Sin duda alguna la pretendida Reforma electoral propuesta por el Presidente López Obrador es la acción más maliciosa de toda su administración. Con ella se afianzará en una Dictadura similar a la cubana, venezolana o nicaragüense. Entre varias posiciones buenas y malas de ésta, se oculta el objetivo soñado por todo neo dictador llamado “Urnas y voto electrónico”. En la especie lo solicita “Elevar a rango constitucional la garantía del uso de tecnologías de la información y comunicación para la emisión del voto y con ello hacer más eficaz y asequible el ejercicio de este derecho”.
Es conocido que el voto electrónico es uno de los 3 temas más importantes de la agenda del Nuevo Orden Mundial el cual en forma engañosa lo promueve la élite Oligárquica liderada por los judíos Asquenazíes, legendaria secta de cuyo árbol genealógico descienden los Jázaros, Fariseos bíblicos, Bolcheviques rusos y los actuales judíos talmúdicos o Luciféricos, quienes a su vez dieron a luz la masonería, iluminattis, Bilderbergs y otras sectas enemigas de la humanidad y del cristianismo.
Este modelo de ejercicio electoral electrónico ha sido el mayor seguro para afianzar cualquier personaje mediante el muy elegante fraude electrónico. En varias partes del planeta encontramos varias pruebas y acciones legales que aclaran que éste método es el fin de la democracia. Susan Greenhalgh, experta en seguridad electoral del Free Speech for People, citada por la BBC de Londres; considera que con la digitalización del voto existe potencial para que las elecciones sean hackeadas de forma indetectable.
La empresa Smartmatic, madre de ésta fraudulenta maquinaria electoral, tiene múltiples denuncias en varias partes del mundo por hackeos y fraudes electorales; hoy se ha transmutada como SGO y es dirigida por el Vicepresidente de la Open Society, poderosa fundación del Jázharo turco George Soros, personaje capaz de comprar a cualquier humano o Gobierno por las buenas o las malas. Esta compañía registró fallas en sus sistemas en Bélgica; se quedó con el millonario negocio electoral electrónico en la región de Flandes, pero ahí también recibió una multa por 6 millones de euros.
En Estados Unidos Smartmatic arribó asociada a la firma Sequoia Voting Systems, participaron en las elecciones de Chicago y fue señalada por irregularidades y retrasos. Eso le valió en 2006 una serie de investigaciones encabezadas por la diputada demócrata Carolyn Maloney, quien sentenció “no se pueden celebrar elecciones justas y honestas a menos que haya un rastro en papel” aseguró en su momento Maloney. La presidenta de la fundación Vía Libre, Beatriz Busaniche, se inclinó en la misma línea: “No hay que despapelizar las elecciones”. En dicho caso incongruentemente la propia empresa Smartmatic denunció que su sistema, supuestamente inviolable, había sido fraguado semanas atrás.
Otro cable filtrado por Wikileaks destacó que “Las computadoras Smartmatic utilizadas desde 2004 en Venezuela son más que sospechosas”; el software y el hardware de las máquinas junto con los sistemas de transmisión no fueron auditados previamente”, sabemos que su tecnología no es infalible y puede ser manipulada.
En Argentina el periodista y escritor Hugo Alconada Mon reveló que el nexo informal entre la empresa Smartmatic beneficiada en la licitación del voto electrónico y el gobierno argentino era Jorge Barn hijo, quien en 2015 fue uno de los principales aportantes a la campaña de Mauricio Macri. Recordemos que Donald Trump perdió ante Biden, nada más y nada menos que por la lluvia de votos electrónicos surgidos de varios estados de USA. CONTINUARÁ
Manuel Antonio Cano Villalobos | Ingeniero Zootecnista
