El Templo Parroquial de San José está dedicado al santo patrono de la ciudad. Aunque no fue el primero en su construcción, al igual que la Catedral, es uno de los más importantes de Parral y uno de los pocos templos coloniales que existen. Fue construido por el arquitecto don Simón Dosantos, iniciándose su construcción el 15 de febrero de 1673 y consagrándose el 24 de diciembre de 1684, dedicado a la familia, único santuario que cuenta con un reloj de sol.
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Leonel Larios Medina, responsable de la Comisión Diocesana de Comunicación Social, informó que este hermoso templo colonial y patriarcal construido por don Simón Dosantos, se inició a construir el 15 de febrero de 1673 y consagrándose el 24 de diciembre de 1684, dedicado a la familia. Su altura hasta la cúspide de la torre es de 30 metros, es de piedra tezontle y cantera, y su barroca arquitectura tiene influencia mudéjar, española y portuguesa, siendo un nostálgico y bello monumento histórico.
En la esquina sur de la base del campanario luce un reloj solar que marca siempre la hora del pacífico. En el atrio reposan los restos de españoles importantes del período colonial, gobernadores, alcaldes mayores, entre los restos se encuentran: Juan Rangel de Viezma (fundador de Parral); Ana de Viezma, su hermana; el esposo de esta, Bartolomé de Urbaneja; el Capitán Blanco, Don Agustín Herbante del Camino; por citar algunos, que fueron grandes benefactores del Real de Minas.
En la Capilla de la Dolorosa, está sepultado el balanzario real, don Valerio Cortés del Rey y toda su familia. En el año de 1880, el ejército liberal incendió el altar mayor que era de cedro y acabado ebanístico; el actual es de cantera, obra de Don Antonio Medina, quien esculpió la primera parte evocando la época romana que vivió nuestro redentor. La segunda parte, tras la muerte de Don Antonio, la elaboró Don Jesús Fierro; la obra se terminó en 1885, señaló que con esa orificación luce hermoso.
Después del incendio, solo quedaron las imágenes de San Pedro, San Pablo y una imagen de San José, que fue restaurada y se encuentra en la entrada; estos de madera. El retablo tiene columnas corintias y salomónicas, se encuentran: San Pedro y San Pablo, San Francisco de Asís, el Sagrado Corazón de Jesús y Santa Teresita del niño Jesús, abajo el Señor San José, a la izquierda Santa María Reina y del otro lado Santa Rosa de Lima; la cede y armón son de cantera.
Además, hay un retablo donde se encuentra la Virgen de Guadalupe; la imagen es más moderna, es de 1945. Los demás son antiguos círculos de la pasión, al centro: Santa Gertrudis, Santa Bárbara y Santa Rosalía de Palermo; en la cúspide San Miguel Arcángel y adornos simétricos entre follajes en el resto del retablo. Cabe señalar que en el retablo de madera fue traído de lo que era el Templo de San Francisco Javier (hoy Hotel Adriana); se encuentra la Virgen de la Merced en pintura y un lienzo con la crucifixión.
Las dos esculturas de la Merced y La Inmaculada Concepción son modernas. Además, hay pinturas de arcángeles: Miguel, Gabriel y Rafael, seis santos en cuadros, dos almas en llamas (Adán y Eva), el Buen Pastor, los padres de la Virgen María: Santa Ana y San Joaquín, San José y San Francisco de Asís, San Nicolás de Tolentino y San Lorenzo.
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Arriba del templo, en su cúpula, están los cuatro evangelistas: Lucas, Juan, Marcos y Mateo; tiene cuatro candiles, una sola nave, la fecha 1678 arriba del arco, así también en los vitrales laterales se encuentran Santa Teresa de Ávila, la Virgen María y al centro San José.
En los vitrales de la entrada tiene temas franciscanos, San Francisco de Asís, San Antonio de Padua, el Papa Pío X, al centro la eucaristía siglo XX, al otro lado se encuentra la pila bautismal, un trono, un cuadro de la Santísima Trinidad, los confesionarios, el Nazareno en una vitrina, otro altar lateral puesto por familias benefactoras del templo, está San Antonio estilo Franciscano con flores y animales y columnas de cantera.
La Capilla de la Dolorosa, tiene un cuadro de San Isidro Labrador. La fachada es estilo mudéjar con piedras pequeñas y estilo portugués, en un nicho está San José con el niño Jesús, el atrio, en el lado lateral está el símbolo mariano, atrás del templo se encuentra un pequeño nicho dedicado a la Virgen de Guadalupe.
En su exterior se encuentra un reloj de sol, único templo en la ciudad que cuenta con un reloj de sol. Por su parte, el historiador parralense, Roberto Baca Ornelas señaló que el reloj de sol que se encuentra ubicado en la torre del campanario de San José, daba servicio social a la comunidad de su época; forma parte del proyecto original en la construcción del templo que data del año 1672, actualmente se considera que está en buenas condiciones teniendo en cuenta su antigüedad y aún funciona.
Todo indica que el reloj del templo de San José forma parte de la estructura del proyecto original; es decir, no se agregó. Hablar de la historia del reloj de sol es hablar de la construcción del templo, ya que es parte de él. En aquellos tiempos solo había dos parroquias: una que se encontraba en la plazuela Morelos y otra construida de adobe donde actualmente está San José.
El historiador parralense, Roberto Baca señaló que en el año 1672 se realizó una colecta para edificar otro templo que sustituyera al hecho de adobe, ya que por cuestiones de espacio, la gente ya no cabía. En esta colecta destacan por sus aportaciones Valerio Cortez del Rey, José Simois y Domingo de Apresta, cada uno con una donación de 10 mil pesos, así como Juan de Salaices con 5 mil pesos, entre otros que se sumaron a la causa.
En aquella época se acostumbraba que la Iglesia diera campanadas llegando las horas del día, sobre todo la hora del Ángelus a las 12:00 del mediodía y a las 6:00 de la tarde. Mencionó el historiador Roberto Baca que por medio del reloj de sol, la gente se enteraba de la hora, además, con el reloj la gente que pasaba se enteraba de la hora, lo cual dio un servicio social, no era fácil que la gente tuviera un aparato que marcara la hora.
El reloj de sol que se encuentra en la torre de San José es único en Parral y para la época el templo es una construcción arquitectónica muy avanzada, el reloj está dirigido al noroeste frente al río y de la plaza Principal; cabe citar que se caracteriza porque en el ángulo de la piedra está un poco salida del plano de la torre, está sobre un relieve con la finalidad de tener el ángulo del Meridiano para dar al horizonte y así poder marcar las horas.
Es único en Parral, como ya dejaron de ser útiles la gente los retiró, se tiene conocimiento que en casas de parralenses se tuvieron en las viviendas, mucho tiempo estuvo sin la varita que marca las horas, pero por los años 80 se le puso de nuevo, dijo que en los relojes las horas oficiales están en el Meridiano 105.
Es por ello que existe una diferencia de minutos al momento de observar el reloj de sol, pero con las horas es correcto si se observa a las 12:00 del mediodía la varita del reloj no proyecta sombra en ninguna parte; es decir, el sol está en el cenit y en el reloj son las 12 del mediodía, este reloj tiene un valor histórico único, ya que al ser parte del templo y por el servicio que da forma parte del patrimonio cultural.
