/ domingo 14 de junio de 2020

Paz y libre albedrío

(DESDE LA CAPITAL).

15:20, miércoles; oí el altoparlante a alto volumen. Con grabación, el ambulante adulto mayor anunciaba sus ofertas. Él pensó otra cosa; Yo recordé un faltante en la despensa, entre 8, frutas y verduras más alcalinos, que mantienen mi PH al 5.5, e inmune al 100 contra el COVID-19. Con mi protección salí al pasillo, volteé a mi izquierda. La troca parada en la esquina apagó el sonido; bajaba cuando salí a su encuentro. Para detenerlo tuve que gritar. Llegué atrás de la caja con capota, en el fondo iba otro más anciano; ambos sin cubre-boca. Pregunté al conductor el precio del producto; aclaré que no traía “cambio”; aceptó; pedí 1 kilo. Mientras él fue a, y vino de la cabina con el vuelto, pregunté al otro, por su cubre-boca; respondió lo que esperaba; “me asfixio con el calor”. Dios le cuide.


A partir del 1° de junio la Organización Mundial de la Salud, bajo 6 fundamentales criterios recomendó a los países que podrían relajar las restricciones iniciales de la pandemia en la “nueva normalidad”, bajo un sistema escalonado para determinar, qué sectores podían reanudar actividades. Por ello, el Gobierno federal mexicano pidió a la gente siguiera en casa, dado que en todo el país hay riesgo máximo de contagios; que gradualmente acataría las recomendaciones de la OMS. La nueva normalidad no impide usar barba y bigote y si el uso de corbatas y joyas, que podrían alojar virus y micro organismos. Recomienda, no compartir entre los trabajadores; celular, utensilios de cocina, EPP, papelería y demás objetos de uso cotidiano.


Desde 1948 la OMS define que salud es, estar bien, consciente de sus actitudes propias; afrontar presiones normales de la vida; trabajo productivo y fructífero; ser capaz de contribuir en comunidad. La salud mental es base del bienestar y ejercicio efectivo del individuo en comunidad. Representar funciones mentales de tendencia, estado de ánimo y conducta, que le permitan mantener actividades productivas y la relación interpersonal; adaptarse en lo posible a los cambios; afrontar la adversidad.


A López Gatell, subsecretario de Salud federal, vocero de la estrategia vs el COVID-19, le inquieta que estados con gobierno opositor (Jalisco y NL) sigan la agenda político electoral; oponiéndose a medidas sanitarias federales. Sólo manteniendo control de movilidad en 3 meses siguientes, habrá cifras fieles de entre 25 y 30mil defunciones. Las cifras iniciales fueron entre 6 y 8 mil decesos, pero se trastocaron los principios técnicos y científicos rectores del manejo epidémico. Por ello, la pandemia llegará a su pico la próxima semana y en otras zonas se irá hasta octubre.


Antes del relax se debe demostrar que el contagio está controlado, que el sistema de salud pública tiene capacidad de identificar, aislar, rastrear contactos y minimizar riesgos de brotes en sectores de alta vulnerabilidad, como hogares de personas de la 3ª edad y en condiciones de hacinamiento; será indispensable en centros de trabajo la sana distancia. Énfasis en la importante tarea de, una vez controlada la crisis sanitaria, recuperar con descanso laboral la fuerza de salud. Probablemente, por atender a pacientes del virus, se desplazó la aplicación de vacunas a niñ@s.

(DESDE LA CAPITAL).

15:20, miércoles; oí el altoparlante a alto volumen. Con grabación, el ambulante adulto mayor anunciaba sus ofertas. Él pensó otra cosa; Yo recordé un faltante en la despensa, entre 8, frutas y verduras más alcalinos, que mantienen mi PH al 5.5, e inmune al 100 contra el COVID-19. Con mi protección salí al pasillo, volteé a mi izquierda. La troca parada en la esquina apagó el sonido; bajaba cuando salí a su encuentro. Para detenerlo tuve que gritar. Llegué atrás de la caja con capota, en el fondo iba otro más anciano; ambos sin cubre-boca. Pregunté al conductor el precio del producto; aclaré que no traía “cambio”; aceptó; pedí 1 kilo. Mientras él fue a, y vino de la cabina con el vuelto, pregunté al otro, por su cubre-boca; respondió lo que esperaba; “me asfixio con el calor”. Dios le cuide.


A partir del 1° de junio la Organización Mundial de la Salud, bajo 6 fundamentales criterios recomendó a los países que podrían relajar las restricciones iniciales de la pandemia en la “nueva normalidad”, bajo un sistema escalonado para determinar, qué sectores podían reanudar actividades. Por ello, el Gobierno federal mexicano pidió a la gente siguiera en casa, dado que en todo el país hay riesgo máximo de contagios; que gradualmente acataría las recomendaciones de la OMS. La nueva normalidad no impide usar barba y bigote y si el uso de corbatas y joyas, que podrían alojar virus y micro organismos. Recomienda, no compartir entre los trabajadores; celular, utensilios de cocina, EPP, papelería y demás objetos de uso cotidiano.


Desde 1948 la OMS define que salud es, estar bien, consciente de sus actitudes propias; afrontar presiones normales de la vida; trabajo productivo y fructífero; ser capaz de contribuir en comunidad. La salud mental es base del bienestar y ejercicio efectivo del individuo en comunidad. Representar funciones mentales de tendencia, estado de ánimo y conducta, que le permitan mantener actividades productivas y la relación interpersonal; adaptarse en lo posible a los cambios; afrontar la adversidad.


A López Gatell, subsecretario de Salud federal, vocero de la estrategia vs el COVID-19, le inquieta que estados con gobierno opositor (Jalisco y NL) sigan la agenda político electoral; oponiéndose a medidas sanitarias federales. Sólo manteniendo control de movilidad en 3 meses siguientes, habrá cifras fieles de entre 25 y 30mil defunciones. Las cifras iniciales fueron entre 6 y 8 mil decesos, pero se trastocaron los principios técnicos y científicos rectores del manejo epidémico. Por ello, la pandemia llegará a su pico la próxima semana y en otras zonas se irá hasta octubre.


Antes del relax se debe demostrar que el contagio está controlado, que el sistema de salud pública tiene capacidad de identificar, aislar, rastrear contactos y minimizar riesgos de brotes en sectores de alta vulnerabilidad, como hogares de personas de la 3ª edad y en condiciones de hacinamiento; será indispensable en centros de trabajo la sana distancia. Énfasis en la importante tarea de, una vez controlada la crisis sanitaria, recuperar con descanso laboral la fuerza de salud. Probablemente, por atender a pacientes del virus, se desplazó la aplicación de vacunas a niñ@s.