En el primer juego de la final del Rey de los Deportes, disputado entre la Sección 11 y el Valle de Allende, bajo una temperatura de 28 grados, el volcán se desbordó, pues el fervor y la emoción se conjugaron, la rivalidad y la hermandad se entrelazaron: porras, tambores y matracas al unísono impregnaron de energía a los equipos.
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Mientras el equipo de Allende batea, la afición de Santa Bárbara se mantiene activa con matracas y tambores al son de “pónchalo” con la esperanza de evitar una carrera más.
Al filo de las 13:00 horas las puertas del estadio en Santa Bárbara se abrieron, no pasaron ni 30 minutos cuando las gradas registraron un lleno total, desde la entrada se podía sentir la pasión de los aficionados esperando a su equipo favorito.
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Transcurrido el tiempo, a las 16:00 horas el sol brillaba con fuerza en el estadio, por lo que el calor no se hizo esperar; sin embargo, el entusiasmo de los asistentes no decayó, pues la sombra de la techumbre los cobijó.
Inmediatamente los vendedores de diversos alimentos comenzaron a promocionar sus productos, semillas, frituras, agua, refrescos y, ¿por qué no?, una bebida de esas refrescantes que inhiben los sentidos y aligeran el momento.
Una parte de la afición de los dos equipos observa con cautela cada uno de los movimientos y jugadas que se generan en el terreno de juego, otros tantos dan su punto de vista ante las fallas de su equipo.
Los niños suben y bajan las escaleras, mientras degustan de unos picantes chicharrones con salsa, otros beben agua o refresco.
Los gritos de pasión de los aficionados no paraban, las olas hechas por todos marcaban la emoción de las jugadas, los silbidos, saltos de emoción se puntualizaban al registrar una carrera más.
El tablero marcaba 10-2 a favor de Valle de Allende, por lo que el equipo de Santa Bárbara redoblaba esfuerzos para posicionarse a la par de su contrincante.
Minutos más tarde un home run del Valle de Allende debilitó las esperanzas de una afición que mantenía la alegría y la emoción en un equipo que aún con su historia ha llegado a la final.
Es el turno de otro bateador que finalmente apagó la luz y la euforia de la afición de la Sección 11, pues nuevamente logró un home run marcando un amplía diferencia en el tablero.
Hoy en punto de las 12:00 del mediodía de nueva cuenta se volverán a enfrentar los equipos, la Sección 11 guarda la esperanza de otorgar en este encuentro una victoria a su afición que alegre e insistente impregna el valor por conseguir la victoria.
