Este lunes miles de estudiantes de nivel básico volvieron a clases tras el periodo de asueto extendido y forzado por la contingencia sanitaria del Covid- 19.
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Sin embargo como ta se había anunciado este regreso a clases no fue común, desde ahora y sabrá Dios hasta cuando, la educación será a distancia, tal como lo indicó la heroína del momento "Susana Distancia".
Es por ello que el papel del maestro, en este filme pre apocalíptico de la vida real, ahora será co-protagonizado por los padres de familia.
Desde días atrás los catedráticos se dieron a la tarea de diagnosticar los medios o canales de información a los que sus alumnos tienen acceso para poder mantener el contacto y conectarse para recibir contenidos e instrucciones. Obligando a los maestros a idear la dinámica de enseñanza o la vía de envío correcto de la lección.
Hubo desde los afortunados donde el acceso a las tecnologías y redes no representó algo fuera de lo común, pero también hubo aquellos a los que el simple hecho de pensar en una computadora con internet, significaba un lujo tal vez inalcanzable en el corto plazo.
Es por ello que en muchos casos, el viejo dicho de que " cada maestro tiene su librito", nunca se tomó de forma tan literal, este lunes, muchos padres de familia, acudieron a las escuelas, eso si, de lejesitos, a recoger sus libritos, que mas bien eran hojas con el plan de actividades para debutar en el campo del magisterio, y aunque la enseñanza en el hogar, es, o al menos debe ser continua,ahora los contenidos son los avalados por la SEP, salidos de la planeación del maestro.
Ahora tendrán que buscar el espacio y el tiempo, entre el que hacer del hogar o el trabajo, para brindar la cátedra a sus párvulos. Sin embargo para la dinámica no hay acordeón u oportunidad para decir o simular que el tema se vio y cumplió con el objetivo de aprendizaje.
Y es que los nuevos maestros, aunque se ahorraron la planeación, no se salvaron de integrar la carpeta de evidencias, tendrán que enviar fotos durante la realización de las actividades, así como del resultado final de las mismas.
Posteriormente el material se hará llegar a las direcciones e inspecciones, hasta llegar a las altas esferas del sistema educativo, quien a su vez determinará si la educación a distancia está cumpliendo su objetivo.
La tarea probablemente sea sencilla para los padres jóvenes, pero en aquellos casos donde los abuelos son quienes cuidan a los niños, porque papá y mamá trabajan, y el tiempo en el hogar es limitado, el reto será mayor.
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