“Ya tenemos participaciones afectadas, tenemos la amenaza del agua, tenemos la amenaza en la mañanera todos los días, continuaré haciendo mi trabajo no para cortar listones y sonreír, ni para darle gusto a quien vive en Palacio Nacional, sino para responderle a los chihuahuenses”, expresó la Gobernadora del Estado ante el cuestionamiento de una posible reducción en las participaciones del Gobierno Federal, ante la decisión de evitar la distribución de los libros de texto gratuitos.
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Durante su visita a Valle de Allende la titular del Ejecutivo refirió que ante este tema tiene una resolución de la Suprema Corte de Justicia que ampara la no distribución de los libros de texto elaborados por la Secretaría de Educación Pública (SEP).
La titular del Ejecutivo puntualizó que nada ni nadie se meterá con la educación de los menores que habitan en la entidad, ni dejarán de lado la formación que los padres pueden ofrecerle a sus hijos.
Respecto a la posibilidad de que se vea afectado el presupuesto que destinará el Gobierno Federal al Gobierno del Estado de Chihuahua ante esta decisión dijo “ya tenemos participaciones afectadas tenemos la amenaza del agua, tenemos la amenaza en la mañanera todos los días”, dijo.
Campos Galván, enfatizó que ella continuará haciendo su trabajo, no para “cortar listones” y sonreír, ni para darle gusto a quien vive en Palacio Nacional, sino para responderle a los chihuahuenses.
Recordó que han sido detectados más de 200 errores pedagógicos, didácticos, de contenido y de organización, que llevaron a cuestionar su entrega, en defensa de las niñas y niños de la entidad.
Aun cuando las asignaturas están contempladas en los distintos campos formativos, fueron reducidas en los libros de texto y diluidas en los tres tipos de proyectos, cuando deberían ser la herramienta básica para apoyar la labor de los docentes y reforzar la construcción de conocimiento.
Es de resaltar que por estos errores el Gobierno del Estado de Chihuahua promovió la Controversia Constitucional ante la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), para evitar la distribución de los libros de texto gratuitos elaborados por la Secretaría de Educación Pública (SEP).
