DELICIAS.- Las dificultades de los pacientes de Covid-19 para abastecerse de agua, motivó a un grupo de ciudadanos a llevar este lunes una dotación de 1 mil 500 botellas del líquido a la clínica 11 del Instituto Mexicano del Seguro Social, al que además donarán próximamente 2 mil cubre bocas.
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Fue la primera entrega realizada como parte de la campaña denominada “Una gota de esperanza”, que dirige el empresario local Luis Eduardo Bassanetti, quien convocó a la ciudadanía a sumarse a este proyecto que nació después de conocer las dificultades por las cuales atraviesan tanto los pacientes como las enfermeras y enfermeros.
Bassanetti explicó que días atrás un familiar suyo estuvo internado en el Seguro Social por complicaciones derivadas del Covid, y fue entonces que se percataron de la gravedad del problema de la falta de agua para los pacientes.
“Y no es porque haya desabasto en el Instituto, sino porque es muy difícil para los enfermeros: una vez que entran ya no pueden salir, por los equipos especiales, por el área contaminada; entonces, una vez que ingresan, los enfermeros se tienen que encargar de rellenar los vasos o los botes de agua para los enfermos, lo cual es muy difícil por la situación”, explicó el altruista.
Detalló que las botellas entregadas son de 500 mililitros cada una, en cuyas etiquetas se imprimió un pasaje bíblico de aliento, para que los cuidadores de los enfermos no tengan que hacer más esfuerzos, mencionando que algunas familias delicienses ya se sumaron a la causa.
El empresario adelantó que analizarán la entrega de apoyos a los pacientes internados en otros hospitales de la ciudad. Asimismo dijo que invitarán a la ciudadanía a donar medicamentos que se requieren para tratar a los enfermos de Covid.
De igual manera, anticipó que un contacto de la ciudad de Tehuacán, Puebla, les enviará 2 mil cubrebocas para entregarlos al personal que labora en la clínica 11 del IMSS, ya que diariamente se utilizan cantidades grandes de este insumo y las instituciones de salud no se dan abasto.
Laura Ríos, jefe del departamento de abastecimientos del hospital del Seguro Social, comentó que para los enfermeros es complicado bajar a otro piso para traer agua, porque es indispensable que permanezcan donde están los pacientes.
Aplaudió que en las botellas de agua se incluyeran palabras de ánimo para los enfermos, quienes por su condición han perdido el contacto con otras personas, incluso con los médicos y enfermeras que los atienden, pues el traje que éstos usan les cubre el rostro.
La funcionaria resaltó que algunos de los enfermos que fueron dados de alta han llevado, en agradecimiento por la atención brindada, algunos insumos para el personal médico y de enfermería.
Mencionó además que los guardias de seguridad de la clínica, contratados por una empresa externa y quienes cubren turnos de 24 horas, también necesitan de la ayuda de los ciudadanos, por lo que solicitó despensas para ellos.
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