Para desarrollar éste artículo tomé el título de una genial caricatura de uno de nuestros extraordinarios moneros nacionales. Las “buenas conciencias” de la ultraderecha demuestran una vez más en México. Su estupidez y la miseria moral que los caracteriza. En días pasados y sin rubor han asumido la defensa de 31 bribones incrustados en el CONACYT que desde sus orígenes, priistas unos y panistas otros, están acusados por la FGR, de desviar cantidades millonarias de recursos provenientes del presupuesto nacional para engordar sus cuentas personales.
En el Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología, hay activos miles de investigadores, la mayoría de ellos verdaderos científicos, hombres y mujeres de prestigio, honorables, que con su trabajo ponen el nombre de México muy en alto, que aportan diariamente su talento y conocimiento al servicio de la Ciencia y la Tecnología para hacer de nuestro México un mejor país.
Les cuento una anécdota: A mediados de 2015 en una visita a la ciudad de México, conocí por azares de la casualidad a un becario del CONACYT, este ciudadano estaba estudiando un postgrado en Alemania, su beca rebasaba un monto mensual de 70 mil pesos, además le pagaban sus vuelos comerciales de avión. Este personaje llegó muy joven al PAN en lo que era el famoso “corredor azul” del Estado de México (los municipios del norte de la Entidad mexiquense) donde institucionalizaron los panistas el “robadero oficial” otorgándole sueldos y compensaciones millonarias e insultantes.
El ciudadano en mención fue escalando posiciones desde el gobierno municipal, para luego conectarse en el Gobierno Federal con Fox, trepando seguidamente con “El Borolas” donde en un golpe de suerte, se conectó al CONACYT, ya siendo funcionario de una Secretaría, con un salario mensual de cerca de 80 mil pesos en el Gobierno de Peña Nieto, solicitó la beca, con tanta suerte y desvergüenza, que encontrándose “estudiando” su postgrado, seguía cobrando su salario como empleado… de ese tamaño es la hipocresía y el cinismo de los conservadores.
Resultan deleznables las palabras expresadas a través de Twitter, por un personaje de nombre Aldo Alderete en contra de la esposa del Presidente de la República Andrés Manuel López Obrador y del mandatario mismo, a quienes acusa de atacar a la ciencia con un sin número de sandeces e insultos, que lo encueran y lo exhiben como lo que es: un verdadero sopenco e ignorante.
La acusación contra estos malandros, que defraudan al CONACYT, proviene directamente de la Bióloga María Elena Álvarez Buylla, quien es responsable de este consejo. La Fiscalía General de la República, junto con la Unidad de Inteligencia Financiera sólo están haciendo su trabajo y en consonancia con la Cuarta Transformación, su pretensión es acabar con la corrupción. Otros que salieron en defensa de los ladrones son columnistas como: Denise Dresser, la senadora Lily Téllez y otro personaje que hasta risa me da; la senadora Kenia López Rabadán, quien pide la comparecencia de la Directora del CONACYT Bióloga María Elena Álvarez Buylla y de Alejandro Hertz Manero, Fiscal General de la República ante el pleno Cameral.
Hay sin duda toda una andanada en los medios chayoteros con la intención de crear confusión, de generar incertidumbre y meterle miedo a la comunidad científica, hoy el CONACYT en la Cuarta Transformación, beneficia a más de 130 mil becarios cada año y apoya con más de dos mil millones de pesos a la ciencia, donde destacan más de mil ventiladores para pacientes COVID.
POSDATA: NO a las fake news.
