Este aspecto económico y social de Parral es muy interesante, porque hay muchas personas que saben del buen comer, y no se deja de lado a otros que no sabemos y frijoles comemos, pero en alguna oportunidad, acudimos a degustar lo que se ofrece por los restauranteros del pueblo, y hoy ciudad, con la idea que va tomando una forma más dinámica y versátil de lo que se ofrece en nuestra ciudad, y esta variedad indica un avance muy importante en las rancias costumbres de la sociedad parralense, y las diferente opciones tanto para nosotros como para el turismo que llega a nuestra entidad, es lo importante, los avances y espero el apoyo a ellos y ellas para que las materias primas que se utilizan sean de la ciudad y la derrama económica ayude y beneficie a Parral.
Pero agregue el personal de aquí, laborando y por consiguiente, a sus familias, lo que da cierto bienestar social, o sea un crecimiento social, económico, familiar, y una cierta estabilidad en la vida diaria.
Es lógico que piense que voy a criticar como dicen es mi costumbre, lo que le suplico que no me compare, y a lo que voy, es que me da gusto tener lugares variados de cosas diferentes en los últimos años, y atendido por jóvenes, mujeres y hombres, que dejan de manifiesto la capacidad de servicio tan importante y que invitan a repetir la ida a ese lugar, aparte de saber a dónde invitar a los familiares y amigos sin caer en lo mismo, por lo tanto eso es importante para no formar rutinas, hasta en la comida.
Los lugares establecidos se respetan, lo que hago en añadidura es en los recientes o nuevos, porque se suman a la actividad restaurantera de la ciudad, aunque hay que señalar que es de todos, no solo de algunos, como es la necia costumbre de pocos, y con el mismo derecho se usan, y voy a que es mejor que los apoyemos, vayamos quien vayamos, esos esfuerzos son loables, y necesarios para salir de la mediocridad de lo que eran nuestras actividades, y que están al alcance de todos, empleados, trabajadores, hasta profesionistas.
La diversidad de menús, es importante, así como la calidad de la mano de obra, es un plus a nuestra sociedad, y campo de trabajo a egresados de escuelas de gastronomía, en conjunto con más compras a negocios de comidas o materias primas como frutas, carnes, verduras, especias, utensilios de cocina, decoraciones, y el campo de acción de un restaurant.
Las medidas de salubridad son obligatorias, pero con inteligencia se pueden adecuar en un lugar cálido, acogedor y seguro para comer, y esto, es lo que en realidad buscamos los clientes, y turistas, lo que sea un lugar seguro, es mejor para todos.
Los medios rústicos, revolucionarios, modernos, son para todos los gustos, nuestros gustos, pero este arte es muy delicado aunque parezca fácil, y otro elemento, los clientes que seamos sanos y propositivos, no criticones, porque muchas veces la mala clientela echamos a perder lugares, porque ni el dinero evita que seamos pésimos consumidores o consumidoras, ni las actitudes insultantes de la que hacemos gala, ya que en no pocas ocasiones ofendemos a una persona que nos presta el servicio de mesero, y le recuerdo de favor que sienta y piense que es un ser humano igual que uno, así como su familia, por cierto, desde el filósofo Platón, lo refería, el respeto al servidor de esta naturaleza.
