Más de mil setecientas familias en esta región sur del estado y un número no determinado de empresarios pudieran verse afectadas ante el inminente paro de labores en la construcción, debido a los escasez del cemento.
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Tras el paro de labores que se hizo en las diferentes cementeras del país, los primeros efectos que se dieron fueron las compras de pánico desde el jueves. Se vaciaron ferreterías y centros de distribución.
A consecuencia de ello, se espera que, en los próximos días, varias de estas empresas pudieran parar labores paulatinamente. Las primeras serán aquellas que no tendrán abasto de su principal insumo que es el cemento.
Posteriormente lo harán las empresas o contratistas que sí lograron adquirir reservas de ese insumo, quienes lograrán prolongar sus actividades hasta que se agote lo que tienen, toda vez que en los negocios de venta de este insumo se asegura que será hasta el próximo mes cuando vuelvan a tener existencias.
Se estima que más de mil 700 familias dependen de los trabajadores de la construcción, se verán afectados en diferente medida. La anterior cifra corresponde a los afiliados del IMSS en los municipios de Allende, Balleza, El Tule, Guachochi, Guadalupe y Calvo, Parral, Jiménez, Santa Bárbara y San Francisco del Oro.
Sin embargo, la afectación la afectación será mayor debido a que muchos trabajadores laboran por su cuenta o no tienen acceso a la seguridad social.
El mismo portal del IMSS detalla además que en Parral son tan sólo 1117 incorporados a dicho instituto y en la zona 1753, quienes perciben salarios entre los 130 y 250 pesos diarios.
Además en los afectados hay que agregar a los profesionales de la construcción. La arquitecta Nancy Ling, vicepresidenta del Colegio de Arquitectos, indicó que en la ciudad son alrededor de 200 arquitectos. Algunos trabajan por su cuenta y otros para empresas; pero todos dentro del mismo ámbito de la construcción.
Englobó el problema al mencionar que las crisis nos pegan a todos; desde el albañil hasta los arquitectos. Añadió que, en la construcción, por chica que sea una obra, hay de dos a tres albañiles, algunas que ocupan hasta 50 trabajadores.
En nuestra ciudad la construcción es una rama importante en la economía parralense, afirmó y señaló que también a los materialistas se verán afectados.
Vaticinó que, con la emergencia, no se terminará trabajos en los tiempos estipulados; además, mencionó que se vaticina un conflicto laboral para empresarios y una crisis económica para quienes dependen de este trabajo, como lo son los albañiles.
Cabe mencionar que la construcción fue considerada como actividad no prioritaria dentro del decreto federal que busca frenar los contagios del Covid 19; sin embargo, hasta ahora no se había estimado una detención.
El paro obligado al que se someterá esta actividad no será una consecuencia directa de la emergencia sanitaria, sino indirecta, dado que su freno es por falta de insumo. Las productoras del cemento también fueron clasificadas como no prioritarias; sin embargo, este sí atendieron el decreto.
