No cabe duda que lo mejor que podemos ofrecerle a nuestro México, a nuestros hijos, nietos y a nosotros mismos, es luchar con todas las fuerzas por detener la deformación de cuarta que ha iniciado el Presidente Manuel Andrés López Obrador. Este hombre resultó ser otro agente más del Socialismo Global o Neo-comunismo, dirigido nada más y nada menos que por la Elite de elites es decir “La Judeo-masonería talmúdica”.
Esta mafia trasnacional expolia ambiciosamente casi todos los Países del orbe con sus oscuras agendas de endeudamiento descomunal, perversión, despoblación, y hasta transhumanismo. Aprovecharon las democracias y la ingenuidad de los pueblos para arribar al poder poniendo políticos a modo que provocan desastres económicos y sociales, la indigna pérdida de sus valores patrios, educación, soberanía y autodeterminación. A México actualmente lo llevan a la muerte con el incremento de su deuda a razón de 2500 millones de pesos diarios o sea el equivalente a un avión de Peña Nieto que nunca rifaron.
Desde los orígenes del morenismo pervirtieron más a la política vendiendo gran parte de sus candidaturas a cuanto delincuente quieren como es el caso de Napoleón Gómez Urrutia. Igualmente empoderaron la violencia legal, el abuso del poder y la impunidad. Así mismo traen como libreto la inclusión de extranjeros sin Patria con metralleta en mano como es la aún ilegal Guardia nacional. Este brazo armado desvirtúo a la milicia y cuerpos policiacos, quienes debilitados con la compra de voluntades, degradación y corrupción, frustraron su verdadera naturaleza. Los militares mismos están decepcionados de su propio apatridismo.
López Obrador engaña cínicamente a los mexicanos y se extralimita en todo; despojó ávidamente de su presupuesto a la gran mayoría de Instituciones y Fideicomisos que incentivaban el progreso y la autonomía del poder ejecutivo. Les cerró el apoyo a miles de empresas e industriales y se perdieron millones de empleos e inversiones. Han muerto cientos de miles de personas por la inseguridad y el Covid y un largo etcétera. Actualmente de cada 10 pesos recaudados, 8 van para él y el resto es para Estados y municipios argumentando mentiras a granel como el que así se acaba con la corrupción.
Cuenta además con un ejército de cibernautas y disidencia controlada como no se había visto nunca; muchos de sus enemigos son ahora agentes que se desviven por manipular a los mexicanos haciéndoles creer que la Revocación de mandato (R.M.) es un engaño. Primero los asustan, luego los acobardan y finalmente los desilusionan esgrimiendo que es una acción del mismo López Obrador para ratificarlo. Cierto que estando en el pináculo de su popularidad éste la apoyó y la hacía suya pese a que se cocinó desde el 2007; alardeaba que se iba a someter a ella, pero viendo que en las elecciones pasadas lo apoyaron solo 20 millones y 24 estuvieron en contra, desmembró el presupuesto del INE con 3500 millones de pesos, precisamente lo que se necesitaba para la revocación. UNA TRAMPA TRAS OTRA.
Dicen que engañar a un mexicano es más fácil que convencerlo aún con los datos en la mano. Creer que es más conveniente esperar a que termine de destruir al País sería el más grande error histórico. Estas personas no tienen miramientos. La democracia no termina en las urnas, asumamos nuestra responsabilidad de ciudadanos plenos cuidando el actuar de cada político que se sienta en el poder y si traicionan, echarlos para fuera.
