La situación económica por la que atraviesan hará que la Navidad peligre para Melanie Sherlyn Moreno, quien es una pequeña que vive en la colonia Che Guevara. A sus cuatro años de edad ya tiene la ilusión de la llegada de Santa Claus, a quien le encargó una bicicleta de Frozen, su personaje favorito.
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Sherlyn no conoce de las necesidades por las que pudieran atravesar económicamente y ya le hizo la carta a Santa Claus; le contó que ha sido una pequeña muy buena, que a pesar de las condiciones de la pandemia, ha puesto todo su esfuerzo para aprender desde su casa.
"Yo ya voy a la escuela", exclama la pequeña Melanie, quien ya se aprendió los colores mediante el nuevo sistema de educación y añora convivir con sus compañeros.
El mismo estrago de la pandemia, hablando económicamente, le ha repercutido a la familia, quien vive en el sector de la periferia de la ciudad.
Sin embargo, la inocencia de la niña no le da permiso de enterarse que, a veces, hay situaciones que dificultan el conseguir lo que uno añora; en fin, pequeños.
Sus padres, Vanessa y Sergio, ya están evaluando opciones para que la niña no pase desapercibida la fecha; desafortunadamente aseguran que la crisis los golpeó.
Son un matrimonio joven, puesto que ninguno de los dos rebasa los 30 años, y a pesar de que la situación que viven actualmente no es la más próspera económicamente hablando, algo que sobra es el amor.
Un reflejo de ello es la pequeña Melanie Sherlyn quien, divertidamente posa, derrochando felicidad; ese sentimiento que le transmiten desde su núcleo familiar.
