Para nadie es ajeno que el gobierno federal que encabeza AMLO es un gobierno que camina a palos de ciegos, de un error a otro, para des fortuna de todos los mexicanos. Ha llegado a la torpeza de confundir, en sus mañaneras, las diferentes Secretarías que se supone deben estar supervisando como es su responsabilidad y que entre incongruencias y manejos desacertados trabajan sin rumbo claro. Esto quedó de manifiesto por un fenómeno originado en el país vecino de Estados Unidos, que ni siquiera el propio Andrés Manuel esperaba, provocando los apagones en algunos estados del norte del país, entre ellos el nuestro y con ello pérdidas millonarias en la producción industrial y de servicios, así como también la consecuente paralización del sector de las empresas maquiladores con pérdidas de 60 mil millones de pesos diarios por la falta de suministro de gas natural.
Un lamentable desacierto la total falta de planeación, que a ningún otro gobierno anterior, por corrupto o desorganizado que fuera le llegó a suceder, y que dejó como consecuencia a cinco millones de personas sin energía eléctrica y sin el servicio de agua a muchos pueblos, atreviéndose absurdamente a decir que los daños ocasionado no fueron tan graves y que estuvieron manejados tendenciosamente para afectar la imagen de su gobierno, en lugar de asumir la responsabilidad de las consecuencias; unas consecuencias que pudieron haberse prevenido y que dejaron ya una afectación real en la economía de estos estados.
Por la parte que le toca a nuestra entidad, se suma a esto, en la industria productiva de ciudad Juárez, 17 millones de dólares
perdidos en ventas hacia el extranjero, por el desabasto de gas y la paralización en la frontera de 56% de las armadoras en México, representando una afectación en el ramo automotriz de un 3.7% del PIB en el país, también por el dichoso desabasto de gas, lo que repercutirá en el incremento de 40 centavo en el precio de las gasolinas. Todo esto generado por la torpe decisión, aunque no lo acepte, de retirar de las plantas de la CFE a empresarios inversionistas extranjeros, para dejar el manejo de este recurso sólo en manos de su gobierno, y justificando además con el no querer adquirir “gas caro”, dejando así sin este combustible a la población.
Es sombrío el futuro que le espera a nuestro país, de seguir adelante con tantos caprichos, sólo para llevar la contra a quienes con toda valentía señalan sus absurdas contradicciones y empecinadas decisiones, sin importarle un comino que haya gente preparada y con la probada capacidad para evitar una catástrofe económica no muy lejana.
Todo esto desafortunadamente refuerza el dicho: AMLO era y es un peligro para México.
Félix Bueno
Febrero del 2021
