"O te unes a los cárteles o te matan"

Ciudad Juárez, Chihuahua.- Con una mochila en mano, su esposa y sus dos hijos, uno de nueve meses y una niña de siete años, es como salió hace seis días, José Luis de su natal Michoacán.

A sus 33 años, el hombre huyó con todo y su familia de la violencia que dos cárteles del narcotráfico sostienen en su ciudad natal.

"A mí me dieron un rozón de bala en la mano, huimos de Michoacán porque allá o te unes a los cárteles o te matan. La misma policía va por ti a las casas, te sacan y te meten al cártel, si no quieres, apareces en bolsas de plástico."

Desde hace seis días su hogar ha sido la baqueta contigua al Puente Internacional Santa Fe y junto con otro amigo originario del mismo estado espera cruzar a Estados Unidos y pedir asilo político.

“Nosotros vamos a contar la verdad, ¿qué más pruebas quieren de la violencia en Michoacán?, en la televisión, en todos lados se sabe que allá te matan sino eres del narco”, agregó.

"Son dos cárteles los que se están peleando uno quiere invadir Michoacán y que a fuerza trabajes con ellos, si no quieres, a ti te hacen algo o a la familia. A mí me quitaron un carro y ya mero me andaban matando. Existe la dichosa policía, pero van a tu casa y te sacan para llevarte con el narco y al siguiente día apareces en una bolsa negra."

Ambos connacionales junto con sus familias, fueron víctimas de la violencia en ese estado, uno de ellos recibió un rozón de bala en una mano y el otro ha perdido familiares por el narco.

De acuerdo con José Luis e Irving, son dos cárteles los que quieren invadir el estado de Michoacán y sus pueblos aledaños, por lo cual en los últimos meses la violencia se ha incrementado en esos lugares.

Para llegar a Juárez vendieron sus pertenencias y pidieron prestado, ya que aseguran que por esta frontera es mucho más fácil llegar a Estados Unidos.

“Se corren los rumores de que por Juárez es más fácil llegar, en las otras fronteras es mucho más difícil y por eso viajamos hasta acá”, agregó Irving.

Pese a ello ya han pasado seis días en espera de ser llamados por las autoridades americanas e iniciar su nueva vida.

“La gente nos ha ayudado, nos ve y nos da comida, son buenas personas la gente de aquí, pero también hay quienes nos ven con cara de desprecio. Uno viene con temor de que nos pase algo, pero no, nos han tratado mejor”, dijo.

Aun y con eso los originarios de Michoacán aseguran que no se quedarán en esta localidad, ya que “la violencia e inseguridad está igual”.

"Nosotros vamos a pedir asilo político, vamos a decir la verdad de lo qué está pasando, hay pruebas de que nuestra familia ha sido afectada por la violencia, en las noticias se ha visto y se ve a diario lo que allá pasa. El Gobierno Municipal de Michoacán no te quiere dar un documento donde huyes de ahí para pedir asilo, huyes obligado con lo poco que tienes."

Los afectados manifestaron que son los mismos mexicanos quienes los han discriminado y los han tratado mal en su estancia en esta localidad.

Ayer las dos familias acudieron a un supermercado de la localidad a comprar alimentos con los pocos recursos que aún tienen y aseguran que no se moverán del cruce fronterizo hasta que logren cruzar a Estados Unidos.

Como ellos se encuentran poco más de mil migrantes mexicanos que desde el hace aproximadamente dos semanas viven en los puentes internacionales en espera de llegar a Estados Unidos.