/ sábado 19 de junio de 2021

Verdades elocuentes | Línea 12 del metro en CDMX

Segunda Parte

Sin duda la corrupción en nuestro País ha mostrado su más alto resplandor con el colapso de la línea 12 del metro en Cdmx. La ambición del ser humano acaba con inocentes; ésta trágica desgracia cobró la vida de 26 personas y casi un centenar de heridos. La mal llamada línea dorada tiene una longitud de 23.7 km. y fue inaugurada en Octubre de 2012; se dice que el costo fue de 24 mil millones de pesos y aparte las constructoras demandaron el pago de 3 mil 969 millones de pesos por trabajos que inicialmente no estaban contemplados.

El presupuesto de la obra se redujo mediante un esquema no previsto por la ley mermando la calidad y cantidad de los materiales utilizados en la construcción. En marzo de 2014 se detectó desgaste acelerado de los rieles y se cerró durante 6 meses. En Febrero de 2015 la Auditoría Superior de la Federación publicó un reporte confirmando mediante pruebas de laboratorio fallas y vicios de origen, mal diseño, falta de mantenimiento y uso de vagones con dimensiones y peso superiores a lo proyectado; puso de relieve que el consorcio constructor no ejecutó los protocolos de pruebas ni fueron firmados los planos por el director responsable de obras ni por los corresponsables en seguridad estructural e instalaciones, encontró la presencia de desgaste prematuro en materiales del sistema de vías ya que no se logró una adecuada integración tren-vía y detectaron vicios ocultos en varios elementos de las instalaciones fijas, como durmientes, aparatos de vías, placas elásticas y defectos en las soldaduras alumino-térmicas.

Ese mismo año un sector de la Cámara Alta de Diputados pedían profundizar en el deslinde de responsabilidades acusando una serie de deficiencias, fallas y sobrecostos, recorte y desvío de recursos de diversos aspectos desde su planeación; ejecución y puesta en marcha; señalando que los problemas existían desde antes de la apertura de la línea. Acusaban como responsables a Marcelo Ebrard, al ex titular del metro Enrique Horcasitas Manjarrez y al Director de finanzas metropolitanas Lic. Mario Delgado Carrillo, quien tuvo la desvergüenza de rentar los vagones a un costo tres veces más alto que su real valor de adquisición.

En 2017 después del cismo se detectaron vicios ocultos y fallas estructurales, uno de ellos cerca de donde se desplomo el metro. En todas las curvas con radios menores de 300 mts. se detectaron vibraciones y movimientos verticales atípicos o bamboleos con deficiente y tardía supervisión. A la fecha la obra suma una alta lista de irregularidades que con el tiempo llegaron a un grado mayor de complicación. Ésta es la tercera ocasión que se detectan fallas estructurales; los vecinos lo denunciaron y los especialistas lo advirtieron.

El New York Times responsabiliza de esta tragedia a Ebrard Casaubón y su equipo junto con el Grupo Carso de Carlos Slim. Llegaron a la conclusión que sin duda el colapso fue por mal diseño de origen y falla estructural. Señalaron que el Gobierno mexicano realiza trabajos burdos donde prevalece el conflicto de interés.

Segunda Parte

Sin duda la corrupción en nuestro País ha mostrado su más alto resplandor con el colapso de la línea 12 del metro en Cdmx. La ambición del ser humano acaba con inocentes; ésta trágica desgracia cobró la vida de 26 personas y casi un centenar de heridos. La mal llamada línea dorada tiene una longitud de 23.7 km. y fue inaugurada en Octubre de 2012; se dice que el costo fue de 24 mil millones de pesos y aparte las constructoras demandaron el pago de 3 mil 969 millones de pesos por trabajos que inicialmente no estaban contemplados.

El presupuesto de la obra se redujo mediante un esquema no previsto por la ley mermando la calidad y cantidad de los materiales utilizados en la construcción. En marzo de 2014 se detectó desgaste acelerado de los rieles y se cerró durante 6 meses. En Febrero de 2015 la Auditoría Superior de la Federación publicó un reporte confirmando mediante pruebas de laboratorio fallas y vicios de origen, mal diseño, falta de mantenimiento y uso de vagones con dimensiones y peso superiores a lo proyectado; puso de relieve que el consorcio constructor no ejecutó los protocolos de pruebas ni fueron firmados los planos por el director responsable de obras ni por los corresponsables en seguridad estructural e instalaciones, encontró la presencia de desgaste prematuro en materiales del sistema de vías ya que no se logró una adecuada integración tren-vía y detectaron vicios ocultos en varios elementos de las instalaciones fijas, como durmientes, aparatos de vías, placas elásticas y defectos en las soldaduras alumino-térmicas.

Ese mismo año un sector de la Cámara Alta de Diputados pedían profundizar en el deslinde de responsabilidades acusando una serie de deficiencias, fallas y sobrecostos, recorte y desvío de recursos de diversos aspectos desde su planeación; ejecución y puesta en marcha; señalando que los problemas existían desde antes de la apertura de la línea. Acusaban como responsables a Marcelo Ebrard, al ex titular del metro Enrique Horcasitas Manjarrez y al Director de finanzas metropolitanas Lic. Mario Delgado Carrillo, quien tuvo la desvergüenza de rentar los vagones a un costo tres veces más alto que su real valor de adquisición.

En 2017 después del cismo se detectaron vicios ocultos y fallas estructurales, uno de ellos cerca de donde se desplomo el metro. En todas las curvas con radios menores de 300 mts. se detectaron vibraciones y movimientos verticales atípicos o bamboleos con deficiente y tardía supervisión. A la fecha la obra suma una alta lista de irregularidades que con el tiempo llegaron a un grado mayor de complicación. Ésta es la tercera ocasión que se detectan fallas estructurales; los vecinos lo denunciaron y los especialistas lo advirtieron.

El New York Times responsabiliza de esta tragedia a Ebrard Casaubón y su equipo junto con el Grupo Carso de Carlos Slim. Llegaron a la conclusión que sin duda el colapso fue por mal diseño de origen y falla estructural. Señalaron que el Gobierno mexicano realiza trabajos burdos donde prevalece el conflicto de interés.