/ martes 29 de marzo de 2022

Tiempos & Espacios | Newton

Nacido el 4 de enero de 1643 en Reino Unido, Isaac Newton fue un físico y matemático inglés al que se le recuerda por sus grandes aportaciones a la ciencia, en especial por su ley de gravitación universal. Newton tenía la costumbre de apuntar en una libreta todo lo que le pasaba. El problema es que mezclaba datos importantes con banalidades. Es más, se conserva un “cuaderno de pecados” de cuando era joven, donde escribía todo lo que había hecho mal ese día. Por ejemplo: “impertinencia con mi madre” o “robo de cerezas”. Newton, además de descubrir la ley de la gravedad, resolvió una crisis financiera, y estaba algo obsesionado por los relojes de sol. Se desconoce si es cierto que la ley de la gravitación universal la descubrió viendo el manzano que todavía es posible visitar en su casa (a pesar de que le cayó un rayo). Voltaire difundió la anécdota que oyó a su ayudante en la Real Casa de la Moneda, John Conduitt. Lo que sí es cierto es que haber descubierto la gravedad fue un gran avance para la física. Él mismo empleó la fuerza gravitatoria a la hora de describir la trayectoria elicoidal de los planetas a petición de Halley. Trabajaba increíblemente en estos experimentos (dedicando más horas a esto que a la física o matemática), llegando a costarse todos los días a las dos o tres de la madrugada e incluso más tarde. En la primavera de 1693, probablemente un incendio que destruyó la mayor parte de sus apuntes sobre alquimia, sumiéndolo en una profunda depresión. Cuentan que a menudo Isaac Newton olvidaba asearse. Solía ser descuidado con la ropa y su carácter era adusto. Solamente se le vio reír una vez en clase, cuando un alumno le preguntó cuánto podría valer un “obsoleto” libro de Euclides. Cuando Isaac Newton era pequeño, mientras los demás niños se dedicaban a jugar, él construía objetos de madera, sobre todo maquetas.

En su infancia, Newton fabricó una original linterna de papel arrugado que usaba de camino a la escuela en las oscuras mañanas de invierno. ¡Era plegable y podía doblarla en su bolsillo! El joven Isaac estaba obsesionado con los relojes de sol, que supusieron para él un reto intelectual. Llenó su habitación con puntas para marcar las horas, las medias e incluso los cuartos. Aprendió a distinguir los equinoccios y los solsticios. Newton descubrió la gravitación universal e inició la teoría de la luz dando paseos por el campo el periodo que tuvo que dejar sus estudios universitarios en Cambridge debido a la peste bubónica, conocida como "la gran plaga" (1665-1667), y regresó a su casa familiar, en el pueblo de Woolsthorpe. En ese tiempo también construyó un telescopio de reflexión.
Alexander Pope, pensador inglés y poeta contemporáneo de Newton, escribió para él un famoso epitafio: La naturaleza y sus leyes yacían ocultas en la noche. Dios dijo "Sea Newton", y todo fue luz. Newton no solo trabajó como científico. Además, fue inspector de la Casa de la Moneda y logró suprimir las falsificaciones y estabilizar la moneda al establecer una reforma monetaria radical que resolvió la crisis financiera que existía por esa época en el país. Albert Einstein escribió sobre Newton: "Para él la naturaleza era un libro abierto, cuyas palabras podía leer sin esfuerzo alguno". Cuando vio el entierro de Newton y el concurrido funeral de Newton en la Abadía de Westminster, el famoso Voltaire, que estaba visitando Londres, dijo maravillado: "Inglaterra honra a un matemático de la misma manera que los súbditos de otras naciones honran a un rey".


Ramón Lerma | Profesor

Nacido el 4 de enero de 1643 en Reino Unido, Isaac Newton fue un físico y matemático inglés al que se le recuerda por sus grandes aportaciones a la ciencia, en especial por su ley de gravitación universal. Newton tenía la costumbre de apuntar en una libreta todo lo que le pasaba. El problema es que mezclaba datos importantes con banalidades. Es más, se conserva un “cuaderno de pecados” de cuando era joven, donde escribía todo lo que había hecho mal ese día. Por ejemplo: “impertinencia con mi madre” o “robo de cerezas”. Newton, además de descubrir la ley de la gravedad, resolvió una crisis financiera, y estaba algo obsesionado por los relojes de sol. Se desconoce si es cierto que la ley de la gravitación universal la descubrió viendo el manzano que todavía es posible visitar en su casa (a pesar de que le cayó un rayo). Voltaire difundió la anécdota que oyó a su ayudante en la Real Casa de la Moneda, John Conduitt. Lo que sí es cierto es que haber descubierto la gravedad fue un gran avance para la física. Él mismo empleó la fuerza gravitatoria a la hora de describir la trayectoria elicoidal de los planetas a petición de Halley. Trabajaba increíblemente en estos experimentos (dedicando más horas a esto que a la física o matemática), llegando a costarse todos los días a las dos o tres de la madrugada e incluso más tarde. En la primavera de 1693, probablemente un incendio que destruyó la mayor parte de sus apuntes sobre alquimia, sumiéndolo en una profunda depresión. Cuentan que a menudo Isaac Newton olvidaba asearse. Solía ser descuidado con la ropa y su carácter era adusto. Solamente se le vio reír una vez en clase, cuando un alumno le preguntó cuánto podría valer un “obsoleto” libro de Euclides. Cuando Isaac Newton era pequeño, mientras los demás niños se dedicaban a jugar, él construía objetos de madera, sobre todo maquetas.

En su infancia, Newton fabricó una original linterna de papel arrugado que usaba de camino a la escuela en las oscuras mañanas de invierno. ¡Era plegable y podía doblarla en su bolsillo! El joven Isaac estaba obsesionado con los relojes de sol, que supusieron para él un reto intelectual. Llenó su habitación con puntas para marcar las horas, las medias e incluso los cuartos. Aprendió a distinguir los equinoccios y los solsticios. Newton descubrió la gravitación universal e inició la teoría de la luz dando paseos por el campo el periodo que tuvo que dejar sus estudios universitarios en Cambridge debido a la peste bubónica, conocida como "la gran plaga" (1665-1667), y regresó a su casa familiar, en el pueblo de Woolsthorpe. En ese tiempo también construyó un telescopio de reflexión.
Alexander Pope, pensador inglés y poeta contemporáneo de Newton, escribió para él un famoso epitafio: La naturaleza y sus leyes yacían ocultas en la noche. Dios dijo "Sea Newton", y todo fue luz. Newton no solo trabajó como científico. Además, fue inspector de la Casa de la Moneda y logró suprimir las falsificaciones y estabilizar la moneda al establecer una reforma monetaria radical que resolvió la crisis financiera que existía por esa época en el país. Albert Einstein escribió sobre Newton: "Para él la naturaleza era un libro abierto, cuyas palabras podía leer sin esfuerzo alguno". Cuando vio el entierro de Newton y el concurrido funeral de Newton en la Abadía de Westminster, el famoso Voltaire, que estaba visitando Londres, dijo maravillado: "Inglaterra honra a un matemático de la misma manera que los súbditos de otras naciones honran a un rey".


Ramón Lerma | Profesor