insoportable altanería de Villa. Se convirtió en rebelde natural. Así comenzaron las leyendas del Robin Hood de la sierra de Durango y Chihuahua. La historia mejora la leyenda. El no quiso ser esclavo, se convirtió en revolucionario en 1910. Tenía 32 años. Infatigable jinete, diestrísimo tirador de pistola y carabina; conoció las sierras de Durango y Chihuahua; dirigió pequeños grupos armados; de bandidos o arrieros. Tenía buena presencia y excelente trato.

Julio Morales Quiñones |Jubilado, disidente local