Uno de los temas que más le interesa abordar en su trabajo a Marina de Tavira es el cuidado de la salud mental. Es por ello que, este año, producirá una obra de teatro en la que se plasmarán los retos, dificultades y problemáticas a las que se enfrentan las personas que viven con depresión o ansiedad.
Ésta será una obra clásica, sin embargo, la actriz no quiso revelar el título debido a que aún se encuentra en proceso de adaptación, pero asegura que será una gran producción que puede ayudar a muchos a salir adelante.
“Es muy importante hacer este tipo de proyectos, montarlos para el espectador porque así el público que puede estar viviendo este tipo de problemas se puede sentir acompañado. Mi objetivo en el teatro es ese, que la gente no se sienta sola, que lo que nos pasa a unos, les pasa a otros también, sólo que algunos sí lo dicen, otros no, pero de alguna forma todos atravesamos eso”, afirmó de Tavira en entrevista.
“Lo peor es sentir que lo que uno está viviendo nadie lo entiende y el teatro es ese lugar donde nos vamos a entender unos a otros. Esta obra es un clásico, habla sobre la depresión y la ansiedad que son temas que ahorita debemos de ponerle mucho ojo porque existe mucho más de lo que la gente se atreve a confesar”, agregó.
La idea de realizar este proyecto es debido a que, en los últimos años, la también productora se percató del aumento de casos de estos trastornos en la población, inclusive ella misma confesó haber vivido cuadros de depresión y ansiedad.
“Todos de alguna manera hemos atravesado este tipo de procesos, algunos los hacen muy personales, uno lo trabaja al interior, pero yo creo que son temas que tienen que abordarse, sobre todo encontrar la solución porque últimamente he visto que mucha más gente de la que lo puede confesar pasa por procesos difíciles de salud mental”, aseguró.
De Tavira, quien fue nominada al Oscar en 2019 por su trabajo en la cinta Roma, considera al teatro como su segunda casa. De hecho el año pasado volvió con la obra Consentimiento, de Nina Raine, bajo la dirección de Enrique Singer, luego de un tiempo de ausencia y de dedicarse al cine.
“Es una obra fuerte, que habla de nuestras partes oscuras. Aborda a un grupo de abogados y la forma en cómo se relacionan con ciertos casos de violación; es interesante ver cómo a veces no se ve a la persona sino que se ven sólo como casos que se pueden descartar.
“Fue una obra que escogimos con todo el riesgo de saber que podía ser polémico porque justamente no plantea ninguna respuesta, ni personajes heroicos, casi nadie se salva, es como un espejo desagradable, pero es importante a veces mirarse en este tipo de espejos para cambiar y el teatro sirve para eso, para transformarse como sociedad”, dijo.
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A mediados del mes de febrero, Consentimiento volverá al Teatro Helénico con tres únicas funciones.
Paralelo, la actriz quien este año cumplirá 50 años de vida, participa en la cinta Latido, de la directora Katina Medina Mora y estrenará próximamente El aroma del pasto recién cortado, de Celina Murga.
“Estoy en un momento de mi vida donde me siento muy feliz, plena, satisfecha, llego contenta, muy alegre de haber trabajado tanto”, concluyó.
