/ lunes 11 de marzo de 2024

Apicultor, oficio que se niega a morir pese a retos como la sequía

Factores como la falta de floración provocada por escasas lluvias o tardías ha impactado considerablemente la cantidad de colmenas y por ende la producción de miel, mientras que la competencia desleal es otro inconveniente

Flavio Prieto es un apicultor que busca serlo sin morir en el intento. Ante la sequía extrema y la alteración de las estaciones del clima, en la región sur de Chihuahua apenas sobrevive la producción de miel. Él cuenta con 22 colmenas que a lo largo de cuatro años ha recolectado del rescate de panales en la zona urbana. Se adentra, no obstante, en una actividad en declive ante la baja en la población de abejas a consecuencia de la menor polinización. Gonzalo Lugo, otro productor señaló que el año pasado el número de colmenas cayó 60%, lo cual se tradujo en que la producción de miel pasó de 18 a 12 kilogramos por unidad.

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En los últimos años los apicultores de la ciudad han tenido que enfrentar las consecuencias de la sequía que se traduce en la muerte de colmenas y bajas en la producción de miel, debido a que la escasez de lluvias no permite la floración.

Según datos de la Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural (SIAP) durante el año 2020 en el distrito Parral se produjeron 20 mil 063 toneladas de miel; en 2021 fueron 20 mil 463 toneladas; 2022 se reportaron 20 mil 522 toneladas y en el periodo de 2023 se registraron 20 mil 643 toneladas de miel.

Flavio Prieto, apicultor de la ciudad señaló que hay quienes viven totalmente de esta actividad, mismos que ahora han tenido que buscar otras formas de poder conseguir su sustento debido a que la producción ha sido baja.

Señaló que comenzó su actividad de apicultor en Ojinaga; sin embargo, solo iba por las noches a ayudarle a abrir las colmenas, continuó con el apicultor Gonzalo Lugo con quien tuvo mayor conocimiento de esta actividad.

Al tener ya más conocimiento sobre la producción de miel adquirió cinco núcleos el cual se compone de una reina joven, un “puño” de abejas entre obreras y zánganos, así como dos bastidores con cría y otros dos con alimento.

Resaltó que el núcleo está en pleno desarrollo, por lo que es necesario esperar a que produzca miel por al menos un año. Actualmente tiene 22 colmenas, es decir colonias de abejas establecidas, la cual contiene millones de abejas obreras, zánganos, pero solo una abeja reina.

“Yo ahorita tengo poquitas, pero quiero seguir creciendo, hace muchos años el gobierno brinda diversos apoyos a la actividad, pero ahorita apicultores que tenían mil o dos mil colmenas tienen 20 ó 30 y en algunos casos nada”, refirió.

Enfatizó que hay apicultores que ya no saben qué hacer, ya que debido a las condiciones del clima ha cambiado la temporada de floración, el temporal de lluvia y con ello el comportamiento de las abejas.

Señaló que durante el año antepasado el cual calificó como bueno contaba con cinco colmenas; sin embargo, debido a las condiciones del clima solamente le quedó uno ya que las abejas se fueron o se enfermaron.

Enfatizó que las demás colmenas que tiene las ha ido conformando porque ha rescatado panales en la zona urbana, mismos que ha injertado en los bastidores que se encontraban vacíos.

Compartió que ante las condiciones del clima el huizache es uno de los principales proveedores de polen, el cual sustraen en grandes cantidades y lo trasladan entre sus patas hacia las colmenas.

Instrumentos para el tratado de las abejas

Flavio Prieto mencionó que para poder manipular las colmenas es necesario utilizar un ahumador, el cual sirve para engañar a las abejas, ya que el humo es una distracción para que no vaya a picar a alguien o se retire de algún espacio.

“En el caso de un incendio cuando empiezan a sentir el humo se empiezan a abastecer de miel, para llevar comida y dure entre cinco-seis días porque no saben a dónde van, se empiezan a organizar, las inspectoras vuelan para buscar un lugar seguro y si no encuentran uno la reina las convoca para volar todas, se detienen en un lugar para descansar, mientras unas inspeccionan el área hasta que puedan establecerse”, declaró.

Para la debida manipulación de las abejas es necesario portar el overol de apicultor, así como el velo el cual debe cubrir toda la cabeza hasta la espalda lugar al que va atado, botas y guantes especiales que cubran hasta la muñeca para evitar que se introduzcan en el cuerpo y piquen.

Dentro de las colmenas se encuentran millones de abejas trabajando en los bastidores, unas pequeñas láminas de madera en donde van trabajando la miel, en épocas de bonanza son 20 litros de miel por colmena.

Las abejas son extremadamente organizadas, por lo que cuando tienen que cambiar de hogar se vanen enjambre. Foto: Javier Cruz / El Sol de Parral

Las colmenas de abejas trabajan en una caja de madera cuyo nombre es Langstroth, integrada por la cámara de cría, la más grande y alta donde se ubica la abeja reina y la alza melaria lugar en donde se cosecha la miel.

Puedes leer: Disminuyen 60% las colmenas productoras de miel en la región por sequía

Conocimiento de las abejas

El entrevistado compartió que un enjambre se da cuando las abejas no tienen casa, es decir que andan nómadas en busca de una casa, en este caso una cueva, un hueco de un árbol, un registro del agua, incluso cuevas de ratas.

Ya cuando se establecen en algún lugar, comienzan a construir pencas, lo cual ya no es un enjambre sino una colmena “la gente dice que es un panal porque esta compuesto de panales de cera pero realmente es una colmena misma que tiene panales, una reina, zánganos y obreras”.

Resaltó que toda la abeja obrera es hembra, es decir la que se encargan de trabajar, los zánganos no trabajan solamente comen y su función dentro de una colmena es aparear a la abeja reina, misma que solamente se reproduce una vez en su vida.

“Si hay zánganos es porque ella los mantiene de reserva, cuando empezamos a manipular las colmenas si por error matamos a la reina, las abejas obreras se dan cuenta inmediatamente que la reina no está y empiezan a coger huevecillos que no tengan más de tres días de que los haya puesto la reina, y los comienzan a apartar en capullos que se llama celda real, y al mismo tiempo que brota el gusano injertan jalea real para que crezca”, informó.“

Las abejas no pican nada más porque sí, en realidad se están defendiendo y se van a muerte, porque saben que en cuanto pican en escasos minutos se van a morir porque dejan el aguijón que trae una especie de arpón, y cuando lo entierra y lo quiere sacar ya no puede”, refirió.

Explicó que los zánganos no tienen aguijón a diferencia de la abeja reina que tiene uno más delgado similar a la punta de una aguja, misma que puede picar varias veces; sin embargo, no ataca a las personas, sino que lo utiliza para matar a otra reina.

Destacó que cuando es temporada de producción de miel, que en el año son dos periodos en mayo y octubre, el comportamiento de las abejas es más agresivo, por ello es necesario utilizar un traje especial para evitar picaduras.“

Al ver un montón de abejas ahí tiene que estar una abeja reina, obreras, así como zánganos porque es muy complicado que cada uno ande por un lado distinto, son muy organizadas”, argumentó.

Cuando es temporada de producción de miel, que en el año son dos periodos en mayo y octubre, el comportamiento de las abejas es más agresivo. Foto: Javier Cruz / El Sol de Parral

Cae el número de colmenas

Gonzalo Lugo, otro apicultor señaló que el año pasado el número de colmenas cayó 60%, lo cual se tradujo en que la producción de miel pasó de 18 a 12 kilogramos por unidad, por lo cual el litro se se oferta en 200 pesos.

Indicó que el próximo año, los 10 apicultores enfrentarán una situación crítica, por lo que se deben establecer apoyos por parte de los tres niveles de gobierno para la actividad.“

Lo poquito que lograron hacer las lluvias, venían fuera de tiempo, por lo que no se pudo producir la miel que se proyectaba, a partir de aquí, si llega a llover será muy irrelevante porque no hay floración”, dijo.

Argumentó que, estando en buenas condiciones, una colmena produce aproximadamente entre 24 a 30 kilos de miel; sin embargo, menciona que ahora, en promedio, se producen de 18 a 12 kilogramos.

Refirió que esta problemática se puntualiza en la falta de apoyo por parte de los tres niveles de gobierno para esta actividad, por lo que no hay incentivos para que los apicultores continúen invirtiendo en la producción de miel. Dijo que es necesario que, al menos, el Gobierno Municipal establezca estrategias de difusión, así como de apoyo en material biológico que permita hacer frente a la problemática que han tenido que pasar en los últimos años.

Comentó que toda la producción tiene como finalidad abastecer el mercado local; sin embargo, enfatizó que hay una venta desleal por parte de algunos comerciantes que ofertan un producto con propiedades parecidas a la miel, no obstante, es jarabe de maíz alta en fructosa.

“Ellos la tiñen con pintura vegetal, le ponen esencias florales y fabrican su miel, lo desleal es que no le informan a la gente qué es, ese es el verdadero problema, hay una regla para darse cuenta si es real o no, la miel de abeja de forma natural tiende a cristalizarse, se cuaja como si fuera manteca de puerco, cuando se calienta en ese momento se vuelve líquida de nuevo y este producto que venden en imitaciones inclusive aunque lo metan al refrigerador en ningún momento podrá cuajarse”, resaltó.

Las colmenas de abejas trabajan en una caja de madera cuyo nombre es Langstroth, integrada por la cámara de cría, la más grande y alta donde se ubica la abeja reina y la alza melaria lugar en donde se cosecha la miel. Foto: Cortesía / Gonzalo Lugo

Beneficios de las abejas en la alimentación de los humanos

Gracias a las abejas tenemos muchos alimentos ricos en micronutrientes, como las frutas, algunas hortalizas, semillas, frutos secos y aceites. Si no existieran, desaparecerían muchos de estos productos, ideales para mantenernos bien nutridos. Algunos de ellos son: fresas, manzanas, arándanos, cerezas, almendras, cacao y café.

La miel es un edulcorante natural, tiene propiedades antibacterianas y antisépticas. Ha formado parte de la civilización humana desde hace miles de años. Los antiguos egipcios utilizaban la miel con fines medicinales, por ejemplo, para curar heridas; también usaban cera de abejas para embalsamar cadáveres y hasta para obtener luz artificial. Hoy en día, productos como la miel, la cera de abejas y otros, proporcionan ingresos adicionales a las familias rurales en el mundo.

Las plantas polinizadas adecuadamente producen frutas y hortalizas más grandes, uniformes y sabrosas. Si una planta no se ha polinizado adecuadamente, no invertirá necesariamente sus recursos de manera uniforme, produciendo en consecuencia frutas y hortalizas deformes o blandas. Una manzana deformada, por ejemplo, podría significar que la polinización de la planta ha sido insuficiente o desigual.

Las abejas y otros polinizadores están mejorando la producción de alimentos de dos millones de pequeños agricultores en todo el mundo, ayudando a garantizar la seguridad alimentaria de la población mundial. La obtención de miel de colonias de abejas silvestres continúa siendo también un componente importante de los medios de vida de las poblaciones que dependen de los bosques en muchos países en desarrollo.

Sin ellas, no sería posible la producción de alimentos. Sólo en México, Brasil, Uruguay, Chile y Argentina, el 58 por ciento de los cultivos que representan el 70 por ciento de la superficie de América Latina participan. Su valor como polinizadoras, alcanza 23 billones de dólares.

La miel "pirata" en apariencia es como la miel, sin embargo, carece de las propiedades nutricionales de la miel virgen. Foto: Javier Cruz / El Sol de Parral

Las abejas coadyuvan en la producción de 228 millones de toneladas de alimentos para consumo humano y con 34 millones de toneladas de productos como algodón, trigo, cebada, avena y alfalfa.

La principal función de las abejas en los ecosistemas es la polinización, por lo que se considera que la reducción de sus colonias, es de particular importancia para la agricultura, porque afecta la polinización de plantas.

Las abejas adultas se alimentan principalmente de néctar y algo de polen. En este proceso, las flores de ciertas especies de plantas ofrecen como recompensas aceites o fragancias que recolectan algunos grupos de abejas.

Se aconseja consumir miel todas las mañanas antes del desayuno o incluso si haces ejercicio, ya que esto te aportará mucha energía durante todo el día; además ayuda a estimular el sistema inmune, es antioxidante, mejorar la memoria, controlar la presión sanguínea, recuperar el sueño, minimizar alergias. También contribuye a mantener buena salud visual, regular el azúcar en la sangre y reducir el estrés.

Los apicultores permiten el desarrollo de un sector productivo elemental de nuestro país como es el da la miel y los productos diversos, medicinales y cosméticos que se elaboran a partir de ella, como jalea real, polen, cera, cremas, jabones, gotas, propóleo, etcétera.

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Otro aspecto que tiene la miel de abeja y que ha sido erróneo en el uso, es que cuando se solidifica o se cristaliza como dicen los apicultores, las personas ven que se hace “azúcar” y la desechan, cuando en realidad, una prueba de que el producto es puro es que se transforma de esta manera.

Flavio Prieto es un apicultor que busca serlo sin morir en el intento. Ante la sequía extrema y la alteración de las estaciones del clima, en la región sur de Chihuahua apenas sobrevive la producción de miel. Él cuenta con 22 colmenas que a lo largo de cuatro años ha recolectado del rescate de panales en la zona urbana. Se adentra, no obstante, en una actividad en declive ante la baja en la población de abejas a consecuencia de la menor polinización. Gonzalo Lugo, otro productor señaló que el año pasado el número de colmenas cayó 60%, lo cual se tradujo en que la producción de miel pasó de 18 a 12 kilogramos por unidad.

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En los últimos años los apicultores de la ciudad han tenido que enfrentar las consecuencias de la sequía que se traduce en la muerte de colmenas y bajas en la producción de miel, debido a que la escasez de lluvias no permite la floración.

Según datos de la Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural (SIAP) durante el año 2020 en el distrito Parral se produjeron 20 mil 063 toneladas de miel; en 2021 fueron 20 mil 463 toneladas; 2022 se reportaron 20 mil 522 toneladas y en el periodo de 2023 se registraron 20 mil 643 toneladas de miel.

Flavio Prieto, apicultor de la ciudad señaló que hay quienes viven totalmente de esta actividad, mismos que ahora han tenido que buscar otras formas de poder conseguir su sustento debido a que la producción ha sido baja.

Señaló que comenzó su actividad de apicultor en Ojinaga; sin embargo, solo iba por las noches a ayudarle a abrir las colmenas, continuó con el apicultor Gonzalo Lugo con quien tuvo mayor conocimiento de esta actividad.

Al tener ya más conocimiento sobre la producción de miel adquirió cinco núcleos el cual se compone de una reina joven, un “puño” de abejas entre obreras y zánganos, así como dos bastidores con cría y otros dos con alimento.

Resaltó que el núcleo está en pleno desarrollo, por lo que es necesario esperar a que produzca miel por al menos un año. Actualmente tiene 22 colmenas, es decir colonias de abejas establecidas, la cual contiene millones de abejas obreras, zánganos, pero solo una abeja reina.

“Yo ahorita tengo poquitas, pero quiero seguir creciendo, hace muchos años el gobierno brinda diversos apoyos a la actividad, pero ahorita apicultores que tenían mil o dos mil colmenas tienen 20 ó 30 y en algunos casos nada”, refirió.

Enfatizó que hay apicultores que ya no saben qué hacer, ya que debido a las condiciones del clima ha cambiado la temporada de floración, el temporal de lluvia y con ello el comportamiento de las abejas.

Señaló que durante el año antepasado el cual calificó como bueno contaba con cinco colmenas; sin embargo, debido a las condiciones del clima solamente le quedó uno ya que las abejas se fueron o se enfermaron.

Enfatizó que las demás colmenas que tiene las ha ido conformando porque ha rescatado panales en la zona urbana, mismos que ha injertado en los bastidores que se encontraban vacíos.

Compartió que ante las condiciones del clima el huizache es uno de los principales proveedores de polen, el cual sustraen en grandes cantidades y lo trasladan entre sus patas hacia las colmenas.

Instrumentos para el tratado de las abejas

Flavio Prieto mencionó que para poder manipular las colmenas es necesario utilizar un ahumador, el cual sirve para engañar a las abejas, ya que el humo es una distracción para que no vaya a picar a alguien o se retire de algún espacio.

“En el caso de un incendio cuando empiezan a sentir el humo se empiezan a abastecer de miel, para llevar comida y dure entre cinco-seis días porque no saben a dónde van, se empiezan a organizar, las inspectoras vuelan para buscar un lugar seguro y si no encuentran uno la reina las convoca para volar todas, se detienen en un lugar para descansar, mientras unas inspeccionan el área hasta que puedan establecerse”, declaró.

Para la debida manipulación de las abejas es necesario portar el overol de apicultor, así como el velo el cual debe cubrir toda la cabeza hasta la espalda lugar al que va atado, botas y guantes especiales que cubran hasta la muñeca para evitar que se introduzcan en el cuerpo y piquen.

Dentro de las colmenas se encuentran millones de abejas trabajando en los bastidores, unas pequeñas láminas de madera en donde van trabajando la miel, en épocas de bonanza son 20 litros de miel por colmena.

Las abejas son extremadamente organizadas, por lo que cuando tienen que cambiar de hogar se vanen enjambre. Foto: Javier Cruz / El Sol de Parral

Las colmenas de abejas trabajan en una caja de madera cuyo nombre es Langstroth, integrada por la cámara de cría, la más grande y alta donde se ubica la abeja reina y la alza melaria lugar en donde se cosecha la miel.

Puedes leer: Disminuyen 60% las colmenas productoras de miel en la región por sequía

Conocimiento de las abejas

El entrevistado compartió que un enjambre se da cuando las abejas no tienen casa, es decir que andan nómadas en busca de una casa, en este caso una cueva, un hueco de un árbol, un registro del agua, incluso cuevas de ratas.

Ya cuando se establecen en algún lugar, comienzan a construir pencas, lo cual ya no es un enjambre sino una colmena “la gente dice que es un panal porque esta compuesto de panales de cera pero realmente es una colmena misma que tiene panales, una reina, zánganos y obreras”.

Resaltó que toda la abeja obrera es hembra, es decir la que se encargan de trabajar, los zánganos no trabajan solamente comen y su función dentro de una colmena es aparear a la abeja reina, misma que solamente se reproduce una vez en su vida.

“Si hay zánganos es porque ella los mantiene de reserva, cuando empezamos a manipular las colmenas si por error matamos a la reina, las abejas obreras se dan cuenta inmediatamente que la reina no está y empiezan a coger huevecillos que no tengan más de tres días de que los haya puesto la reina, y los comienzan a apartar en capullos que se llama celda real, y al mismo tiempo que brota el gusano injertan jalea real para que crezca”, informó.“

Las abejas no pican nada más porque sí, en realidad se están defendiendo y se van a muerte, porque saben que en cuanto pican en escasos minutos se van a morir porque dejan el aguijón que trae una especie de arpón, y cuando lo entierra y lo quiere sacar ya no puede”, refirió.

Explicó que los zánganos no tienen aguijón a diferencia de la abeja reina que tiene uno más delgado similar a la punta de una aguja, misma que puede picar varias veces; sin embargo, no ataca a las personas, sino que lo utiliza para matar a otra reina.

Destacó que cuando es temporada de producción de miel, que en el año son dos periodos en mayo y octubre, el comportamiento de las abejas es más agresivo, por ello es necesario utilizar un traje especial para evitar picaduras.“

Al ver un montón de abejas ahí tiene que estar una abeja reina, obreras, así como zánganos porque es muy complicado que cada uno ande por un lado distinto, son muy organizadas”, argumentó.

Cuando es temporada de producción de miel, que en el año son dos periodos en mayo y octubre, el comportamiento de las abejas es más agresivo. Foto: Javier Cruz / El Sol de Parral

Cae el número de colmenas

Gonzalo Lugo, otro apicultor señaló que el año pasado el número de colmenas cayó 60%, lo cual se tradujo en que la producción de miel pasó de 18 a 12 kilogramos por unidad, por lo cual el litro se se oferta en 200 pesos.

Indicó que el próximo año, los 10 apicultores enfrentarán una situación crítica, por lo que se deben establecer apoyos por parte de los tres niveles de gobierno para la actividad.“

Lo poquito que lograron hacer las lluvias, venían fuera de tiempo, por lo que no se pudo producir la miel que se proyectaba, a partir de aquí, si llega a llover será muy irrelevante porque no hay floración”, dijo.

Argumentó que, estando en buenas condiciones, una colmena produce aproximadamente entre 24 a 30 kilos de miel; sin embargo, menciona que ahora, en promedio, se producen de 18 a 12 kilogramos.

Refirió que esta problemática se puntualiza en la falta de apoyo por parte de los tres niveles de gobierno para esta actividad, por lo que no hay incentivos para que los apicultores continúen invirtiendo en la producción de miel. Dijo que es necesario que, al menos, el Gobierno Municipal establezca estrategias de difusión, así como de apoyo en material biológico que permita hacer frente a la problemática que han tenido que pasar en los últimos años.

Comentó que toda la producción tiene como finalidad abastecer el mercado local; sin embargo, enfatizó que hay una venta desleal por parte de algunos comerciantes que ofertan un producto con propiedades parecidas a la miel, no obstante, es jarabe de maíz alta en fructosa.

“Ellos la tiñen con pintura vegetal, le ponen esencias florales y fabrican su miel, lo desleal es que no le informan a la gente qué es, ese es el verdadero problema, hay una regla para darse cuenta si es real o no, la miel de abeja de forma natural tiende a cristalizarse, se cuaja como si fuera manteca de puerco, cuando se calienta en ese momento se vuelve líquida de nuevo y este producto que venden en imitaciones inclusive aunque lo metan al refrigerador en ningún momento podrá cuajarse”, resaltó.

Las colmenas de abejas trabajan en una caja de madera cuyo nombre es Langstroth, integrada por la cámara de cría, la más grande y alta donde se ubica la abeja reina y la alza melaria lugar en donde se cosecha la miel. Foto: Cortesía / Gonzalo Lugo

Beneficios de las abejas en la alimentación de los humanos

Gracias a las abejas tenemos muchos alimentos ricos en micronutrientes, como las frutas, algunas hortalizas, semillas, frutos secos y aceites. Si no existieran, desaparecerían muchos de estos productos, ideales para mantenernos bien nutridos. Algunos de ellos son: fresas, manzanas, arándanos, cerezas, almendras, cacao y café.

La miel es un edulcorante natural, tiene propiedades antibacterianas y antisépticas. Ha formado parte de la civilización humana desde hace miles de años. Los antiguos egipcios utilizaban la miel con fines medicinales, por ejemplo, para curar heridas; también usaban cera de abejas para embalsamar cadáveres y hasta para obtener luz artificial. Hoy en día, productos como la miel, la cera de abejas y otros, proporcionan ingresos adicionales a las familias rurales en el mundo.

Las plantas polinizadas adecuadamente producen frutas y hortalizas más grandes, uniformes y sabrosas. Si una planta no se ha polinizado adecuadamente, no invertirá necesariamente sus recursos de manera uniforme, produciendo en consecuencia frutas y hortalizas deformes o blandas. Una manzana deformada, por ejemplo, podría significar que la polinización de la planta ha sido insuficiente o desigual.

Las abejas y otros polinizadores están mejorando la producción de alimentos de dos millones de pequeños agricultores en todo el mundo, ayudando a garantizar la seguridad alimentaria de la población mundial. La obtención de miel de colonias de abejas silvestres continúa siendo también un componente importante de los medios de vida de las poblaciones que dependen de los bosques en muchos países en desarrollo.

Sin ellas, no sería posible la producción de alimentos. Sólo en México, Brasil, Uruguay, Chile y Argentina, el 58 por ciento de los cultivos que representan el 70 por ciento de la superficie de América Latina participan. Su valor como polinizadoras, alcanza 23 billones de dólares.

La miel "pirata" en apariencia es como la miel, sin embargo, carece de las propiedades nutricionales de la miel virgen. Foto: Javier Cruz / El Sol de Parral

Las abejas coadyuvan en la producción de 228 millones de toneladas de alimentos para consumo humano y con 34 millones de toneladas de productos como algodón, trigo, cebada, avena y alfalfa.

La principal función de las abejas en los ecosistemas es la polinización, por lo que se considera que la reducción de sus colonias, es de particular importancia para la agricultura, porque afecta la polinización de plantas.

Las abejas adultas se alimentan principalmente de néctar y algo de polen. En este proceso, las flores de ciertas especies de plantas ofrecen como recompensas aceites o fragancias que recolectan algunos grupos de abejas.

Se aconseja consumir miel todas las mañanas antes del desayuno o incluso si haces ejercicio, ya que esto te aportará mucha energía durante todo el día; además ayuda a estimular el sistema inmune, es antioxidante, mejorar la memoria, controlar la presión sanguínea, recuperar el sueño, minimizar alergias. También contribuye a mantener buena salud visual, regular el azúcar en la sangre y reducir el estrés.

Los apicultores permiten el desarrollo de un sector productivo elemental de nuestro país como es el da la miel y los productos diversos, medicinales y cosméticos que se elaboran a partir de ella, como jalea real, polen, cera, cremas, jabones, gotas, propóleo, etcétera.

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Otro aspecto que tiene la miel de abeja y que ha sido erróneo en el uso, es que cuando se solidifica o se cristaliza como dicen los apicultores, las personas ven que se hace “azúcar” y la desechan, cuando en realidad, una prueba de que el producto es puro es que se transforma de esta manera.

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