/ jueves 8 de abril de 2021

Punto gélido | Día de la salud

En términos ideales todos los seres humanos deseamos tener una higiene aceptable y buenos hábitos alimenticios, que sirvan como sustento para tener una mejor salud, sin embargo, no siempre es posible llegar a este estado ideal, la realidad por desgracia nos desnuda un escenario muy diferente, donde las condiciones de la población en términos de alimentación, vivienda, higiene, oportunidades, cultura y más, son muy diversos, por consiguiente, difíciles y desiguales.

Hoy el mundo está sumergido en medio de una pandemia, ello ha permitido que se haga más evidente la profunda desigualdad que existe, en especial en términos de salud. Así, para algunos habitantes del orbe es factible el poder llevar una vida más sana, el acceso a los servicios de salud es sencillo; existen y están al alcance de la mano, ello gracias a diversas circunstancias que van desde las condiciones en las que se nace, se vive, se trabaja y se envejece, de alguna forma son privilegiados, talvez por una gracia o por el esfuerzo genuino.

No sucede lo mismo con otro muy amplio sector de la población en el mundo, los cuales continúan luchando cada día para superar condiciones económicas precarias, entornos inseguros, falta de agua, de vivienda, poca o nula educación, empleos mal remunerados o inexistentes, alimentación insuficiente, servicios de salud fuera de su alcance, en este último rubro, hasta el año 2018 la mitad de la población mundial, todavía no podía acceder a los servicios de salud que necesita, asumiendo con ello las consecuencias que tienen que ver con un sufrimiento innecesario, enfermedades evitables y muertes prematuras.

Si a esto le agregamos que estamos viviendo en medio de una pandemia, la realidad toma otra dimensión, en principio las medidas que los diferentes gobiernos han adoptado para contener la pandemia, representan por sí solas una afectación a la vida de las personas, sobra decir que el mayor impacto de la pandemia ha sido en la población que ya era vulnerable. Esto es injusto y obliga a que se busquen los conductos para evitarlo.

El Día Mundial de la Salud es el 7 de abril, se creó para conmemorar la fundación de la OMS, en el año de 1948. El objetivo, es abrir espacios de discusión social sobre los logros y desafíos que ha tenido la población en la evolución de la salud en el mundo, también se busca una mayor educación dirigida a tener un estado de salud ideal, tratamientos, prevención, etc., así cada año se elige un rubro en particular, a fin de profundizar en el tema y poder establecer alternativas de solución. Para este 2021 el tema es “Construir un mundo más justo y saludable”, con un claro enfoque a los efectos de la pandemia.

Las condiciones son muy desiguales para todos, celebrar el Día Internacional de la Salud en estos momentos, talvez sea un contrasentido. Lo que si debemos hacer es esforzarnos todos por crear y mantener en la medida de las posibilidades, hábitos que nos permitan cuidarnos física y mentalmente, para ello es preciso buscar y tener la mayor información posible y llevarla a la práctica.

En términos ideales todos los seres humanos deseamos tener una higiene aceptable y buenos hábitos alimenticios, que sirvan como sustento para tener una mejor salud, sin embargo, no siempre es posible llegar a este estado ideal, la realidad por desgracia nos desnuda un escenario muy diferente, donde las condiciones de la población en términos de alimentación, vivienda, higiene, oportunidades, cultura y más, son muy diversos, por consiguiente, difíciles y desiguales.

Hoy el mundo está sumergido en medio de una pandemia, ello ha permitido que se haga más evidente la profunda desigualdad que existe, en especial en términos de salud. Así, para algunos habitantes del orbe es factible el poder llevar una vida más sana, el acceso a los servicios de salud es sencillo; existen y están al alcance de la mano, ello gracias a diversas circunstancias que van desde las condiciones en las que se nace, se vive, se trabaja y se envejece, de alguna forma son privilegiados, talvez por una gracia o por el esfuerzo genuino.

No sucede lo mismo con otro muy amplio sector de la población en el mundo, los cuales continúan luchando cada día para superar condiciones económicas precarias, entornos inseguros, falta de agua, de vivienda, poca o nula educación, empleos mal remunerados o inexistentes, alimentación insuficiente, servicios de salud fuera de su alcance, en este último rubro, hasta el año 2018 la mitad de la población mundial, todavía no podía acceder a los servicios de salud que necesita, asumiendo con ello las consecuencias que tienen que ver con un sufrimiento innecesario, enfermedades evitables y muertes prematuras.

Si a esto le agregamos que estamos viviendo en medio de una pandemia, la realidad toma otra dimensión, en principio las medidas que los diferentes gobiernos han adoptado para contener la pandemia, representan por sí solas una afectación a la vida de las personas, sobra decir que el mayor impacto de la pandemia ha sido en la población que ya era vulnerable. Esto es injusto y obliga a que se busquen los conductos para evitarlo.

El Día Mundial de la Salud es el 7 de abril, se creó para conmemorar la fundación de la OMS, en el año de 1948. El objetivo, es abrir espacios de discusión social sobre los logros y desafíos que ha tenido la población en la evolución de la salud en el mundo, también se busca una mayor educación dirigida a tener un estado de salud ideal, tratamientos, prevención, etc., así cada año se elige un rubro en particular, a fin de profundizar en el tema y poder establecer alternativas de solución. Para este 2021 el tema es “Construir un mundo más justo y saludable”, con un claro enfoque a los efectos de la pandemia.

Las condiciones son muy desiguales para todos, celebrar el Día Internacional de la Salud en estos momentos, talvez sea un contrasentido. Lo que si debemos hacer es esforzarnos todos por crear y mantener en la medida de las posibilidades, hábitos que nos permitan cuidarnos física y mentalmente, para ello es preciso buscar y tener la mayor información posible y llevarla a la práctica.