Integrantes de la familia Ramírez Hernández, atletas de laetnia rarámuri, están de visita en nuestra ciudad festejando lasfiestas navideñas y de fin de año, tras haber conquistado eldesgastante y extremo “Maratón Oso Polar 2017”, efectuado elmes de noviembre en Churchill, Canadá, donde pusieron muy en altosu fuerza natural para correr que han tomado como su forma de vida,tras la falta de apoyo y de trabajo en su rancho “ElHormiguero”, de la Ciénega de Norogachi, municipio deGuachochi.
Esta familia de corredores indígenas, al igual que muchos, hancrecido trotando en los diferentes bosques y peligrosos caminos dela Sierra Tarahumara de Chihuahua, ya que es su principal medio detransporte, las necesidades de buscar educación o atenciónmédica y las carencias son muchas donde viven; siendo esto lo quelos empujó a buscar un recurso económico en las diferentescarreras pedestres, como los Ultra Maratones de Los Cañones, enGuachochi y Caballo Blanco, en Urique, así como en lascompetencias en que son invitados.
Lo escrito ha sido expresado por el patriarca de la familia,Santiago Ramírez, en compañía de una de sus hijas, María JuanRamírez Hernández, siendo el Sr. Rubén Quiñonez el enlacedirecto para efectuar la entrevista con estos corredores de eliteinternacional, al encontrarse en nuestra ciudad, pasando lasfiestas decembrinas, tras haber conquistado la proeza y el granlogro de ganar el “Maratón Oso Polar 2017” de Churchill,Canadá en su primera intervención; señalando que “Parral lesgusta para correr, como en su momento a Francisco Villa paramorir”.
La familia es de diez integrantes, siendo cinco los que sededican a correr, donde el entrenamiento diario es el laborar sutierra, arrear chivas, acarrear agua, lo que los mantiene en formapara recorrer grandes distancias.
Este tipo de vida que han adquirido por tradición de padres ahijos, sin pretenderlo es genética, se hacen desde muy tempranaedad atletas. No entrenan, porque siempre están listos paracualquier competencia. Haciéndose toda una rutina el correr, y lautilizan para llevar a su comunidad un recurso económico quemejore en algunos aspectos su calidad de vida, que suele ser muyaustera.
El jefe de la familia, Santiago Ramírez y su hija, María JuanRamírez Hernández de 17 años, se cubrieron de gloria al ganar el“Maratón Oso Polar 2017” en Churchill, Canadá, en lasdistancia de 50 kilómetros y 21 kilómetros, respectivamente, quelos alzó a la gloria y reconocimiento nacional por tan grandeproeza, donde también su hijo Mario Ramírez, tuvo participaciónquedando segundo lugar en 42 kilómetros. Cabe destacar que secorrió a temperaturas extremas de menos 20 grados y sensacióntérmica de menos 27.
El linaje Ramírez Hernández está conformado por grandescorredores y ha saltado a la fama al conquistar los primeroslugares, en los diferentes maratones en los que han participadodentro del país, así como por las ciudades de Europa como Españay Francia, además de Japón y de Norteamérica como Canadá, paracolocar muy en alto su etnia rarámuri (Pies Ligeros), que hantomado como un trabajo o su forma de vida, para un mejor bienestardentro de la familia.
Santiago Ramírez Bustillos, mencionó que para el año 2018 setienen planes e invitaciones de volver al Maratón “Oso Polar”,así como ir a varios países de Europa y de volver a estar ennuestra ciudad en la carrera a benéfico de los niños conautismo.
Para terminar, Santiago y María Juana Ramírez, mostrando unrostro de felicidad, enviaron un saludo a toda la poblaciónparralense, diciendo que se les cumplan todos los deseos el añoque entra, así como mucha salud y unión familiar.
“Porque juventud y hambre es el don más preciado que puedeconceder la vida a un noble corazón rarámuri y es la razón deser”.