El estado de Chihuahua se encuentra ante un escenario climático complejo, donde los últimos coletazos del fenómeno de El Niño siguen dejando su marca, mientras se vislumbra la posible llegada de La Niña en la segunda mitad del año, augurando condiciones aún más desafiantes para la región.
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Desde el inicio de la primavera, en el Estado Grande se presentaron fuertes vientos, además de nevadas en la Sierra Tarahumara, ya que los sistemas frontales, o frentes fríos, siguen descendiendo desde latitudes más septentrionales. Y de acuerdo a los últimos datos meteorológicos es probable que este clima inestable continúe.
Los efectos del Frente Frío 45
Según los expertos de Meteored, el próximo fin de semana se espera la influencia del frente frío 45, que cubrirá el Golfo de México, aportando humedad hacia la vertiente del Golfo.
Esto podría detonar tormentas aisladas y granizo en el Eje Volcánico Transversal y la Sierra Madre Oriental, especialmente desde el domingo, lo que significa que Chihuahua podría experimentar este fenómeno en los próximos días.
A pesar de estas posibles precipitaciones, el calor intenso continuará siendo una constante en la región. Este lunes y martes, se esperan temperaturas que oscilan entre los 36 y 45 °C en diversas zonas del país, incluyendo el noroeste, donde se encuentra Chihuahua.
Sin embargo, en las montañas de la Sierra Tarahumara, se estima que las temperaturas podrían ser más moderadas, rondando entre los 15 y 25 °C.
Además del calor, se pronostican ráfagas de viento que podrían alcanzar entre 60 y 80 km/h en promedio en varias zonas del país, incluyendo Chihuahua y otros estados del norte y Golfo de México.
La llegada de La Niña
Sin embargo, mientras El Niño se debilita, aumentan las posibilidades de que La Niña haga su entrada en la segunda mitad del año. Esta situación podría agravar la sequía que ya afecta a Chihuahua, complicando aún más las condiciones climáticas y poniendo a prueba la capacidad de adaptación y la resiliencia de los agricultores y ganaderos del estado, que vienen enfrentado un clima extremadamente seco desde el año pasado.
Ante este panorama, es crucial que las autoridades y la población estén alerta y tomen las medidas necesarias para hacer frente a los cambios climáticos que se avecinan, así como para mitigar los posibles impactos adversos en la región.
Nota original: El Heraldo de Chihuahua
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