Creo que estaremos de acuerdo que ante los retos que tenemos en la actualidad necesitamos planear cómo avanzar y salir adelante ante los estragos que la actual crisis ha dejado
En la historia bíblica, Dios tenía un plan para Israel para liberarlo de la crisis que vivía en Egipto, y llama a Moisés, y este comienza a buscar excusas para no cumplir con el propósito de Dios. Podemos ver la historia en Éxodo 3 y 4. ¿Quién soy yo? Supón que voy al pueblo y si ellos me preguntan ¿Qué les voy a decir? No me van a creer. No sé hablar. Envía a otro, no a mí.
Muchos, no pocos son los que de la misma manera hoy día tienen miles de pretextos para no luchar y salir adelante en esta crisis. Como pastor me he encontrado con personas fabulosas, con un amor genuino por Dios, con un potencial increíble y sin embargo, no están disfrutando la vida porque no la han planificado, son del pensar “pues a ver que pasa” “a ver cómo le hacemos”, m “yo creo que esta es la voluntad de Dios para mi vida para que voy a planificar” y la favorita “algún día…” ¿Cuál es su excusa para no luchar?
Para salir de la tierra de las excusas debemos estar dispuestos a descubrir nuestras limitaciones y estar dispuestos a transformarlas en oportunidades. ¡Sí se puede! Necesitamos convertirnos en un David que no se sentía inseguro ni temeroso a la hora de enfrentar al gigante Goliat. Necesitamos descubrir nuestras fortalezas y trabajar en ellas y con ellas. Ámese y acéptese a sí mismo. Aquí no se trata de ser egocéntrico, se trata que se valore a sí mismo. Tiene que creer que Dios hizo de usted alguien especial, que es hechura de Dios y que lo que Dios hace es bueno.
Deje de buscar la aprobación de otras personas y comienza a aprobarte a sí mismo. A medida que se ame a usted mismo podrá amar a los demás, a medida que se acepte a sí mismo, podrá aceptar a los demás. ¿Cuán diferente sería su vida si fueras usted mismo?
¿Cuál es la historia que más se cuenta? ¿Es una historia de fracaso, de no se puede, no lo lograrás, no es para ti, los tiempos son difíciles? Hay tanto equipaje del pasado que es tiempo de soltarlo. No se enfoques en el pasado, enfóquese en el futuro, tenga pensamientos creativos, de oportunidades, de bienestar. Piense en los planes de Dios para usted, dice en Jeremías 29:11: “``Porque yo sé los planes que tengo para vosotros--declara el SEÑOR-- ``planes de bienestar y no de calamidad, para daros un futuro y una esperanza”. La vida puesta en manos de Dios tiene esperanza.
Crea que tiene dones y talentos que se le han dado para luchar y salir adelante. Descubra cuáles son tus talentos y habilidades, fortalezas, haga una lista de ellas. Recuerde que hay otras pautas a seguir, pero quiero que sepa que en esto de planear la vida, es normal sentir miedo, duda e inseguridad, en cierta manera, pero hay que enfrentarlos tomando acciones y responsabilidad sobre la vida. Si lo piensa bien, estimado lector, todos tenemos algo que aportar a este mundo, cumpla con su propósito de vida, y eso se logra con la ayuda de Dios.
Estimado lector, crea en Dios, sea feliz en este mundo y un día vaya al cielo.
