Con el objetivo de combatir la desnutrición y la obesidad en la entidad, el Gobierno del Estado a través de la Secretaría de Salud, reforzó las valoraciones integrales a través de las consultas médicas, en las diferentes unidades.
Por ejemplo, mediante el programa “Pasia” de Medicina Preventiva, trabaja estrategias para atender los problemas nutricionales que aquejan a la población menor, a través de la revisión de peso y talla, así como seguimiento a los infantes mediante citas en las que se brinda orientación sobre los signos de alarma, así como un control estricto para su recuperación.
Este control nutricional se implementó en el estado en 2018, mismo que atiende en promedio a 2 mil 639 niñas y niños menores de 10 años de forma mensual, quienes presentan padecimientos relacionados a su estado de nutricional.
Mediante estas acciones, se observó una disminución en casos de pacientes con desnutrición en el 2018, ya que en el primer semestre se detectaron 916 niñas y niños, de los cuales 616 presentan desnutrición leve, 54 desnutrición moderada, seis casos de desnutrición severa, 190 en vías de recuperación y 50 en pesos normal.
Mientras que en el segundo semestre se tuvo un registro de 89 niñas y niños recuperados, 338 casos de desnutrición leve, 21 casos moderados, tres severos y 385 en recuperación.
Mensualmente son atendidos mil 400 pacientes de cinco a 19 años de edad, a quien se les lleva un control riguroso y son citados cada 15 a 30 días, según su condición de salud.
Estas enfermedades de no ser tratadas a tiempo pueden afectar el desarrollo y la salud de los menores y tiene efectos en el mediano y largo plazo en el rendimiento escolar e intelectual, así como en el desarrollo de capacidades que llegan afectar en el trabajo, e ingreso laboral en los adultos, lo que repercute en el desarrollo social.
Por ello es importante que los padres y tutores lleven a los pacientes a sus citas, valoración médica y orientación y seguimiento de cómo atender y tratar la malnutrición.
