Un sueño hecho realidad fue la fiesta de quince años de Fernanda Mendoza Triana, quien desde niña soñó con cumplir este anhelo.
Acompañada de sus padres: Javier Mendoza y Marisol Triana, la joven dio gracias a Dios por permitirle cumplir esta maravillosa experiencia y recibió su eucaristia en una ceremonia religiosa en su honor celebrada en el Templo de San Juan de Dios.
Posteriormente, la festejada y sus seres queridos se trasladaron a una agradable y divertida recepción organizada en céntrico salón de la ciudad.
En medio de un ambiente juvenil y alegre, familiares y amigos de María Fernanda la recibieron de pie y entre aplausos.
El momento más emotivo fue cuando la festejada bailó el vals del brazo de su padre.