La carencia de recursos económicos es el principal motivo por el que no se tiene fecha de inicio para la Planta Tratadora de Aguas Residuales; se requieren más de 300 millones de pesos que deberán ser invertidos entre el sector público y privado. Aunque no se tiene una fecha, Mario Mata, director ejecutivo de la JCAS, declaró que el compromiso es que haya una planta tratadora antes de que se acabe la administración de María Eugenia Campos Galván.
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Mario Mata Carrasco, director ejecutivo de la Junta Central de Agua y Saneamiento (JCAS), se pronunció al respecto. Explicó que la inversión requerida supera los 300 millones de pesos y que esta pausa se debe en parte al fraude que rodeó a un proyecto de planta anterior.
Aseguró que están explorando la posibilidad de que una empresa privada se involucre en la construcción y que ya se están trabajando en el proyecto ejecutivo.
Sin embargo, la falta de recursos sigue siendo el obstáculo principal. La JCAS carece del dinero necesario para la construcción y operación de la planta, que es esencial para tratar las aguas residuales en la ciudad.
Mata Carrasco enfatizó que no desean aumentar las tarifas para los ciudadanos, por lo que buscan opciones que no afecten la economía de los habitantes de Parral.
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La planta tratadora beneficiaría a los 118,000 habitantes de la ciudad y resolvería problemas de escasez de agua que afectan a varias áreas de la ciudad. Además, se considera la posibilidad de utilizar el agua tratada en la industria minera y la agricultura, lo que tendría un impacto positivo en 19 empresas de la región.
En este sentido, se puede resaltar que, a pesar de la falta de avances tangibles hasta el momento de esta redacción, se espera que el proyecto pueda concluir antes de que finalice la administración actual, de acuerdo con lo expuesto.
Aunado a ello, las autoridades se comprometieron a garantizar que los recursos necesarios estén disponibles para llevar a cabo esta importante infraestructura que beneficiará a la comunidad de Parral.
Este retraso en la construcción de la planta tratadora resalta la importancia de garantizar la disponibilidad de recursos financieros y la colaboración entre el sector público y privado para abordar problemas de infraestructura clave en la región.
