El que las casas de empeño no soliciten algún documento que acredite a los clientes como dueños de los productos, propicia una ambigüedad en la que pueden ser objetos robados o no; sin embargo, no está regulado, según manifestó la Profeco. Hiram Mendoza, titular de Profeco en Parral, señaló que son cuestiones internas de cada casa de cambio, si decide pedir alguna factura o algún documento que acredite a la persona como dueño de lo que empeño; sin embargo, por lo regular la gente no guarda los tickets o papeles y no tienen cómo comprobar que son propietarios de los artículos. Asimismo, afirmó que esta situación se presta en una ambigüedad en la que las cosas pueden ser robadas o no, pero las casas de empeño confían en la buena fe de sus clientes. Aseveró que debería haber algún tipo de reglamentación en este sentido para evitar que se cometan este actos ilícitos. Indicó que en el rubro de las casa de empeño, están obligadas a tener un contrato de adhesión, además, de estar en un padrón que año con año deben hacer el pago de refrendo, donde se les hace la verificación para evitar que dentro de sus procesos de la obtención de los productos, se encuentren cuestiones ilícitas. Sin embargo, el hecho de que cada uno compruebe la legal tenencia o propiedad de cada una de las cosas que empeñan, depende de cada una de las empresas, en cuanto a las políticas para aceptar dicha mercancía. Profeco, lo que hace es verificar que tengan los contratos de adhesión y que estén apegados a derecho, además de que tengan a las personas informadas sobre el porcentaje de interés que se les cobrará, el contacto de comodato y también el tiempo que otorgarán para pagar. En este sentido, Profeco sólo le solicita a las empresas un contrato “De Mutuo”, donde a las gente se presta una cantidad por dejar en garantía un objeto por un tiempo determinado, el cual es valorado en un precio, al terminar dicho tiempo y no pagar el dinero, el objeto pasa a ser propiedad del inmueble.
El que las casas de empeño no soliciten algún documento que acredite a los clientes como dueños de los productos, propicia una ambigüedad en la que pueden ser objetos robados o no; sin embargo, no está regulado, según manifestó la Profeco. Hiram Mendoza, titular de Profeco en Parral, señaló que son cuestiones internas de cada casa de cambio, si decide pedir alguna factura o algún documento que acredite a la persona como dueño de lo que empeño; sin embargo, por lo regular la gente no guarda los tickets o papeles y no tienen cómo comprobar que son propietarios de los artículos. Asimismo, afirmó que esta situación se presta en una ambigüedad en la que las cosas pueden ser robadas o no, pero las casas de empeño confían en la buena fe de sus clientes. Aseveró que debería haber algún tipo de reglamentación en este sentido para evitar que se cometan este actos ilícitos. Indicó que en el rubro de las casa de empeño, están obligadas a tener un contrato de adhesión, además, de estar en un padrón que año con año deben hacer el pago de refrendo, donde se les hace la verificación para evitar que dentro de sus procesos de la obtención de los productos, se encuentren cuestiones ilícitas. Sin embargo, el hecho de que cada uno compruebe la legal tenencia o propiedad de cada una de las cosas que empeñan, depende de cada una de las empresas, en cuanto a las políticas para aceptar dicha mercancía. Profeco, lo que hace es verificar que tengan los contratos de adhesión y que estén apegados a derecho, además de que tengan a las personas informadas sobre el porcentaje de interés que se les cobrará, el contacto de comodato y también el tiempo que otorgarán para pagar. En este sentido, Profeco sólo le solicita a las empresas un contrato “De Mutuo”, donde a las gente se presta una cantidad por dejar en garantía un objeto por un tiempo determinado, el cual es valorado en un precio, al terminar dicho tiempo y no pagar el dinero, el objeto pasa a ser propiedad del inmueble.
