/ miércoles 29 de mayo de 2019

SUICIDIO LENTO   

¡Deja me receto otro taquito de cáncer! Suele decir un buen amigo mientras se dispone a prender su cigarrillo número 10 del día. Mientras el denso humo sale por su boca esboza una sonrisa salpicada de ironía, sabe que ese cigarrillo es un asesino silencioso, sin embargo, es más fuerte en él la adicción a la nicotina que la conciencia y la razón.

Y mientras él, conscientemente contamina más sus, ya de por sí, muy negros pulmones, en su incontenible deseo de fumar, me hace cómplice de su desgracia, el humo viaja inevitablemente desde sus pulmones hacia los pulmones de este fumador pasivo.

El 31 de mayo la Organización Mundial de la salud (OMS) celebra el Día Mundial Sin Tabaco, en un intento por hacer consciencia del daño que este vicio causa al consumidor activo y al consumidor pasivo, en su campaña 2019 hace referencia al tabaco y la salud pulmonar, entre muchas otras consecuencias se destacan los siguientes daños a la salud.

Cáncer de pulmón. Fumar tabaco es la principal causa del cáncer de pulmón, responsable de más de dos tercios de las muertes por cáncer de pulmón en todo el mundo. La exposición al humo de tabaco ajeno en el hogar o en el lugar de trabajo también aumenta el riesgo de cáncer de pulmón.

Enfermedades respiratorias crónicas. Fumar tabaco es la causa principal de la enfermedad pulmonar obstructiva crónica (EPOC), una afección en que la acumulación de mucosidad con pus en los pulmones provoca una tos dolorosa y terribles dificultades respiratorias. El tabaco también exacerba el asma, que restringe la actividad y contribuye a la discapacidad.

Los bebés expuestos en el útero a las toxinas del humo de tabaco, a través del tabaquismo materno corren el riesgo de agravamiento del asma, la neumonía y la bronquitis, así como infecciones frecuentes de las vías respiratorias inferiores. En el mundo se calcula que 165 000 niños mueren antes de cumplir 5 años por infecciones de las vías respiratorias inferiores causadas por el humo de tabaco ajeno.

Tuberculosis. La tuberculosis (TB) daña los pulmones y reduce la función pulmonar, lo que se ve agravado por el tabaquismo. Los componentes químicos del humo del tabaco pueden desencadenar infecciones latentes de TB, con las que esta, infectada alrededor de una cuarta parte de la población.

Contaminación del aire. El humo del tabaco es una forma muy peligrosa de contaminación del aire de interiores: contiene más de 7000 sustancias químicas, 69 de las cuales se sabe que causan cáncer. Aunque el humo puede ser invisible e inodoro, puede permanecer en el aire hasta cinco horas, poniendo a las personas expuestas en riesgo de desarrollar cáncer de pulmón, enfermedades respiratorias crónicas y reducción de la función pulmonar.

A pesar de los múltiples esfuerzos que a lo largo del tiempo se han hecho como aumentar los impuestos, mostrar información gráfica y textual de forma dramática, limitar la venta a menores de edad, campañas de información, testimonios, espacios libres de humo, reglamentos, leyes y no sé cuántos esfuerzos más, el consumo de tabaco parece disminuir de forma muy lenta.

Las estadísticas muestran datos impresionantes si así se quiere ver, en el mundo el tabaco mata cada año a más de 7 millones de personas de las cuales 900 mil son personas expuestas al humo del tabaco ajeno, el tabaco mata hasta la mitad de sus consumidores, en el mundo hay más de mil millones de fumadores, hablar de los problemas de salud pública que esto representa es una obviedad.

En México más de 43 mil personas mueren al año por causas relacionadas con el tabaco, lo que representa un promedio de 120 personas por día, esto es el 8.4% de las muertes en México de acuerdo a datos del año 2018.

Finalmente mientras mi amigo termina de consumir su cigarrillo, es inevitable pensar que cada bocanada de humo contiene más de 7 mil sustancias químicas, de las cuales 69 de ellas son carcinógenas, son ellas la razón de este suicidio lento compartido.

leon7dg@hotmail.com

¡Deja me receto otro taquito de cáncer! Suele decir un buen amigo mientras se dispone a prender su cigarrillo número 10 del día. Mientras el denso humo sale por su boca esboza una sonrisa salpicada de ironía, sabe que ese cigarrillo es un asesino silencioso, sin embargo, es más fuerte en él la adicción a la nicotina que la conciencia y la razón.

Y mientras él, conscientemente contamina más sus, ya de por sí, muy negros pulmones, en su incontenible deseo de fumar, me hace cómplice de su desgracia, el humo viaja inevitablemente desde sus pulmones hacia los pulmones de este fumador pasivo.

El 31 de mayo la Organización Mundial de la salud (OMS) celebra el Día Mundial Sin Tabaco, en un intento por hacer consciencia del daño que este vicio causa al consumidor activo y al consumidor pasivo, en su campaña 2019 hace referencia al tabaco y la salud pulmonar, entre muchas otras consecuencias se destacan los siguientes daños a la salud.

Cáncer de pulmón. Fumar tabaco es la principal causa del cáncer de pulmón, responsable de más de dos tercios de las muertes por cáncer de pulmón en todo el mundo. La exposición al humo de tabaco ajeno en el hogar o en el lugar de trabajo también aumenta el riesgo de cáncer de pulmón.

Enfermedades respiratorias crónicas. Fumar tabaco es la causa principal de la enfermedad pulmonar obstructiva crónica (EPOC), una afección en que la acumulación de mucosidad con pus en los pulmones provoca una tos dolorosa y terribles dificultades respiratorias. El tabaco también exacerba el asma, que restringe la actividad y contribuye a la discapacidad.

Los bebés expuestos en el útero a las toxinas del humo de tabaco, a través del tabaquismo materno corren el riesgo de agravamiento del asma, la neumonía y la bronquitis, así como infecciones frecuentes de las vías respiratorias inferiores. En el mundo se calcula que 165 000 niños mueren antes de cumplir 5 años por infecciones de las vías respiratorias inferiores causadas por el humo de tabaco ajeno.

Tuberculosis. La tuberculosis (TB) daña los pulmones y reduce la función pulmonar, lo que se ve agravado por el tabaquismo. Los componentes químicos del humo del tabaco pueden desencadenar infecciones latentes de TB, con las que esta, infectada alrededor de una cuarta parte de la población.

Contaminación del aire. El humo del tabaco es una forma muy peligrosa de contaminación del aire de interiores: contiene más de 7000 sustancias químicas, 69 de las cuales se sabe que causan cáncer. Aunque el humo puede ser invisible e inodoro, puede permanecer en el aire hasta cinco horas, poniendo a las personas expuestas en riesgo de desarrollar cáncer de pulmón, enfermedades respiratorias crónicas y reducción de la función pulmonar.

A pesar de los múltiples esfuerzos que a lo largo del tiempo se han hecho como aumentar los impuestos, mostrar información gráfica y textual de forma dramática, limitar la venta a menores de edad, campañas de información, testimonios, espacios libres de humo, reglamentos, leyes y no sé cuántos esfuerzos más, el consumo de tabaco parece disminuir de forma muy lenta.

Las estadísticas muestran datos impresionantes si así se quiere ver, en el mundo el tabaco mata cada año a más de 7 millones de personas de las cuales 900 mil son personas expuestas al humo del tabaco ajeno, el tabaco mata hasta la mitad de sus consumidores, en el mundo hay más de mil millones de fumadores, hablar de los problemas de salud pública que esto representa es una obviedad.

En México más de 43 mil personas mueren al año por causas relacionadas con el tabaco, lo que representa un promedio de 120 personas por día, esto es el 8.4% de las muertes en México de acuerdo a datos del año 2018.

Finalmente mientras mi amigo termina de consumir su cigarrillo, es inevitable pensar que cada bocanada de humo contiene más de 7 mil sustancias químicas, de las cuales 69 de ellas son carcinógenas, son ellas la razón de este suicidio lento compartido.

leon7dg@hotmail.com