Bien se dice que “el que calla otorga” y literalmente esto fue lo que la oposición de este país y sus simpatizantes hicieron, en el reciente proceso democrático de revocación de mandato de Presidente de la República. Declarando los opositores que (supuestamente) no fueron a votar debido a una “consensada, planeada abstención” para “no hacerle el juego” a López Obrador, esto en una postura ciertamente de “perdonavidas” del Presidente. Señalando aparte la oposición que los resultados de la participación ciudadana en sí y a favor de Obrador, del citado ejercicio revocatorio, habían sido un total fracaso para AMLO; Esto es 16 millones de votantes, 15 millones de acuerdo con que López Obrados siga como Presidente; Ello tan solo con un tercio de casillas instaladas por el INE, de las que regularmente se habilitan en cualquier elección nacional. Mostrándose esa oposición en verdad patética con sus declaraciones, tratando de rescatar de la nada un discurso “creíble” después de los resultados del pasado ejercicio de revocación.
Siendo un gran contrasentido la actitud tomada por los oposicionistas en su conjunto, pues después de 3 años de López Obrador como presidente, no han dejado de mostrarle su abierto rechazo, “lloriqueando diariamente su estancia en el poder; Y ahora que legítima y constitucionalmente lo pudieron destituir mediante la revocación…”lo dejaron vivo”
Pienso que realmente lo que sucedió, es que la señalada oposición toda, bien sabía que ni con mucho NO tiene la gente y por tanto ni los votos para haber quitado a AMLO de la presidencia en la pasada revocación…No es lo mismo querer, que poder; Pues de haber tenido la capacidad de poder, los opositores hubieran sido indudablemente los primerísimos en pugna, presionar para que el INE hubiese instalado la totalidad de las casillas de votación en el país. Pero es claro que con lo poco que tienen no les alcanza, decidiendo mejor no exhibirse…Legítimas condiciones hubo para democráticamente destituir al Presidente, votantes NO.
Sobre el presunto fracaso que los opositores gritonean, por los “magros resultado” obtenidos por López Obrador a su favor en el pasado proceso de revocación, considero que los 15 millones de votantes pro-AMLO logrados con tan solo una tercera parte de casillas instaladas de las que generalmente se habilitan en los comicios, lógicamente representan una muestra de solo un 33% del potencial 100% de votos, de haberse instalado la totalidad de las casillas en el país. No hay que darle muchas vueltas al gran apoyo popular-electoral a AMLO, pues hoy Morena(partido del presidente Obrador) y sus aliados PT y PVEM, gobiernan 18 de 32 estados del país, previéndose seriamente que para finales de 2022 esta se diría “coalición oficialista” gobierne alrededor de 22 estados…aprox. un 70% del país.
En este mismo tenor, es claro que el ya legítimamente constitucional (desde el pasado abril 10), ejercicio de revocación de mandato se contrapone frontalmente con esa anacrónica, porfirista diríase figura de la Reelección, en México; Traída de vuelta por el PAN e ¡¡¡increíblemente!!! Por el PRI, sacada sin duda alguna de algún vetusto baúl de los conservadores turbios recuerdos de los abuelos del más rancio panismo en México. Reelección base de una cruel, elitista autocracia que impuso en su momento, una deshumanizada explotación, pobreza, desigualdad, ignorancia a la gran mayoría de los mexicanos…Reelección que ya comienza a dar frutos (PODRIDOS) en este país
Francisco Alvidrez Parada | Trabajador de la construcción
