Panorama crítico para el 2021 en el campo jimenense, presas de la región cerrarán el año con niveles que comprometen el próximo ciclo agrícola. Ante dicha situación, la superficie de siembra se reducirá en 600 hectáreas. En los últimos dos años, se han dejado de trabajar dos mil hectáreas, por la falta de líquido vital.
Con el fin de año a la vuelta de la esquina y la nula presencia de lluvias en la Vieja Huejoquilla y la región, el panorama en el campo se avizora crítico para el 2021, según lo informó el jefe de la Secretaría de Agricultura, en el distrito de Jiménez, Roberto Baca Perea.
En este sentido, el entrevistado indicó que las presas de esta región, específicamente Pico de Águila y San Gabriel, se encuentran al 47.18 y 30.50 por ciento, respectivamente, cantidad insuficiente para el próximo ciclo agrícola.
Dicha situación ha obligado a nuevamente reducir la superficie de siembra, en los últimos dos años, se han dejado de trabajar 2 mil hectáreas. En 2018 se sembraron 5 mil, en 2019 fueron 4 mil 800. Este año la reducción fue de mil 200 hectáreas, por lo que solo se sembraron 3 mil 600.
Para el próximo año, la reducción será de 600 hectáreas, por lo que el próximo ciclo agrícola tendrá que proyectarse con solo 3 mil hectáreas. Dicha situación representa un fuerte golpe a la economía de los productores.
La sequía ha venido afectando también a la ganadería, la falta de agostaderos ha impactado el bolsillo de ganaderos que se ven obligados a suplementar la alimentación de sus animales con forrajes, los cuales, en el caso de la alfalfa, han alcanzado precios de hasta 120 pesos por paca, y que ante este panorama, anuncian otra escalada de precios.
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