Parral, Chih.- Son seis los elementos que conforman el escudo episcopal del próximo obispo de Parral, Mauricio Urrea Carrillo, donde destaca entre ellos el Símbolo Mariano, de gran importancia en toda su vida sacerdotal, por su filial devoción a la Santísima Virgen María y estar siempre bajo su amparo.
El derecho a una heráldica o un escudo de armas, propiamente eclesiástica tiene su fundamento en que la Iglesia en cualquiera de sus ramas posee una constitución jerárquica.
Esta característica marca, pues, la diferencia con la heráldica general, porque no se trata ya, como sucedía con aquellos miembros de la nobleza, del ejercicio de la profesión de las armas ni del nacimiento en una determinada familia, sino que lo que dará el derecho a usar un escudo eclesiástico es el estado de la persona dentro de la jerarquía.
Dicho estado se basa en el ejercicio de cargos eclesiásticos y en el carácter de algún tipo de consagración, en este caso por su consagración como obispo.
El escudo episcopal de Mauricio Urrea Carrillo está compuesto por estos seis elementos:
Un primer elemento que es representado por un capelo o galero, que se ha utilizado dentro de la Iglesia Católica y que es un sombrero de ala ancha usada por el clero, con cordones terminados en borlas que quedaban sobre el pecho. Tiene su origen en los sombreros de peregrino. Se utiliza en heráldica eclesiástica desde el siglo XIV, sustituyendo a las mitras en los escudos.
El segundo elemento es un Lirio, que se destaca con tres flores, que representa la familia de Dios le ha dado al Sr. San José poniéndola bajo su cuidado. Por lo que es la forma en que se simboliza el patrocinio del Sr. San José a la ciudad de Parral. Y al fondo una escuadra utilizada por los carpinteros, oficio de San José.
El tercer elemento es representado por un árbol de encino: representa las raíces de don Mauricio, árbol típico de Nogales su tierra natal. Y simboliza el árbol de la sabiduría. También contiene el escudo una bellota, que representa que es el fruto que dio la ciudad de Nogales al nombrar al pastor Mauricio obispo de Parral. Y una biblia, que simboliza su trayectoria académica y que además es el libro de la excelencia.
El cuarto elemento es el símbolo mariano, como ya comentamos líneas arriba, de gran importancia en toda la vida sacerdotal de Don Mauricio, por su filial devoción a la Santísima Virgen María y estar siempre bajo su amparo.
El quinto elemento dentro del escudo episcopal es una cruz de procesión a un travesaño, es parte del esquema fundamental de la heráldica episcopal.
Finalmente, el sexto elemento es lema o una frase escrita en un listón que expresa en latín “non enim habemus hic manentem civitatem, sed futuraminquirimus”, que es una frase tomada de la carta a los hebreos (13,14) que significa: “porque no tenemos aquí una ciudad permanente, sino que buscamos una futura”.
Estos son los elementos que describen el origen, estudios, raíces y profesión de fe de Monseñor Maurcio Urrea Carrillo, próximo tercer obispo de la Diócesis de Parral.
