/ miércoles 11 de noviembre de 2020

Todo el mundo es un maestra | Equilibrio en tiempos de pandemia

La homeóstasis en un término que se utiliza especialmente en la biología, se refiere al equilibrio que deben sostener las células del organismo para estar vivas, cuando se pierde el equilibrio las células mueren. La diferencia entre estar vivos o muertos se encuentra en el equilibrio homeostático. El equilibrio es fundamental para nuestra salud física pero también aplica a nuestra salud mental y espiritual.

Mantener la diversidad de células de nuestro organismo en equilibrio es un trabajo que requiere esforzarnos en la manera en cómo nos alimentamos y cómo gastamos la energía que consumimos; comer correctamente y hacer el ejercicio adecuado. Cuidarnos apoya a las células de nuestro sistema inmunológico como los linfocitos T que combaten virus y bacterias que nos perjudican.

Sin embargo ahora la neurociencia también nos advierte sobre el equilibrio en nuestros pensamientos para mantener el equilibrio de las células de nuestro sistema nervioso (neuronas) que se comunican y mantienen su equilibrio a través de neurotransmisores como dopamina, norepinefrina, epinefrina, serotonina e histamina, que se hacen a partir de aminoácidos. Para mantener el equilibrio en las células que manejan nuestra mente, las neuronas se pueden buscar diferentes estrategias que van desde lo espiritual aprendiendo técnicas, repitiendo cánticos o ejecutando rituales, por ejemplo para los católicos, puede ser rezar el rosario. Crecer espiritualmente significa aprender a conservar el equilibrio.

El equilibrio nos permite ser sensatos, mantener el contacto con la realidad y aprender a evitar los extremos, que dividen y separan. Con esta actitud buscamos la reconciliación, incluso con lo que parece ser opuesto.

Quien tiene conciencia de la espiritualidad, comprende que los innumerables hilos que recorren todo este universo son necesarios, pues son ellos los que entretejidos, conforman el maravilloso tapiz de la existencia. Hay que mantener estos hilos en paz y en armonía.

La medida de la sabiduría práctica de una persona es su capacidad para conservar el equilibrio y al conseguirlo se mantiene en paz. El equilibrio es una cualidad y una virtud que hace que la vida sea pacifica y feliz.

Para encontrar el equilibrio hay que buscar la manera de alejar emociones negativas como el miedo que nos acosa en estos tiempos de pandemia, y el miedo se combate con el equilibrio en nuestras acciones, dándole oportunidad a nuestras emociones positivas como el amor, que se desarrolla con acciones como la empatía, bondad y caridad.

Ing. Adalberto Gutiérrez Chávez.


La homeóstasis en un término que se utiliza especialmente en la biología, se refiere al equilibrio que deben sostener las células del organismo para estar vivas, cuando se pierde el equilibrio las células mueren. La diferencia entre estar vivos o muertos se encuentra en el equilibrio homeostático. El equilibrio es fundamental para nuestra salud física pero también aplica a nuestra salud mental y espiritual.

Mantener la diversidad de células de nuestro organismo en equilibrio es un trabajo que requiere esforzarnos en la manera en cómo nos alimentamos y cómo gastamos la energía que consumimos; comer correctamente y hacer el ejercicio adecuado. Cuidarnos apoya a las células de nuestro sistema inmunológico como los linfocitos T que combaten virus y bacterias que nos perjudican.

Sin embargo ahora la neurociencia también nos advierte sobre el equilibrio en nuestros pensamientos para mantener el equilibrio de las células de nuestro sistema nervioso (neuronas) que se comunican y mantienen su equilibrio a través de neurotransmisores como dopamina, norepinefrina, epinefrina, serotonina e histamina, que se hacen a partir de aminoácidos. Para mantener el equilibrio en las células que manejan nuestra mente, las neuronas se pueden buscar diferentes estrategias que van desde lo espiritual aprendiendo técnicas, repitiendo cánticos o ejecutando rituales, por ejemplo para los católicos, puede ser rezar el rosario. Crecer espiritualmente significa aprender a conservar el equilibrio.

El equilibrio nos permite ser sensatos, mantener el contacto con la realidad y aprender a evitar los extremos, que dividen y separan. Con esta actitud buscamos la reconciliación, incluso con lo que parece ser opuesto.

Quien tiene conciencia de la espiritualidad, comprende que los innumerables hilos que recorren todo este universo son necesarios, pues son ellos los que entretejidos, conforman el maravilloso tapiz de la existencia. Hay que mantener estos hilos en paz y en armonía.

La medida de la sabiduría práctica de una persona es su capacidad para conservar el equilibrio y al conseguirlo se mantiene en paz. El equilibrio es una cualidad y una virtud que hace que la vida sea pacifica y feliz.

Para encontrar el equilibrio hay que buscar la manera de alejar emociones negativas como el miedo que nos acosa en estos tiempos de pandemia, y el miedo se combate con el equilibrio en nuestras acciones, dándole oportunidad a nuestras emociones positivas como el amor, que se desarrolla con acciones como la empatía, bondad y caridad.

Ing. Adalberto Gutiérrez Chávez.


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