FORTUNA.- El infortunio de los ¿beneficiarios? de La Fortuna. Para octubre se inauguraban, con bombo y platillo, las viviendas para los que no tienen y tampoco podrían acceder a créditos.
OPORTUNIDAD.- La oportunidad era sólo un pretexto para darle plusvalía a los terrenos aledaños. La urbanización llegaba a esos lugares costeada por las Arcas municipales, las cuales después engrosaran los bolsillos de los suertudos que tenían información privilegiada y que habían adquirido terrenos muchos terrenos en las inmediaciones.
OLVIDO.- Sin embargo, con el paso del tiempo la colonia se les olvidó. A unos meses de haber sido entregada, aún está inconclusa y con serias deficiencias.
ÚLTIMA.- El último de los estragos tiene que ver con el servicio sanitario. No existe el saneamiento. Las aguas negras rebasan los depósitos. La conexión a la línea general no opera y la pestilencia, que es la avanzada de las infecciones, tiene su epicentro en el cárcamo desde donde se esparce “a los infortunados de La Fortuna”.
DESLINDE.- La Junta de Aguas, encargada de dar el saneamiento, ya se deslindó; oficialmente no conoce la existencia de esa colonia porque simplemente no ha sido entregada para su administración en esa materia.
DEUDA.- Otro adelanto y otra ocurrencia cuyas consecuencias las pagan los ciudadanos. Esta situación que priva en esa colonia hace recordar, como en la colonia Parral Vive o Federico Ferro Gay, las autoridades municipales independientes denunciaban los malos trabajos que les había heredado la administración estatal anterior y mostraban como prueba irrefutable un colector insuficiente y colapsado. Víctor Gutiérrez mostraba sorpresa en aquel entonces por el trabajo que tendrían que hacer para corregir lo que estaba mal de origen.
PRESENTE.- Guardando proporciones como los de La Fortuna. Hoy la historia no es diferente, sólo que los denunciantes del ayer son los que generaron este problema y el titular de la Junta de Aguas ni siquiera se asoma, como sí lo hizo en el otro caso. La diferencia es que ahora no evidencia a la anterior administración. La responsabilidad es de los actuales. Las autoridades sanitarias, tampoco hacen nada.
TEMAS.- Hay de temas a temas en la agenda estatal. No se puede soslayar que el de la seguridad simplemente no da. No avanza y es grave.
DENUNCIA.- En el contexto estatal, hay temor. Incluso hay un Alcalde, el de Batopilas, que mientras se documenta que fue objeto de una intimidación, él dice no pasa nada. Entonces ¿no pasa nada en el estado? Quienes tienen la posibilidad de alzar la voz guardan silencio y toleran.
SEGURIDAD.- Mientras que en otros casos se maquilla la realidad. Existen levantones o desaparición forzada de personas; se denuncian, pero oficialmente no pasa nada. El mismo Secretario de Seguridad Pública asegura que el estado está libre de esa calamidad, al menos desde que llegó a la fecha. ¿No pasa nada?
TEMAS.- Mientras que en otras esferas las estrategias de combate a los delitos son cuidadas porque hay que dar resultados y eso está bien, pero debe ser una política integral.
