La valentía más grande del ser humano es mantenerse de pie, aún cuando esté cayendose a pedazos por dentro. Valor es lo que se necesita para erguirse sobre los propios temores y dolores; para levantarse, actuar y hablar aunque los cielos caigan y la tierra tiemble; sin embargo hay que saber también cuándo callar y cuando sentarse.
El valor no es ausencia de miedo, sino triunfar sobre él. Es actuar correctamente aún cuando estemos casi muertos de terror; ahí, es donde se mide la estatura de una persona, por su temple y el valor de sus acciones. La valentía física tiene relación con el instinto animal, la valentía que va acompañada de moralidad y defensa de virtudes ésa es la grande; muy distinta al supuesto valor de enfrentarse unos a otros en forma montonera, asesina, alevosa y bajo el influjo de las drogas o el alcohol.
La valentía verdadera es locura de acuerdo a lo ordinario, un acto que en no pocas ocasiones es considerado temerario; sin embargo está lleno de grandeza en favor de las sociedades. Una sola gota de valentía vale más que un océano de cobardía; el futuro le pertenece a los valientes.
No tengas miedo, sé valiente, aunque tengas miedo sigue avanzando, sigue madurando en tu capacidad de decir la verdad para el bien de este mundo, sin temor a las consecuencias. Si dejas salir tus miedos, entonces sí tendrás espacio para vivir tus sueños. Intenta no volverte un hombre de éxito, sino volverte un hombre de valor, pues quien pierde sus bienes pierde mucho, quien pierde un amigo pierde más, pero quien pierde su valor, PIERDE TODO.
Mañana ten valor para votar, lo que sí te aconsejo es que votes con el corazón aunque tu candidato no tenga oportunidad de momento, pero se la darás para un futuro; y si ninguno te agrada, escribe en el recuadro inferior el nombre de quien deseas te represente.