Derivado de la sequía, el precio de la res en pie disminuyó un 25 por ciento ya que pasó en diciembre de 112 a 80 peso el kilogramo lo cual representa una afectación para más de dos mil productores del Distrito Jiménez.
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Por su parte, el jefe de la Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural (Sader) indicó que la disminución en el número de las hectáreas de alfalfa incrementó el precio ya que actualmente una paca de 28 kilos que costaba 80 pesos aumentó hasta 200 lo cual calificó como una problemática severa.
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Por lo anterior, el Jefe de la Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural del distrito Jiménez, Roberto Baca Perea, indicó que los ganaderos han tenido que enfrentar diversas problemáticas al igual que los productores que comprenden el referido distrito. “El kilogramo de un becerro lo estaban pagando en 112 y ahorita está en 80 pesos, precio que empezó a disminuir por más de 20 pesos durante el mes de diciembre ya que durante septiembre y octubre valía más de 100 pesos el kilo”, dijo.
El entrevistado señaló que, a pesar de que no se presentaron pérdidas de ganado, simplemente dejaron de vender, ya que fue necesario alimentar a los animales para sostenerlos. Indicó que lo anterior fue derivado de la sequía aunado al aumento en los costos de la pastura, ya que los ganaderos al no vender solamente producían para alimentar su ganado.
Manifestó que en el caso de la alfalfa actualmente ronda los 5.00 pesos el kilogramo, cuando anteriormente se ofertaba en 2.80 pesos, lo cual influyó en que los ganaderos optaron por no vender.
Baca Perea argumentó que como ahorita no hay corte de alfalfa una paca de 28 kilogramos se oferta a un precio de 150 a 200 pesos cuando se podía adquirir en 80 pesos, lo cual calificó como un factor determinante que perjudica a los más de dos mil productores. “Ya en noviembre empezó a incrementar el costo de la alfalfa, continuó en diciembre y ahora se resiente más ya que los ganaderos no tuvieron casi venta, y lo poco que llegaron a colocar fue para adquirir alimento para los demás animales que les quedaron”, refirió.
El jefe de la Sader detalló que esta situación fue a causa de la sequía, ya que debido a la falta de lluvias no se lograron recargar los más de 900 pozos que se tienen para el riego de los cultivos. Aunado a ello, explicó que la situación se acrecienta ya que hubo poca producción de alfalfa debido a que, durante el primer semestre de 2023, en el distrito de Jiménez se redujo hasta un 30 por ciento, en comparación con el mismo período del año anterior.
Según datos proporcionados por el Servicio de Información Agroalimentaria y Pesquera (SIAP), durante los primeros seis meses del año 2022, se produjeron 295 toneladas de alfalfa, mientras que durante el 2023; la cifra descendió a solo 205 toneladas.
“En los ranchos ganaderos no hay pastura, tienen que suplementar, por lo que estuvieron dando rastrojo, mezclado con cascarillas de algodón para poder darle alimento al ganado y mantenerlos, está muy difícil la situación para los ganaderos ahorita”, expresó. Declaró que apoyaron a 162 productores con avena, con lo cual han podido hacer frente a esta problemática que se deriva de la sequía y la disminución de la siembra.
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