/ miércoles 1 de abril de 2020

¿Quedarse en casa?

En las últimas semanas nos hemos visto inundados de una cantidad importante de información sobre el COVID-19. Pero irremediablemente al generarse nueva información de diferentes fuentes, esta comienza a distorsionarse hasta convertirse en falacias… y es que el ser humano tiende a caer rápidamente en teorías conspirativas; como la falsa llegada del hombre a la luna, los terraplanistas o el área 51; ya sea por el hecho de negar la realidad, miedo o simplemente contradecir y cuestionar la información que nos llega; a final de cuentas esto es parte de nuestra naturaleza.

Volviendo al COVID-19, ¿Qué tan cierto es?, ¿Por qué debemos guardar distanciamiento social?, Si no es tan letal, ¿Es tan importante quedarse en casa? Estas preguntas se escuchan a diario y más entre la gente joven. Basándonos en los números nos daremos cuenta de que el virus en realidad no es tan letal. Su índice de mortalidad promedio fuera de Asia es de 0.7% según la Organización Mundial de la Salud (OMS), es decir que 7 personas de cada 1000 tienen un verdadero riesgo mortal; a comparación de las enfermedades cardiacas o la diabetes, que tienen un índice de mortalidad en México del 20% y 15% respectivamente. Esto significa que, de un grupo de 1000 personas, 200 morirían por afecciones del corazón, 150 por diabetes y 7 por Coronavirus.

Entonces, retomando la pregunta, si no es tan letal, ¿es tan importante quedarse en casa? La OMS estima que un 80% de la población mundial (8 de cada 10 personas) contraerá en algún punto el COVID-19; sólo es cuestión de tiempo, sin embargo, es el tiempo el factor en juego más importante. El temor internacional, es el colapso del sistema de salud; el cual se está viviendo en países europeos como Italia o España y puede darse en México. Esto debido a que esta cepa del Coronavirus es un virus nuevo, al cual ninguna persona ha estado expuesta antes como al sarampión o los diferentes tipos de influenza, los cuales pueden ser atendidos según vayan surgiendo nuevos casos.

Para ilustrar mejor este ejemplo, establezcamos un escenario ficticio: Supongamos que los 110,000 habitantes de Parral se enfermaran al mismo tiempo, digamos también que entre todos los hospitales de la región contemos con 100 camas para las personas que requieran cualquier tipo de atención médica. Basándonos en la tasa de mortalidad encontraríamos que de esos 110,000 habitantes lamentablemente fallecerían 770, y ¿qué sucede además con los casos graves? De acuerdo con la OMS, el 20% de los casos de COVID-19 requerirán atención médica y en circunstancias normales sobrevivirían gracias a esta. En nuestro escenario, esto se traduciría en un total de 22,000 Parralenses que requerirían atención médica (sin contar las demás enfermedades comunes o embarazos), si solo contamos con 100 camas con personal y equipo médico para atender a estas personas ¿qué pasa con el resto?, tal vez algunos logren recuperarse con medicamentos y los pertinentes cuidados, aunque estaríamos arriesgando a más de 20,000 personas cuando el verdadero riesgo en sí era sólo para 770.

Es aquí donde reside la importancia del tiempo, lo que se busca con este distanciamiento social es reducir la velocidad de contagio, es decir, evitar contagiarnos todos a la vez y dar tiempo y espacio a nuestro sistema de salud.

Por estas razones, mi opinión de esta semana es para reforzar el mensaje del subsecretario de salud, el Dr. López-Gatell y les digo quédense en casa…quédense en casa.


En las últimas semanas nos hemos visto inundados de una cantidad importante de información sobre el COVID-19. Pero irremediablemente al generarse nueva información de diferentes fuentes, esta comienza a distorsionarse hasta convertirse en falacias… y es que el ser humano tiende a caer rápidamente en teorías conspirativas; como la falsa llegada del hombre a la luna, los terraplanistas o el área 51; ya sea por el hecho de negar la realidad, miedo o simplemente contradecir y cuestionar la información que nos llega; a final de cuentas esto es parte de nuestra naturaleza.

Volviendo al COVID-19, ¿Qué tan cierto es?, ¿Por qué debemos guardar distanciamiento social?, Si no es tan letal, ¿Es tan importante quedarse en casa? Estas preguntas se escuchan a diario y más entre la gente joven. Basándonos en los números nos daremos cuenta de que el virus en realidad no es tan letal. Su índice de mortalidad promedio fuera de Asia es de 0.7% según la Organización Mundial de la Salud (OMS), es decir que 7 personas de cada 1000 tienen un verdadero riesgo mortal; a comparación de las enfermedades cardiacas o la diabetes, que tienen un índice de mortalidad en México del 20% y 15% respectivamente. Esto significa que, de un grupo de 1000 personas, 200 morirían por afecciones del corazón, 150 por diabetes y 7 por Coronavirus.

Entonces, retomando la pregunta, si no es tan letal, ¿es tan importante quedarse en casa? La OMS estima que un 80% de la población mundial (8 de cada 10 personas) contraerá en algún punto el COVID-19; sólo es cuestión de tiempo, sin embargo, es el tiempo el factor en juego más importante. El temor internacional, es el colapso del sistema de salud; el cual se está viviendo en países europeos como Italia o España y puede darse en México. Esto debido a que esta cepa del Coronavirus es un virus nuevo, al cual ninguna persona ha estado expuesta antes como al sarampión o los diferentes tipos de influenza, los cuales pueden ser atendidos según vayan surgiendo nuevos casos.

Para ilustrar mejor este ejemplo, establezcamos un escenario ficticio: Supongamos que los 110,000 habitantes de Parral se enfermaran al mismo tiempo, digamos también que entre todos los hospitales de la región contemos con 100 camas para las personas que requieran cualquier tipo de atención médica. Basándonos en la tasa de mortalidad encontraríamos que de esos 110,000 habitantes lamentablemente fallecerían 770, y ¿qué sucede además con los casos graves? De acuerdo con la OMS, el 20% de los casos de COVID-19 requerirán atención médica y en circunstancias normales sobrevivirían gracias a esta. En nuestro escenario, esto se traduciría en un total de 22,000 Parralenses que requerirían atención médica (sin contar las demás enfermedades comunes o embarazos), si solo contamos con 100 camas con personal y equipo médico para atender a estas personas ¿qué pasa con el resto?, tal vez algunos logren recuperarse con medicamentos y los pertinentes cuidados, aunque estaríamos arriesgando a más de 20,000 personas cuando el verdadero riesgo en sí era sólo para 770.

Es aquí donde reside la importancia del tiempo, lo que se busca con este distanciamiento social es reducir la velocidad de contagio, es decir, evitar contagiarnos todos a la vez y dar tiempo y espacio a nuestro sistema de salud.

Por estas razones, mi opinión de esta semana es para reforzar el mensaje del subsecretario de salud, el Dr. López-Gatell y les digo quédense en casa…quédense en casa.