Ser el pilar familiar no es un asunto de género

El gran reto del día a día. Del sustento y de ser el pilar familiar no es un asunto de género. Los estereotipos quedan en el pasado la realidad incorpora e iguala. Las mujeres de la cotidianidad marcan la diferencia.

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La señora María Aidé Remigio Barrientos, es una madre de siete hijos que busca hacer rendir el dinero que entre ella, su marido y dos de sus hijos llevan a casa con el fin de tener un plato sobre la mesa.

Para ello, María, realiza varias manualidades tales como hacer dulceros, paletas de chocolate y hasta lavar ropa ajena con el fin de obtener “un pesito” para el sustento de su familia, aunque la ventas de éstos, no siempre son diarias; sin embargo, busca la manera de llevar dinero a casa.

Aun y con el apoyo incondicional de su esposo, indicó que en ocasiones no le es suficiente, ya que deben realizar además de los gastos de la despensa, el pago del agua y luz, así como de medicamentos, por lo que debe “estirar el dinero” a fin de llegar al próximo pago semanal.

“Nos hemos dado cuenta que hacer las cosas hacen que rindan más, por eso es que en vez de comprar un kilo de tortillas, compramos harina para hacerlas, ya que sale más producto, y aunque debo esforzarme por preparar la masa y palotear, no importa, ya que con ello le quito el hambre a mis hijos” dijo.

Asimismo, debe cargar con una enfermedad que para ella es “desconocida” la cual hace que la señora María pierda el conocimiento sin previo aviso y por más que acude al médico, estos no le han detectado nada, por lo que han llegado a pensar que requiere de ciertos estudios que solo en la capital del estado pueden realizar, no obstante, no le dan la orden para que vaya a hacérselos.

A pesar de esto, María es una mujer capaz de salir adelante, ¿la razón? Como ella lo dijo son sus hijos, quienes también apoyan con los gastos de la casa, ejemplo de ello es José Enrique Pavón Remigio su hijo de 15 años de edad, quien a su corta edad, trabaja almacenando pasturas todo con el fin de ayudar con los gastos de la casa.

Esto, inspira a María a superar las adversidades del día a día en su vida, sin importar las enfermedades o la falta del recurso económico, ella haría cualquier cosa por llevar el sustento a su casa, pues ser mujer, no significa que no pueda ser fuerte y tratar de salir adelante.