Regresan a clases alumnos y alumnas de la escuela primaria Concepción Meléndez bajo protesta. Padres de familia aceptaron detener la manifestación siempre y cuando se cumplan con las peticiones realizadas el pasado viernes. Autoridades implementaron protocolos de actuación y de seguridad para garantizar la integridad de las y los estudiantes y que trabajen en un ambiente fuera de violencia física y psicológica.
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Luego de permanecer una semana cerrada por motivos de manifestación, alumnos y alumnas de la escuela primaria Concepción Meléndez, regresaron a clases este lunes bajo protesta, después de lo ocurrido el pasado viernes 19 de abril.
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Es de recordar que, dicho día, un padre de familia ingresó al interior del plantel, hasta el salón de clases para agredir físicamente a un profesor mientras se encontraba frente a sus alumnos, lo que provocó que algunos de ellos entraran en crisis.
Por tal situación, los demás padres de familia se molestaron con las autoridades educativas, ya que no podía ser que tal acto hubiera ocurrido en horario de clases, por lo que decidieron impedir el paso a alumnos, alumnas y personal directivo y docente del plantel.
Fueron cinco días los que la escuela Concepción Meléndez permaneció cerrada y en vigilancia por parte de los padres de familia, quienes incluso, pernoctaron en el lugar a fin de supervisar que nadie entrara al plantel.
Sin embargo, fue el pasado viernes 26 de abril que, los padres de familia citaron a reunión a las autoridades educativas a las afueras del plantel, con el objetivo de exponer alrededor de diez peticiones para abrir las instalaciones de la escuela.
Padres de familia expusieron que la primera acción sea la destitución de la directora, acusándola de faltas administrativas y de negligencias. Así como el despido del conserje de la primaria, ello, debido a la agresión hacia el profesor.
Asimismo, se solicitó una auditoría a la dirección del plantel por presuntos malos manejos del recurso financiero, por lo que sentenciaron que no se abrirá la oficina hasta que termine dicha auditoría.
Entre otras, se destacó que en caso de que el Gobierno del Estado a través de las instancias correspondientes no den solución, se interpondrá un amparo ante la Federación para exigirle al Estado a que resuelva el problema.
Una vez aceptadas estas condiciones, los padres de familia aceptaron “levantar” la manifestación y permitir el acceso nuevamente a las clases de manera regular; no obstante, estarán al tanto de que sus peticiones se cumplan con el fin de no tener que volver a manifestarse.