Hasta la pérdida del empleo de manera paulatina puede llegar si el gobierno de Estados Unidos aumenta los aranceles un 5 por ciento, manifestaron un economista y los sectores ganadero y maderero, por lo cual esperan que se llegue a un acuerdo.
Luego que el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, destacara que aumentaría aranceles a México, el maestro en Economía, Javier Martínez, destacó que los aranceles son impuestos en donde Estados Unidos va a comprar igual; pero ponen aranceles los exportadores tendrán más complicaciones porque el vendedor tiene que pagar impuestos en Estados Unidos.
Indicó que, si los productos son más caros, no pueden vender más barato y pierden la competitividad porque los productos son más caros.
“El problema es que si una empresa deja de vender afecta el empleo y bajan los salarios. Podría haber pérdida de empleo a largo plazo, se pierde competitividad; sin embargo, hay que esperar lo que manifieste el presidente de Estados Unidos”.
Por su parte, Fidencio Loya, gerente de la Ganadera local, destacó que si se llegan a aumentar los aranceles, les va a perjudicar porque este año no se perfila positivo para México. En Estados Unidos se queda el 40 por ciento sin sembrar de maíz a consecuencia de los estados que sufrieron inundaciones; esto provoca que baje el precio del becerro y las engordas, porque decaen los inventarios.
Destacó que es importante recordar que la ganadería de Chihuahua está articulada para importación y si se suman los combustibles, los precios, las empresas ganaderas se ven afectadas porque la productividad baja. Esto puede generar que haya menos productividad, incluso ganaderos de edad avanzada abandonan la actividad.
Dijo que las expectativas no son halagüeñas ni por parte del Gobierno mexicano, ni con ese arancel. Asimismo, recordó que los elementos que utilizan para los ranchos llevan productos de importación, sean medicinas, concentrados; todo, por lo que “deseamos que se llegue a un arreglo y no se cumpla la aplicación de esos aranceles.
Por otro lado, el maderero Javier Portillo, añadió que esta situación afecta directamente al productor mexicano en la madera, ya que la venden a industriales locales y hay quien vende a otras ciudades, elaboran productos por lo que si se incrementan los aranceles va a ser un duro golpe.
“Hay una recesión en la madera y si se dan estos aranceles se complicará y frenará la producción de de las empresas, porque los clientes frenarán las compras hasta llegar al ejido. Representa menos venta, incluso puede representar menos empleo, lamentó.