Luego de las nuevas disposiciones emitidas por el jefe del ejecutivo estatal, Javier Corral, para aminorar los estragos de la contingencia sanitaria en la entidad, se pudo constatar que en la Vieja Huejoquilla, las personas acataron de buena manera las indicaciones.
Pese a que la restricción de horarios entró en vigor desde hace algunos días, este fue el primer fin de semana bajo la nueva modalidad que ha sido llamada “súper cierre”, por el paro de prácticamente toda actividad económica.
A diferencia de otros sábados de pandemia en Jiménez, anoche el panorama fue completamente distinto, las calles del poblado lucieron prácticamente vacías, la gran mayoría de las personas optó por el confinamiento.
La calzada Juárez, la arteria principal y por la que las personas acostumbran dar la vuelta, quedó desértica desde antes de las 19:00 horas, el panorama fue el mismo en la Plaza Principal, así como en calles aledañas.
La calle Independencia y la Hidalgo, abandonadas, un panorama desolador en otrora época, o simplemente un año atrás, pero esperanzador en este año que se ha ido entre la cuarentena, la enfermedad y la pérdida de seres queridos.
Claro que no faltaron aquellos que tal vez se aventuraron a retar su suerte y las indicaciones, o bien, aquellos que por autorización o desempeñarse en un giro esencial, regresaban de sus trabajos o continuaban laborando.
Por fortuna no hubo tolerancia, agentes municipales patrullaban la ciudad para exhortar a la gente que no tenía la necesidad de estar en las calles, a regresar a sus casas. Al momento de esta publicación no se reportó alguna novedad o desacato a la autoridad.
