El frío ayuda a las siembras de la temporada otoño invierno, ya que favorece para matar el ciclo biológico de las plagas que se presentan en las plantas, los cultivos de avena y trigo echan más fijos para la producción del cereal, da más horas frío a los nogales y se tenga una mejor calidad de la nuez y además ayuda el frío a la pradera.

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Roberto Baca superintendente del Distrito 14 de Sader señaló que a diferencia de lo que piensan algunas personas de la ciudad que los fríos congelan los plantíos de la temporada es al contrario son de gran beneficio la temporada invernal para el campo, los cultivos otoño-invierno para eso están para aguantar las bajas temperaturas.

Los plantíos del trigo y de la avena son beneficiados con el frío, echan más fijos en las plantas y el agricultor requiere de menos semilla para las siembras, ahora con las heladas que se están presentando les beneficia bastante, indica el funcionario que se necesita del frío también para que se componga el campo. Señala que la pradera requiere también de bajas temperaturas así como la cebolla de otoño-invierno, que ahora están plantadas y con el cambio del clima reacciona mejor la producción.

Los nogales requieren de más horas frío y con ello la producción de nuez es de mejor calidad, es decir ahora los nogales están en dormancia están en receso y necesitan de 400 a 800 horas frío para que produzcan mejor calidad de nuez, las nogaleras de Parral, Allende y de Jiménez, cuando hay poco frío la naturaleza baja la producción, hasta ahora está pintando bien el año.

Indica que habiendo humedad los agostaderos se recuperan y se requiere menos bombeo de agua para las siembras.